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Una misión dirigida por Cristo

Cristo como el Señor de todo puede verse claramente en la Gran Comisión cuando miramos con nuevos ojos. Cristo ordena a Sus discípulos ir, bautizar, enseñar y multiplicarse. En este mensaje sobre Mateo 28:16–20, David Platt invita a los cristianos a experimentar y participar más en la obra que Cristo está haciendo. La obra de Cristo se puede ver en tres partes.

  1. El poder de Cristo
  2. El plan de Cristo
  3. La presencia de Cristo

Si  tiene su Biblia, y espero que sí, quiero invitarlo a que la abra conmigo en Mateo 28. Antes de entrar en la Palabra de Dios, quiero darle una imagen para que gentilmente la mantengan en sus mentes mientras iniciamos este estudio, esta trata de lo que significa ser parte de una Iglesia que es Indetenible.

Recuerdo, recientemente, estaba en una conferencia en un campamento de Tennessee y parte de la semana involucraba rafting en el Río Ocoee.

Básicamente esto funciona de la siguiente manera, existe un bote en donde hay espacio para seis personas, dos en el frente, dos en el medio y dos atrás. Al final hay otra persona que se sienta en popa. Es el guía y su única responsabilidad es asegurarse que todos vivan a través de la experiencia de manera que a usted le gusta el guía. Es bueno tenerlo ahí.

Y estábamos entrando en el Río Ocoee ese día y estaba realmente alto y entonces supimos que el agua estaría bien ruda, entonces decidí que el mejor lugar para mí era estar justo al lado del guía en la parte de atrás. Por lo que posicioné inmediatamente allí, justo al lado de él, de manera que si me cayera él salvaría mi vida con un mínimo de esfuerzo.

Entonces, Heather y yo nos montamos y otras cuatro personas de esta conferencia y empezamos el rafting río abajo, y básicamente, si usted lo ha estado antes, usted sabe cómo es. Las personas en el frente son las que realmente tienen la acción. Es decir, son las personas que está chocando con los rápidos de primera mano, el agua llega hasta sus rostros y si usted se sienta en la parte de atrás, básicamente solamente se está navegando, por así decirlo. Es un buen viaje, disfrutable, pero no tan intenso como el frente.

Vamos bajando casi llegando al final y el guía nos dice: “Esta bien, chicos, vamos al último rápido sobre el Ocoee, y este es el más peligroso, el rápido más intenso” y dijo “Necesito un voluntario que esté dispuesto a agarrar el toro por los cuernos”

Ahora, algunos de ustedes puede que estén familiarizados con esta terminología, nunca antes había escuchado “agarrar el toro por los cuernos”, y pensé, uno de estos hombres, alguno de los participantes de la conferencia son lo suficientemente estúpidos para salir y agarrar un toro por los cuernos de manera que yo me voy a quedar por aquí atrás. Y entonces, eso era lo que estaban planeando hacer, pero ellos todos comenzaron a señalarme a mí diciendo, “David agarrarías el toro por los cuernos. A David le encantaría agarrar el toro por los cuernos” y estoy pensando, de dónde sacaron eso. Era como una conspiración para asesinar al conferenciante. Y ellos dijeron: Bueno David, eres tú quien lo va a hacer.

Entonces el guía se pone justo frente a mi cara y dice “Perfecto, esto es lo que vas a hacer” él dice, “Lo que tenemos que hacer es ir al frente del bote” y él dijo, y yo dije “Esta bien, me puedo sentar en uno de esos asientos.” Él dijo, “No, no, no. Tienes que sentarse en el mismísimo borde, en la punta del bote. Tienes que dejar tus piernas colgando en el frente del bote. Y lo que vas a hacer es que vas a extenderte hacia abajo y vas a agarrar el anillo que está allá abajo, un anillo bien pequeñito por cierto. Lo vas a agarrar hacia abajo a este anillo. Y vamos a ir hacia abajo en los rápidos y vas a poner la cara primero agarrado a este anillo poniendo toda tu esperanza en que no te caigas”

Todo están diciendo “Sí” y estoy pensando “De ninguna manera” y ellos están como diciendo sí hazlo. Excepto por Heather, Heather está como diciendo “No te mueras”, al mismo tiempo estoy escabulléndome hacia el frente del bote. Me acerco a la punta. Pongo mis piernas sobre el frente y alcanzo el anillo lo más fuerte posible. Empezamos a descender en este rápido. Y estoy golpeando las olas justo en mi rostro. Ellas vienen directamente a mí. Y estoy en la punta del bote experimentando todo lo que esas olas tienen que ofrecer y empieza a ponerse bien rudo y todos me están animando, de manera que empiezo a experimentar un poco de adrenalina y empiezo a pensar, nunca he agarrado un toro por los cuernos pero he visto cómo lo hacen en la TV. Y sé lo suficiente como para estar consciente de que aquellos que hacen rodeo con toros no se agarran con las dos manos. ¿Cierto? Ustedes saben, ellos tienen una mano suelta, así pensaba yo, bueno, si voy a tomar el toro por los cuernos, entonces voy a hacerlo. Y entonces, empiezo a sentirme un poco de exceso de confianza, y entonces suelto el anillo con una mano. Y empiezo realmente a tomar el toro por los cuernos.

Bueno, está a punto de que el toro decida que es suficiente. Y hace una rabieta que me hace soltarlo. Para este momento estoy debajo del toro. Y el bote está literalmente encima de mí. Y vamos cuesta abajo. Las olas empiezan a apilarse sobre mí. Están tratando de alcanzarme y agarrarme. Heather está diciendo “No te mueras ahora” ellos están tratando de halarme de vuelta al bote pero no lo pueden hacer. Sigo bajando el resto del rápido bajo el agua, bajo el bote aferrándome a la vida.

Finalmente, atravesamos el rápido y me levantan. No saben si estoy vivo. No saben si estoy respirando. Tengo agua que está saliendo de mi nariz, mis ojos, mi boca. Es decir, está saliendo por todos lados. Y ellos me miran y están como diciendo: ¿Estas bien? ¿Te sientes bien? Finalmente, recobro el aliento. Miro hacia arriba y digo, “Eso fue increíble” y lo fue. Fue muy diferente a estar sentado en la parte de atrás del bote. Experimenté, literalmente, todo lo que el río tenía que ofrecer.

Quiero invitarles, mientas nos sumergimos en las Escrituras, quiero invitarle al frente del bote conmigo. Lo que quiero decir con esto es lo siguiente: Piense que todos nosotros estamos en el bote. La mayoría de nosotros que ha puesto la fe en Cristo, que han sido perdonados sus pecados. Hemos confiado en Él y hasta somos activos en la Iglesia. Todos estamos en el bote. Y hasta unas semanas atrás, anduvimos desde el Salmo 65; anduvimos desde Génesis hasta Apocalipsis acerca de cómo fuimos creados para hacer la gloria de Dios en todas las naciones.

Y a lo que quiero invitarlos es  a que vengan desde la parte de atrás a la parte de adelante. Y quiero invitarlos al frente de lo que creo que es la misión de la Iglesia que está en los próximos seis sermones. Quiero invitarle a que pruebe y experimente todo lo que este río tiene que ofrecer y quiero que sepa que es un poco más peligroso aquí en el frente y es un poco más riesgoso. Pero quiero que sepan desde el principio que vale la pena.

Entonces, vamos a ver en el pasaje de las Escrituras de Mateo capítulo 28, un pasaje, creo, es familiar a todos ustedes. Este es uno de esos pasajes de la Escritura que es bastante conocido en la Iglesia, pero recibe, creo, adherencia nominal al día de hoy, en la Iglesia y lo que quiero que hagamos es, que nos sumerjamos en oración, que Dios por Su Espíritu, nos de ojos frescos mientras miramos a Jesús impartiendo palabras a Sus discípulos.

Mateo 28:16. La Biblia dice, “Pero los once discípulos se fueron a Galilea, al monte donde Jesús les había ordenado.” Ahora, una nota al margen, cada vez que usted ve a Jesús yendo a la montaña, es porque es algo importante. Significa un mensaje importante, Mateo 5-7 el Sermón del Monte. Luego Mateo 17, justo en medio de la transfiguración que sucede en el monte. Vemos a Jesús llegando al final de Su vida en la tierra, en este punto Él dice, “Los llevaré al monte”

Mensaje importante, dice, “Y cuando le vieron, le adoraron; pero algunos dudaban. Y Jesús se acercó y les habló diciendo: Toda potestad me es dada en el cielo y en la tierra. Por tanto, id, y haced discípulos a todas las naciones, bautizándolos en el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo; enseñándoles que guarden todas las cosas que os he mandado; y he aquí yo estoy con vosotros todos los días, hasta el fin del mundo. Amén.” (Mateo 28:17-20)

Lo que quiero que hagamos es dividir este pasaje en tres secciones diferentes. Quiero que veamos el poder de Cristo y el plan de Cristo y luego la presencia de Cristo. Aquí vamos.

El Poder de Cristo

Empecemos con el primero, el poder de Cristo. Esta es la parte de la Gran Comisión que normalmente utilizamos.  Vayamos a la carne, “Por tanto, id y haced discípulos a todas las naciones” (Mateo 28:19)  De lo que tenemos que darnos cuenta es que todo lo que Jesús está diciendo aquí depende del hecho de que Él tiene toda autoridad en el cielo y en la tierra. Le ha sido dada.

Ahora, si Jesús dice que Él tiene toda la autoridad en el cielo y en la tierra, entonces, ¿Qué quiere decir que no está bajo Su autoridad? Eso, prácticamente, lo cubre todo. Él la tiene. Él dice: “Soy el Señor sobre todas las cosas. Tengo autoridad sobre el cielo y la tierra” Él había muerto en la cruz, se levantó de la tumba, conquistó la muerte, el pecado, y la tumba, y por lo tanto, Él era Señor sobre todas las cosas.

Jesús es Señor de nuestras vidas

Pienso que esto tiene dos significados, número uno, El es Señor de nuestras vidas. Él es Señor de todas nuestras vidas.

Usted sabe, lo encuentro interesante a veces, que algunas personas se me acercan y dicen: “David, he decidido hacer a Jesús Señor de mi vida” ¿Cuál es el problema de esta afirmación? Usted no tuvo opción en este asunto. Jesús es Señor de cada una de nuestras vidas, ¿Qué dice la Biblia? Un día toda rodilla se doblará en los cielos y en la tierra y debajo de la tierra y toda lengua confesará que Jesucristo es el Señor. La pregunta es, ¿Lo haremos ahora, o lo haremos cuando sea demasiado tarde?  La pregunta no es ¿Es Él el señor de nuestras vidas?  Él es el Señor de  todas nuestras vidas. La pregunta es ¿Nos hemos sometido a Su señorío?

Ahora, ¿Qué quiere decir esto? Básicamente significa que hemos rendido todo nuestro derecho a determinar la dirección de nuestras vidas. Hemos rendido cada derecho a determinar hacia dónde vamos con nuestras vidas. Si Él es Señor y hemos puesto nuestra fe en Él y confiado en Él para salvarnos de nuestros pecados, eso significa, que ya no tomamos las decisiones de nuestras vidas.

Y quiero hablar realmente franco. Hombre, no eres quien toma la decisión en tu familia, no más. Ya no eres tú quien toma la decisión en lo que vas a hacer con tu carrera o tus ambiciones. No se trata de lo que deseas. Cristo es quien toma las decisiones. Usted  ha rendido su derecho a determinar la dirección de su vida.

Estudiantes, mientras piensan en su futuro, a qué escuela van a ir, qué van a estudiar, qué van a hacer con sus vidas. Ya no depende de ustedes, depende de Cristo. Él toma las decisiones. Usted está en segundo lugar. Hemos rendido cada derecho a determinar la dirección de sus vidas. Ustedes han rendido el derecho a determinar la dirección de esta Iglesia. No está en sus manos. Está en las manos de aquel que tiene la autoridad sobre esta Iglesia. Él es el Señor de nuestras vidas. Esto va a ser grande. A esto es hacia donde todas las cosas están encaminadas para cuando lleguemos al final, de manera que mantenga esto en la mente.

Jesús es el Señor de las naciones.

Segundo, creo que significa, que no solo Él es Señor de nuestras vidas, sino que, también es Señor de las naciones. Él tiene toda la autoridad en el cielo y en la tierra. Y lo que quiero que vean en las Escrituras es cómo esto había sido profetizado mucho antes en el Viejo Testamento y es cumplido cuando vemos el final del Nuevo Testamento, completamente. Y este es un tipo de punto medio aquí.

Mantenga su lugar aquí en Mateo 28 y vuelva conmigo al Viejo Testamento a Daniel. Quiero que subraye un par de versos en Daniel que pienso que son importantes para nosotros entender lo que significa para Jesús tener toda la autoridad en los cielos y en la tierra. Daniel 7, lo que estamos a punto de leer es lo que el Viejo Testamento llama profecía. Esta es una palabra que predice algo en el futuro. Esto fue escrito cientos de años antes de que Cristo entrara en escena, antes de Mateo 28:18 dice, “Toda autoridad me ha sido dada en el cielo y en la tierra”

Pero quiero que vean lo que Daniel había profetizado. Daniel 7, miren conmigo en el verso 13 y 14. Escuchen lo que Daniel miró en su visión profética. Subraye esto y piense sobre cómo se relaciona a lo que estamos hablando aquí en Mateo 28. La Biblia dice, “Miraba yo en la visión” verso 13 “de la noche, y he aquí con las nubes del cielo venía uno como un hijo de hombre” (Daniel 7:13) usted puede subrayar esa frase ahí  “hijo de hombre”, esto un término que básicamente significa: alguien que es humano, pero con un origen celestial. “Hijo de hombre”, tiene humanidad, pero también tiene una faceta divina, eso es exactamente quien es Cristo. Él es humano, pero también es Divino.

Vi a uno que como el hijo del hombre… ahora miren, esto está hablando acerca de Cristo, “y he aquí con las nubes del cielo venía uno como un hijo de hombre, que vino hasta el Anciano de días, y le hicieron acercarse delante de él. Y le fue dado dominio, gloria y reino, para que todos los pueblos, naciones y lenguas le sirvieran; su dominio es dominio eterno, que nunca pasará, y su reino uno que no será destruido.” (Daniel 7:14) Eso está hablando de Cristo. Hay uno que va a venir. Él va tener toda la autoridad, soberano poder, dominio. Y todos los pueblos, todas las naciones van a adorarle como Señor.

Ahora, eso es lo que Daniel dijo, cientos de años antes de Mateo. Ahora, quiero que vaya conmigo al final de la Biblia. Apocalipsis 7, quiero que vea de lo que Daniel estaba hablando llegando a una culminación, Apocalipsis. Esto está hablando acerca de una imagen de hacia dónde se dirige toda la eternidad. Y por favor préstenle atención porque esto es enorme para nuestro entendimiento de Mateo 28. Miren en Apocalipsis 7, el último libro de la Biblia, Apocalipsis 7, lea conmigo empezando en el verso 9. Esto es Juan hablando sobre lo que él ve hacia donde se dirige la eternidad.  Él dice, “Después de esto” en el verso 9, “miré, y he aquí una gran multitud, la cual nadie podía contar”. (Apocalipsis 7:9). Y aquí está, “de todas naciones y tribus y pueblos y lenguas” eso suena muy similar a Daniel 7,

La presencia del Cordero

“Que estaban delante del trono y en la presencia del Cordero, vestidos de ropas blancas, y con palmas en las manos y clamaban a gran voz, diciendo: La salvación pertenece a nuestro Dios que está sentado en el trono, y al Cordero. Y todos los ángeles estaban en pie alrededor del trono, y de los ancianos y de los cuatro seres vivientes; y se postraron sobre sus rostros delante del trono, y adoraron a Dios, diciendo: Amén. La bendición y la gloria y la sabiduría y la acción de gracias y la honra y el poder y la fortaleza, sean a nuestro Dios por los siglos de los siglos. Amén.” (Apocalipsis 7:9-12)

Toda la eternidad se dirige hacia esta imagen, cuando cada nación y cada tribu y cada lengua se postre alrededor del trono del Cordero que fue muerto y aquel que ganó la última batalla y ellos cantarán Sus alabanzas porque Él es el Señor. Él tiene toda la autoridad, soberano poder sobre toda la creación.

Ahora, cuando volvemos a Mateo 28, usted comienza a pensar acerca de qué significa esto para la Gran Comisión. Creo que hay dos principales implicaciones. Número uno, quiero que vean que por esto aquí, es que vamos. Es por esto que vamos a buscar y hacer discípulos de todas las naciones y el por qué tenemos que decir en nuestras vidas, que esto debería ser la prioridad integrativa superior  de todo lo que hacemos. En solo un segundo nos vamos a sumergir en la misión y de qué se trata, pero quiero que vean el por qué desde el principio, este es el por qué vamos.

Algunos de ustedes van a estar pensando “Bueno, ¿Por qué debería yo, en mi vida aquí en la ciudad, por qué debería sentarme en mi trabajo o en mi casa o en mi comunidad, por qué debería ser acerca de una cosa en mi vida? Hacer discípulos en todas las naciones, ¿Por qué debería hacer esto? Y la única razón es porque Él es Señor de cada persona en esta ciudad. Y Él es digno de toda su adoración.

Es por esto que nos damos a nosotros mismos a esta misión, porque estamos convencidos, en nuestros corazones que con las personas que trabajamos y las personas en nuestros hogares son personas que deben conocer que Jesús es Señor y Jesús ha pagado el precio de sus pecados. Él ha muerto en la cruz y se levantó de la tumba y Él merece toda su adoración. Es por esto que vamos, no solo en Birmingham, sino también en otros lugares.

Las personas me han preguntado, aún cristianos bien intencionados, que están cerca de mí, “David ¿Por qué vas a Sudán?” ¿No sabes que eso es peligroso? ¿No sabes que hay mucho riesgo en ir a lugares como ese? ¿Por qué harías eso? ¿Por qué si quiera consideras hacer eso? ¿Por qué consideras empacar tus maletas, ya sea para un viaje de corto o largo período, y mudarte a África o ir en un viaje a África?

Este es el por qué usted va a África. Usted lo hace porque hay 3,000 tribus que están adorando religiones animistas que están completamente desviadas de Dios y Jesucristo es digno de sus adoraciones. Él es Señor de las naciones. ¿Por qué considerar ir a un lugar como Japón o Laos o Vietnam? Aquí el por qué, porque hay 350 millones de Budistas en esas naciones al día de hoy que están siguiendo las ordenanzas de Buda y las regulaciones de Buda y solo Jesucristo es digno de su adoración, no Buda.

¿Por qué considerar ir a la India, Pakistán, Bangladesh, Sri Lanka? ¿Por qué ir allá? ¿Por qué sería eso una consideración en su vida? Porque hay 950 millones hindúes que están adorando más dioses que los que usted y yo no podemos ni imaginar y solo hay un Dios que es digno de toda su adoración. Su nombre es Jesús.

¿Por qué ir a un país comunista como China, Corea del Norte, y otros, por qué iría a un lugar como ese? Arriesgarse a ir a un lugar como ese, aquí el por qué, porque hay más de un billón de personas en esas naciones que han crecido en una filosofía atea que dice que no hay Dios y sí hay un Dios que es digno de la adoración de todas esas personas.

¿Por qué debería esta Iglesia estar preocupada de ir al Medio Oriente con el Evangelio? ¿Por qué, hermanos y hermanas, estudiantes consideran el sueño de su vida yendo al Medio Oriente a compartir el Evangelio? ¿Por qué siquiera consideramos eso? Aquí el por qué, porque hay más de un billón de musulmanes al día de hoy que están ayunando y dando limosnas y haciendo santas peregrinaciones a la Meca y orando cinco veces al día a un falso dios y solo Jesucristo es merecedor de toda su adoración.

La belleza de lo que hemos visto en Daniel, luego en Mateo y en Apocalipsis es el hecho de que usted se entrega a esta misión. Usted es parte de una misión que es realmente indetenible. Escríbalo, cada tribu, nación se postrará alrededor del trono y llamará a Jesús Señor. La pregunta es “¿Participará esta Iglesia de ello?” la pregunta es “¿Participaras de esta misión?” está garantizado. Usted sabe, sabe el final desde el principio. Usted sabe que Cristo ya venció. Él es victorioso.

Y esto es enorme para nuestro entendimiento de lo que vamos a ver. De lo que tenemos que darnos cuenta es que Dios no necesita de usted o de mí específicamente. Y Él no necesita su Iglesia para lograr esta misión. Quiero que se quede conmigo aquí. No pierda esto.

Recuerdo uno de estos viajes recientes, estuve donde estaba en Asia y yendo a otros lugares escalando y haciendo algunas cosas que me estaban tratando de manera diferente. Recuerdo haber tenido un tiempo a solas un momento en la montaña y empecé a pensar, “ustedes saben, realmente voy a hacer algo bueno aquí” es algo así como uno de esos momentos donde empecé a pensar, “Sabes Dios, debería estar muy feliz de tenerme aquí en Su equipo” ¿Alguna vez pensó eso? quizás usted no es tan carnal como yo, pero empecé a pensar eso.

Fue uno de esos momentos cuando Dios dijo, “Voy a cumplir esta misión con o sin ti” Él no nos involucra en esta misión porque nos necesita. Él nos involucra en ella porque nos ama y tenemos el privilegio de experimentar, ser parte de este asunto. Y entonces quiero invitarles como Iglesia, no permita que esta misión le pase de largo. Y quiero invitar a cada familia, no permitan que esta misión les pase por encima. Es garantizado. Existe el poder de Cristo

El plan de Cristo

Eso prepara el escenario para lo siguiente, el plan de Cristo. Ahora, cuando llegamos al plan de Cristo aquí y  pensando en este pasaje de la Escritura, “Por lo tanto” a la luz de eso, “Id y hace discípulos a todas las naciones, bautizándolos en el nombre del Padre del Hijo y del Espíritu Santo, enseñándoles a obedecer todas las cosas que les he encomendado” (Mateo 28:19-20)

En todo este pasaje de la Escritura y en el lenguaje original del Nuevo Testamento, solo hay un verbo imperativo. Aquí el por qué es tan importante, en caso de que esté un poco alejado de las clases de español. Un verbo imperativo es un verbo de orden. Cuando mi esposa me da un imperativo eso es una orden. Lo hago, simple, justo ahí. Al menos necesito hacerlo. En ese pasaje de la Escritura vemos un imperativo. Es el imperativo, el mandamiento, alrededor del cual todo este pasaje se revuelve.

Ahora, cuando miramos estos versos, y puede que tengan sus Biblias abiertas ahí. ¿Cuál es el verbo imperativo? Nuestro primer pensamiento es “Id” pero, de hecho, en el original del Nuevo Testamento, ese no es el caso. “Id” de hecho  es el participio, al igual que bauticen, enséñenles  a obedecer todo lo que les he ordenado. Ayuda a describir qué es lo imperativo. Hay un mandamiento en este pasaje y es hacer discípulos a todas las naciones. Y esa es la misión de la cual Jesús está hablando en este pasaje. Una misión, nuestra misión, hacer discípulos en todas las naciones.

Jesús le dice a estos discípulos, y la implicación es para todos nosotros que hemos puesto nuestra fe en Cristo. Usted tiene una misión en su vida y no, no es hacer dinero y no es ser exitoso y no es tener una familia cómoda. Y no es vivir bien. Y no es retirarse adecuadamente. No es tener una buena educación, no es que algunas de esas cosas son malas y no es para ellos mismos, sino que tenemos una misión en nuestras vidas. Cada una de nuestras vidas – si hemos puesto nuestra fe en Cristo entonces existe una misión que supera todas las cosas y es hacer discípulos en todas las naciones. Es la misión sobre la cual Jesús nos manda a que giren nuestras vidas.

Ahora, estoy utilizando una palabra muy intencional, un mandamiento, porque eso es lo que hay en este pasaje. Y quiero que vean que no es un llamado, sino un mandamiento. Por favor escúcheme. Por favor no pierda esto. De lo que estoy hablando en lo relacionado a hacer discípulos de todas las naciones no es un llamado que está reservado a un selecto grupo de personas. Así es como usualmente vemos las misiones. Bueno, esta persona es la que se supone que vaya a otras naciones. O esta persona es la que está supuesta a salir y ser activo en compartir su fe y hacer discípulos, eso es para ellos. Y entonces relegamos esto a un selecto grupo, y decimos, “Bueno, ellos son llamados a hacer esto” y lo que quiero que vean es que eso es simplemente anti-bíblico. Hemos creado esta peligrosa idea del llamado. Y malinterpretamos de lo que la Biblia trata cuando hace alusión al llamado.

Pienso, cuando veo las Escrituras, pienso que la Biblia dice bastante claro, que Dios nos da un llamado a la salvación. Nos invita a poner nuestra fe en Él. Entonces el llamado a salvación. Cuando respondemos a ese llamado, hay un mandamiento en el centro de cada uno de nuestras vidas y es hacer discípulos de todas las naciones.

Ahora, obviamente no soy tan ignorante para pensar que esto se verá de la misma manera en su vida que en la mía. Voy a hacer cosas distintas a las que  usted hará. Usted hará cosas distintas a las que yo hago. Tenemos distintos dones, diferentes talentos, diferentes personalidades. Y entonces, de este mandamiento, todos tenemos diferentes llamados en nuestra vida. Algunos son llamados a diferentes áreas para servir. Algunos son llamados a servir vocacionalmente en la Iglesia. Algunos son llamados a salir del país. Algunos son llamados a hacer la contabilidad. Otros son llamados para ser maestros. Algunos son llamados a quedarse en casa. Tenemos diferentes llamados en nuestras vidas, pero todos emanan de este mandamiento – hacer discípulos a todas las naciones.

Lo que pienso que sí pensamos, es que confundimos estas dos cosas. Tomamos el llamado de Dios y lo ponemos en la versión de nuestro mandamiento y pensamos que esto es hacer discípulos a todas las naciones y es solo algo que solo algunas personas hacemos y no es bíblico. Quiero que luche con esto, en su vida, usted tiene un mandamiento, una misión – hacer discípulos en todas las naciones.

Cada uno de nosotros, sin excepción. Si ponemos nuestra fe en Cristo, entonces este mandamiento nos dirige. Ahora, tenemos dones distintos. Algunos de ustedes aman la contabilidad. No sé por qué aman la contabilidad pero lo hacen. Entonces Dios le ha dado dones y talentos y pasiones en esa área, pero quiero que vea que su único mandamiento en la vida no es ser un contador. Su mandamiento es hacer discípulos en todas las naciones y Dios le ha dado dones para que le ayuden en el mundo de la contabilidad.

Algunos de ustedes tienen pasiones en enseñanza, derecho, doctores, lo que sea, arquitectos, constructores, ingenieros, cualquiera sea su pasión, cualquiera sea su deseo, todas esas pasiones Dios las ha dado para cumplir este mandamiento de hacer discípulos a todas las naciones. Sé lo que están pensando, bueno, ¿Cómo hago eso? ¿Cómo hago discípulos en todas las naciones?

Bueno, me alegro que lo pregunten. Eso es lo que quiero que veamos, probablemente nos haría bien saber lo que significa hacer discípulos en todas las naciones. Creo que si le preguntan a diferentes individuos “¿Qué significa para ustedes hacer discípulos de todas las naciones?” algunos de nosotros pudiéramos saber, otros de nosotros no. Algunos de nosotros estaríamos algo borroso. Bueno, yo también, no lo sé. Lo que quiero que veamos es que si vamos a hacer  algo bueno en la Iglesia, tenemos que ser buenos en hacer discípulos en todas las naciones. Tenemos que saber cómo hacer esto, porque es lo que Jesús nos dijo justo antes de ascender al cielo.

Yendo

Entonces, empecemos con yendo. Quiero que piense sobre evangelismo. Creo que es de lo que Jesús está hablando aquí. Ve y evangeliza. Y por eso, quiero decir, ve a tu lugar de trabajo, a tu comunidad, y háblales a las personas acerca de Cristo. Introduzca a las personas al amor de Cristo.

Estaba en New Orleans esta semana y servía en diferentes lugares en la comunidad alrededor de la Iglesia donde sirvo y era muy humilde. Solo hay restos y escombros por todas partes. Remolques esparcidos aquí y allá con algunas personas que habían regresado.

Tuvimos un grupo que fue a un hogar en particular, esta persona ha estado trabajando en su casa, solo trabajando todo el día y duerme ahí en las noches. Y trabaja todo el día y al día siguiente. Cuando llegamos a él nos percatamos de que tiene un historial que involucra prisión y algunas dificultades en la vida. Comencé a compartir el evangelio con él, él pone su fe en Cristo. Él dice, “Quiero la esperanza que una tormenta como el huracán Katrina no pueda destruir” y entonces él pone su fe en Cristo. De eso se trata el “Yendo”. Se trata de ir a las comunidades, a lugares donde tenemos influencia y compartir el Evangelio, guiar a las personas a Cristo.

Lo que quiero que vean es que no nos vamos a detener aquí. No nos vamos a detener ahí. Eso solo es un componente del hacer discípulos. Aquí es donde el evangelismo adquiere un mal estereotipo. El evangelismo adquiere la idea de que bueno, que usted solo está tocando la superficie. Usted guía a las personas a Cristo y entonces los deja colgando. ¡Guao! regresamos a la Iglesia a la que guiamos tanto número de personas a la fe en Cristo. Y usted se detiene ahí. Eso no es bíblico. Ese no es el evangelismo bíblico. No guiamos a las personas a Cristo y las dejamos esperando ahí.

Mi esposa y yo estamos adoptando un niño de Kazajstán y, un pequeño infante de Kazajstán,  con optimismo esperamos que se complete de seis a ocho meses. Y cuando vayamos y tengamos a nuestro bebe y regresemos, no vamos a sentarlo en una esquina y le vamos a decir, buena suerte, pásala bien en América. Eso no es lo que vamos a hacer como padres. Eso, exactamente, es lo que hacemos en la Iglesia, ¿cierto? Guiamos a las personas a Cristo y esperamos que  descubran cómo seguir a Cristo por su cuenta, ahí es donde comienza.

Bautismo

¿Qué dice Él después? Bautícenlos. ¿Cuándo usted piensa en bautismo quiero que piense sobre ayudar a las personas siendo establecidas en su fe? Evangeliza y establece personas. Es por esto que el bautismo es tan importante. Esta es la razón por la cual usted y yo somos testigos cuando vimos a estas personas viniendo aquí, ellos se identifican públicamente con Cristo y con Su Iglesia. Esto es enorme.

Ahora, quiero animarles, solo como una nota al margen. Si usted ha puesto su fe en Cristo y nunca ha sido bautizado, quiero animarlo a que tome ese paso y públicamente se identifique con Cristo y con Su Iglesia y con el símbolo de ser muerto en sus pecados y levantado a la vida. De eso es que esto se trata. Entonces le ayudamos a establecerse luego de que lo guiamos a Cristo.

Enseñanza

Y entonces enséñales a seguir, a obedecer todo lo que les he mandado. Entonces tenemos que: ir, bautizar, y entonces enseñar. Los equipamos para seguir a Cristo, evangelizar y establecer personas en la fe. Enseñarles cómo orar. Enseñarles cómo estudiar la Palabra de Dios. Enseñarles como compartir el evangelio.

Ahora, esto es enorme, realmente perdemos el punto, lo perdemos en gran manera cuando relegamos este rol de hacer discípulos, enseñar a las personas a seguir a Cristo a diferentes programas. Y decimos “La institución se encargará de esto” decimos, “Bueno, si alguien va a venir a Cristo vamos a ayudarle a establecerse en la Iglesia quizás a través del bautismo, pero luego dejaremos a un grupo pequeño enseñarles a seguir a Cristo. O le dejaremos solo ir a adorar los domingos en la mañana y eso les enseñara cómo seguir a Cristo”

Y por favor escúcheme, ambos son extremadamente importante, ambos una comunidad bíblica en la cual esté involucrada en el estudio de la Biblia con una comunidad de fe. Venir a los servicios, escuchando la Palabra de Dios es grandioso.

Permítame hacerle una pregunta, si usted guía a alguien a la fe en Cristo  y ellos comienzan su camino con Cristo ¿Cuál va ser la manera más efectiva para enseñarles a orar? Ponerlos en un estudio bíblico sobre oración o que los invite en su tiempo de tranquilidad y diga, “Permíteme enseñarte a orar. Permíteme mostrarte lo que he aprendido sobre la oración y cómo oro todos los días” ¿Cuál va a ser más efectivo?

¿Qué tal enseñarles a estudiar la Biblia?

¿Qué tal enseñarles a estudiar la Biblia? ¿Cuál va a ser más efectivo, ponerlos en un grupo pequeño, donde ellos pueden aprender cómo estudiar la Biblia? Sí, eso puede ayudar, pero sería útil, quizás más útil para usted invitarles a su propio estudio bíblico para mostrarles ¿cómo compartir el Evangelio con otras personas?

Muchos de nosotros nos sentimos muy incómodos cuando tiene que ver con esto y creo muchos de nosotros nunca hemos tenido la oportunidad de realmente estar con alguien que este activo en compartir su fe y aprender de ello. Recuerdo que la primera vez que compartí el evangelio, me fue mal. Fue una decepción. Esta persona  fue la primera con la que realmente  este proceso en mi vida comenzó a mostrar cómo seguir a Cristo. Él me invitó a mí y a un amigo, estábamos afuera de la escuela un día en la secundaria y él dijo “Quiero que ustedes vayan a practicar un poco de go-cart, videojuegos conmigo en este lugar” y estábamos diciendo “Sí, seguro”

Y llegamos allá y él se presentó con una cámara de video y estábamos algo así como “¿Nos vas a filmar practicando go-cart?” y él dijo “No, no, lo que vamos a hacer es que vamos a hacer todas esas cosas y después vamos a ir por ahí a diferentes adolescentes y los vamos a filmar. Vamos a preguntarles qué piensan acerca de Jesús, qué creen de sobre Jesús” estábamos como, “Bueno, ¿Podemos practicar go-cart?” y él dijo “Si, sí, todavía podremos hacer eso” y entonces eso fue lo que hicimos. Fuimos y practicamos con los go-cart y los juegos por un tiempo y luego entraríamos y él filmaría a estas personas y mi amigo y yo nos pararíamos detrás de él solo mirando esperando por el próximo juego al que nos dirigiríamos.

Y en un momento él tenía su cámara de video ahí y dijo “¿Qué piensan acerca de Jesús?” este hombre está hablando, estos adolescentes, y luego baja la cámara y dice “Mi amigo David tiene una relación personal con Jesús. Y él quisiera compartirla contigo lo que Jesús significa para él” y yo solo vine a practicar go-cart, ustedes saben. Y justo ahí, y esa circunstancia por primera vez tuve la oportunidad de compartir mi fe.

Y les seré honesto, quede prendado porque lo había visto en acción y alguien había derramado su vida en mí para mostrarme lo que significaba hacer esto. Esto es enorme. ¿Puedo hacerles una pregunta? Quiero que sean bien honestos. Quiero que imaginen que mañana, usted tiene la oportunidad de guiar a alguien a la fe en Cristo. Imagine que mañana si en su lugar de trabajo, su casa, quizás en su comunidad que mañana usted tiene la oportunidad de guiar a alguien a la fe en Cristo.

Quiero hacerle una pregunta “¿Qué haría con ellos?” ¿Cuál es su plan por los próximos seis meses para enseñarles cómo seguir a Cristo? ¿Tiene un plan para eso? ¿Si fuera a hablarle persona a persona  hoy y tuviera que preguntarle cuál es su plan, una vez usted guíe a alguien a Cristo? Si usted guía a alguien a Cristo esta semana, ¿Qué haría con ellos en las próximas seis semanas, tiene un plan?  Que pudiera decir, “Aquí está lo que voy a hacer, enseñarles a seguir a Cristo”

Creo que la mayoría de nosotros no tiene ese tipo de plan. Y pienso que señala dos cosas. Número uno: que no estamos planeando dirigir a nadie a la fe en Cristo mañana, lo cual es problemático, o número dos, estamos planeando guiar a alguien a la fe en Cristo mañana, y estamos planeando dejarlos por su cuenta para seguir tras Cristo y eso también es problemático. Tenemos que ser buenos en hacer discípulos.

Ahora, este es un gran compromiso. Esto es moverse de la parte de atrás al frente del bote. Para enseñarle a otra persona cómo orar, usted tiene que orar. Para enseñarle a alguien a estudiar la Biblia, ¿sabe lo que tiene que hacer? Estudiar la Biblia. Para enseñarle a otra persona cómo compartir su fe, usted tiene que compartir su fe, pero no es esto lo que sucede cuando la comunidad de fe empieza a tomar responsabilidad por esto y se entrega a sí misma a esto, ¿Qué pasaría en esta Iglesia si esto estuviera pasando?

Multiplicar

Solo piénselo. Y el resultado es, yendo, bautizando, enseñando y voy a agregar un cuarto participante aquí. Realmente no lo vemos en la Escritura, pero pienso que está implicado. Quiero que vea esto cuando vamos y bautizamos y enseñamos, el resultado es que empezamos a multiplicarnos.

Y evangelizamos y establecemos y equipamos a las personas para seguir a Cristo y eso significa que empezamos a extender nuestras  vidas en las vidas de otros y lo que Dios ha hecho en nosotros, empezamos a multiplicarnos en las vidas de otros. No estoy diciendo que hagamos clones de nosotros mismos. Lo último que necesitamos es más de nosotros. Pero empezamos a ayudar a personas a experimentar lo que significa ser como Cristo con los dones, talentos, personalidades que Dios les ha dado a ellos multiplicamos la imagen de Cristo en ellos. De eso se trata hacer discípulos.

El problema es que obviamos esto por completo. Muchas veces en la Iglesia pienso que tomamos las multiplicaciones y las convertimos en una adicción. Y perdemos todo el punto de la Gran Comisión.

Permítame darle un ejemplo. Quiero que imagine conmigo, imagine que su Iglesia está a casa llena. Imagine que el próximo año, usted es capaz de dirigir juntos, combinando juntos, trabajando juntos, su Iglesia fue capaz de guiar una persona a Cristo cada día por el próximo año. Bastante excitante, para este tiempo en un año 365 personas vendrían a la fe en Cristo. Imagine que usted continuaría haciendo esto, su Iglesia haría eso el próximo año, y dos años y tres años. De aquí a tres años, pienso en 33 años, haga los cálculos, se convertiría en más de 13,000 personas viniendo a la fe en Cristo. Sería bastante excitante. Usted haría una marca en la población perdida de Alabama. Permítame darle otro escenario.

Qué si solo un miembro de su Iglesia, solo uno, durante el próximo año, en vez de dirigir una persona a la fe en Cristo cada día, qué tal si durante el próximo año, dirige solo una persona a la fe en Cristo, pero no se detuvo ahí. Pero suponga que usted tomó a Jesús y Su Palabra y les mostró la importancia de ser bautizados y empezó a equiparlos para seguir a Cristo, entonces al final de ese año, fueron capaces de salir y empezar a hacer lo mismo en la vida de otra persona y empieza Jesús de manera real cuando Él dice multiplíquese. Entonces, el próximo año, dos saldrían y cuatro saldrían.

Sabe lo que es interesante, usted hace los cálculos, y al mismo tiempo, vio 13,000 personas venir a la fe en Cristo por aquí en este escenario y usted vería 4 billones de personas venir a la fe en Cristo. Quizás Jesús sabía de lo que estaba hablando. Haga los cálculos, Iglesia. ¿Es el sueño de su Iglesia crecer a 5,000 o 10,000 personas? Si es así, su sueño es muy débil. Dios quiere que usted utilice su Iglesia y las familias en ella para guiar a millones a la fe en Cristo.

Crea eso. Usted dice que es idealista, no es el plan de Cristo. Es el por qué en Hechos 1, 120 personas reunieron, el Espíritu Santo vino sobre ellos en Hechos 2 y en el resto del capítulo muestra cómo estas 120 personas, no las herramientas más agudas del grupo tampoco, ellas trastornaron el mundo por Cristo. ¿Cómo se hace eso? se hace eso porque ellos habían visto el hacer discípulos en Jesús. Ellos comenzaron a multiplicar sus vidas en las vidas de los demás. Y ellos comenzaron a impactar a las naciones para la gloria de Cristo. Este es el plan.

Es decir, piénselo. Usted tiene 6.3 billones de personas, eso es mucha gente alrededor del mundo. ¿Cómo puede su vida impactar a las naciones para la gloria de Cristo? Bueno usted va. Guía a las personas a convertirse en seguidores de Cristo, seguidores de Jesús, ellos se convierten en creyentes. Pero después que usted hace un discípulo, lo bautiza y luego que ellas se bautizan entonces se convierten en discípulos establecidos de Cristo. Y entonces usted no se detiene ahí, empieza a enseñarles a seguir a Cristo, para se conviertan en hacedores de discípulos. Y entonces usted comienza a multiplicar y así es como su iglesia, basada en la Palabra y la autoridad de Cristo, puede impactar a las naciones para la gloria de Cristo.

¿Es este un plan digno de implementar?

Ahora, ¿es este un plan digno de implementar? Pienso que sí. Es Indetenible. Es garantizado. El plan está descrito justo ahí. Pero seamos honestos, somos tentados en la Iglesia de hoy a hacer todo excepto la única cosa que Jesús nos ha ordenado hacer. En ninguna parte de la Escritura, en ninguna parte en el evangelio usted ve a Jesús ordenándonos construir universidades, colegios o seminarios. Usted diría “Bueno David, usted recibe un cheque de uno de eso” es cierto. Está justo en lo correcto. Pero Jesús no dijo que hagamos eso. En ninguna parte Él dice establezca escuela dominical o pequeños grupos. No dice que hagan eso. No dice que construyamos edificios. Nunca dice eso.

Ahora, no estoy diciendo que esas cosas no sean buenas. Estoy diciendo que pueden ser muy buenas. Jesús no nos dijo que hiciéramos eso. Él nos dijo que hiciéramos una cosa. Hacer discípulos en cada parte del mundo. Y mientras un grupo pequeño o un seminario o un edificio están ayudando a ser más efectivo en hacer discípulos en cada parte del mundo entonces hagámoslo. Pero tan pronto nos enfocamos en esas cosas e ignoramos la única cosa que Él nos mandó a hacer, entonces perdimos todo el punto de nuestra misión como Iglesia.

Ahora, y quiero hacerles una pregunta que va a ayudar a traer esto a casa. Quiero preguntarles ¿Es usted un recibidor o un reproductor? ¿Es usted un recibidor o un reproductor? Para ilustrarles lo que quiero decir con eso, quiero llevarlo conmigo a Sudán.

Vamos a Sudán y nuestro objetivo allá es entrenar a los líderes de la Iglesia en hacer discípulos. Ahora, pensé, cuando inicialmente me inscribí para este viaje íbamos a ir a Sudan y predicar a las masas de personas, guiar a las personas a Cristo, ese tipo de cosas. Y la persona que estaba dirigiendo este viaje dijo “No David, no vamos a hacer esto” Él dijo, “Lo que sería más efectivo para nosotros llegar…” y pudiéramos atraer las masas, sin duda. “Lo que sería más efectivo para nosotros hacer es entrenar a algunos líderes que puedan hacer eso con las masas que viven allí” y yo dije: “Bueno es un buen punto. Eso sería más efectivo”

No vamos a ir a “el hombre blanco salva el día” vamos a llegar y vamos a entrenar, lo que hacemos es que limitamos nuestro tiempo con los líderes de la Iglesia que pueden hablar nuestro idioma, solo aquellos que pueden hablarlo porque duplicamos la cantidad de material que somos capaces de enseñarles. Los líderes de la Iglesia que iban a ser capaces de ir y enseñarles estas cosas a otros. Y entonces eso es lo que hicimos.

Caminaríamos cada día a este techo de lodo, un grupo de hombres, líderes de la Iglesia Sudanesa se apilaban en este techo de lodo. Fue maravilloso. Recuerdo entrar y de inmediato todos se levantaban en señal de respeto por el maestro. Eso me impresionó. Déjeme decirle que eso nunca sucedió en una clase del seminario en los Estados Unidos, pero de todas maneras, entré y estos hombres, mis héroes en la fe en tantas maneras.

Recuerdo uno que estaba sentado a mi izquierda, un hombre mayor estaba prácticamente ciego porque pasó los últimos 3 años de su vida traduciendo las Escrituras en un lenguaje tribal. Un hombre increíble.

¿Porque estaban durmiendo?

Cantaríamos y luego nos sentaríamos y empezaríamos a enseñarles a hacer discípulos y mientras íbamos a través de eso durante todo el tiempo que les enseñaba, pocas veces vi sus rostros. Pocas veces vi sus rostros ¿Por qué? ¿Porque estaban durmiendo? ¿Porque estaban somnolientos? ¿Porque no estaban poniendo atención? No, ellos tenían sus rostros hacia abajo escribiendo cada cosa que decía. Ellos venían a mí y decían “David, creemos que tenemos la responsabilidad de hacer todo lo que nos has enseñado, traducirlo a nuestro lenguaje y cambiarlo para enseñarlo en nuestras tribus”

Esta es la razón de por qué el Evangelio se ha cuadruplicado en Sudan durante los últimos 20 años, aún en medio de una guerra civil porque las personas estaban diciendo  que lo Cristo nos ha dado no es solo para nosotros, es para otros. Y eso cambio la manera en que ellos escuchaban. Ellos escuchaban porque estaban preparados para compartirlo con otra persona. Porque daban sus vidas para la  multiplicación. Es lo mismo que vimos en Honduras.

Recuerdo mi primer viaje a Honduras, fui allá y estaba predicando mi primer sermón. Había unos hombres sentados en el frente, solo sentados ahí escribiendo cada cosa. Dije, atentamente. Recuerdo que vinieron a mí y dijeron “David gracias por tu sermón, no podemos esperar para re-enseñarlo a otras personas” pensé “Eso debió haber sido bueno” hasta que me di cuenta de que ellos le decían eso a cada persona que escuchaban predicar la Palabra de Dios, porque ellos escucharon no solo para ellos, lo hacían para derramarlo en otras personas.

Y entonces, quiero preguntarles, seamos honestos, ¿Somos recibidores o reproductores? ¿Cuántos de nosotros podemos honestamente decir, que estamos escuchando la Palabra de Dios con la intención de enseñarle a otros lo que hemos escuchado, esta semana?

No estaba presente en la reunión pasada y tenía a alguien hablando sobre el pacto del matrimonio. ¿Cuántos de ustedes pudieran re-enseñarme ese sermón? Depositarlo en mí porque estaban escuchando no solo para recibir sino para reproducir.

Esto cambia la manera en que escuchamos. Cambia la manera en que vemos nuestra cristiandad. Muchos de nosotros somos buenos viniendo a los servicios de adoración, sentándonos y hasta si escuchamos, lo hacemos para ser alimentados y para recibir y esto es una manera egocéntrica de escuchar. Es una manera egocéntrica de recibir la Palabra de Dios. Lo que sucede cuando nos volvemos centrados en Dios y decimos “Sabes, lo que me fue confiado no es solo para mí, no es para las personas que están aquí es para que  las naciones sepan cuán bueno es Él” ¿Qué sucede cuando dejamos de recibir y empezamos a reproducir?

Esto es un estado mental completamente diferente que el que la mayoría de nosotros tiene. Quiero animarles qué pasaría si lo que pasa un domingo en la mañana comienza a ser reproducido a través de la ciudad y a través de las naciones. Wow, esta es la belleza de todo esto.

Aquí está la verdad bíblica, y oro que usted esté convencido de esto en su corazón. La verdad bíblica, usted fue creado. Usted, no solo la persona que está al lado suyo, en frente suyo, detrás de usted, usted fue creado para impactar su ciudad y todas las naciones para la gloria de Cristo, no es una o la otra. Llevamos esta misión, y piense “Bueno, me voy a quedar aquí en mi ciudad, otras personas irán para allá”, no, son ambos. Estamos involucrados en una misión global. Todos nosotros creados para impactar nuestra ciudad y todas las naciones para la gloria de Cristo.

Y estoy convencido que si el pueblo de Dios comenzara a tomar Su Palabra y dice, nos vamos a dar a nosotros mismos para este plan. Y no vamos a ser enumerados con las masas y los programas y todas estas cosas, no que esas cosas no puedan ser buenas, sin embargo, el centro de nuestras vidas, el centro de nuestras familias y el centro de nuestra Iglesia va a ser una misión, hacer discípulos de todas las naciones. Si lo llevamos a Él y Su Palabra, solo me imagino lo que Él haría.

Ahí está el plan. Hacer discípulos a todas las naciones. ¿A qué se parece eso en su vida? Afortunadamente el pasaje no se detiene ahí porque seamos honestos, esto es difícil. ¿Cómo es que mi vida tendrá un impacto global? Yendo, bautizando, enseñando, estas son cosas difíciles para hacer. No solo cosas con las que nos sintamos cómodos y no son cosas en las que tenemos mucha experiencia, muchos de nosotros, ¿Cómo hacemos esto?

La Presencia de Cristo

Bueno, afortunadamente, hemos visto el poder de Cristo y el plan de Cristo, pero ahora llegamos a la presencia de Cristo. Y quiero que vean esto. Quiero que vean la importancia de la presencia de Cristo en este pasaje. Si usted… no vamos a llegar ahí, pero Mateo 1:21-22 solo escriba eso y mírelo en algún momento porque Mateo inicia su introducción de Jesús en Mateo 1 y él dice que hay alguien que viene cuyo nombre es Emanuel y ¿Qué significa ese nombre? Dios con nosotros.

Ahora, así es como Mateo inicia el Evangelio, su introducción de Jesús. Llegamos al final y vemos a Jesús diciendo, estaré con vosotros, todos los días hasta el fin. Entonces es un gran énfasis que Mateo nos está dando aquí. Que esta misión depende de la presencia de Cristo en nosotros. Quiero que vean que estamos compelidos por el impulso de una presencia que habita en nosotros. Cristo vive en nosotros. Su corazón late con nuestros corazones y cuando eso sucede, cuando eso realmente sucede, empezamos a darnos a nosotros mismos a hacer discípulos de todas las naciones y dependemos de Su presencia y necesitamos de Su presencia.

Note, aquí está el asunto, sabemos de las Escrituras, otros lugares en la Escritura, sabemos que Dios ha prometido estar con Su pueblo. Eso es garantizado. Todos nosotros tenemos una relación con Cristo, sabemos que Dios nunca nos dejará ni nos desamparará. Vemos esto en toda la Escritura. Entonces, ¿Por qué Dios dice esto aquí?

¿Por qué Dios dice esto aquí?

Pienso que lo que Él está diciendo, por favor escúcheme. En el lenguaje original del Nuevo Testamento, esto es lo que Jesús está diciendo, “No que haya duda acerca de si mi presencia está con ustedes, pero nunca se van a dar cuenta del poder de la presencia de Cristo en su vida y en la Iglesia hasta que estén completamente rendidos a esta misión”

Nunca nos daremos cuenta de Su poder, el poder de Su presencia, hasta que estemos completamente rendidos a esta misión. Jesús está diciendo, pónganse en la línea del frente y van a hacer discípulos de todas las naciones. Iglesia, comienza a hacer esto. Familias individuales, empiecen a hacer esto. Estudiantes yendo a la escuela diciendo “Estoy haciendo discípulos a todas las naciones” van a comenzar a depender de la presencia de Cristo y a ver el poder de Su presencia obrar en su vida en maneras que ustedes nunca imaginaron.

La presencia de Cristo

Lo garantizo. Él ha prometido mostrar Su presencia. Usted sabe si usted se ha involucrado en guiar personas a Cristo. O si usted ha estado quizás en un viaje misionero a algún lugar, o si ha estado involucrado en hacer discípulos a todas las naciones. Usted sabe que es en esos momentos en que realmente está al tanto de la necesidad por la presencia de Cristo.

Recuerdo yendo a Sudán. Fue una búsqueda del corazón, un viaje agotador en algunas maneras, sabiendo que iba a un lugar que había sido bombardeado recientemente y ser capaz de sentarme y hablar con Heather acerca de algunos riesgos involucrados en el viaje. Fue difícil.

Recuerdo que volamos sobre Kenia. Pasamos un par de noches en Kenia antes de ir a Sudán. Y la noche antes de ir a Sudan, la persona que estaba dirigiendo el grupo nos reunió y dijo “Hay algunos riesgos, algunos peligros en Sudan de los cuales no hemos hablado y tenemos que hacerlo” estamos así como “O perfecto” entonces él comienza a compartir y dice “Deben darse cuenta que hay muchas serpientes en Sudan”

Ahora, algunas personas piensan que las serpientes son interesantes. Yo no soy una de ellas. No soy un gran fanático de las serpientes en lo absoluto. La persona dijo que seis de las más mortales serpientes en el mundo viven en Sudan y el empieza a listarlas: La mamba verde y negra. Esta serpiente, aquella serpiente. Y estábamos sentados allí lo más tranquilos posibles, sudando y el como que se ríe, como que si fuera divertido, no lo era pero él dijo tenemos el kit para serpientes, pero si es mordido, estos kit para serpientes no están hechos para las de este tipo. “Solo vamos a” él dijo “Si usted es mordido, oraremos  y veremos lo que Dios hace”

El comienza a compartir una historia acerca de cómo un sudanés le había dicho, él estaba llevando su ganado por el camino en medio de un bosque africano. Y había una mamba verde escondiéndose en los árboles que descendió y mordió a cuatro de sus vacas en una fila, rellenas instantáneamente. Y las cuatro vacas cayeron muertas justo ahí en el camino.

Bueno, no hace falta decir que no dormimos esa noche. No dormimos en lo absoluto esa noche. Quedé despierto memorizando el salmo 91 porque dice que “Hoyaremos sobre el león y la serpiente” Ok, y ustedes hoyaran sobre la cobra y entonces recordé  todo el salmo entonces estaría preparado cuando fuera. Y entonces recuerdo que cuando me levanté la mañana siguiente, fui a nuestro avión, viajamos a Sudan, y aterrizamos en Sudán. Tomamos nuestras cosas, escalamos a un río que era otra historia. Este es un río, uno que estaba infestado de cocodrilos y había una canoa que tenía un letrero que decía, esta canoa puede flotar.

Entonces nos montamos en ella, que es otra historia, vamos al otro lado del río y una vez llegamos, nos bajamos y hay unos camiones esperándonos. Y ponemos todas nuestras cosas y empezamos a pilarnos cuando nos damos cuenta que no hay suficiente espacio dentro para todos entonces ellos necesitaban que los más pequeños se pusieran encima del techo del camión. Y ellos dijeron, “David, aquí es donde entras tú. Tienes que subir al techo del camión” y dije “Ok, estaba muy emocionado de estar en Sudan” entonces subí y empezamos a avanzar y miré hacia adelante y miré que empezábamos a llegar a un bosque africano y había árboles en donde comencé la imagen de la noche anterior.

Entonces comencé a levantar las manos y a decir, “Hoyarás sobre el león y la serpiente, hoyarás sobre la cobra” y todo el tiempo que estábamos conduciendo, eso es lo que estaba haciendo. Y a todos los lugares donde fuimos en esas semanas que estuvimos allá, siempre estaba buscando serpientes. Acostado en la cama en la noche, yendo a la casucha de lodo como si estuviera viendo una película y este techo de paja, que básicamente significa, que lo que sea que quiera entrar tiene las puertas abiertas.

Fuimos y nos acostamos en la oscuridad aquella noche sudanesa y tenía un mosquitero sobre nosotros como que si eso hiciera algo en lo absoluto y habría arañas en la pared, y puedo manejar las arañas, pero nos acostaríamos y nos quedaríamos bien tranquilos pero de repente se empiezan a escuchar cosas. Y empezamos a prender nuestras linternas y mirar a nuestro alrededor y luego aprendimos que era mejor dejar sus linternas apagadas y nos iríamos a dormir en la noche solo orando a Dios que nos ayude a despertar en la mañana, ¡oh Señor ayúdanos!

Por doquiera que fuimos, doquiera estábamos, todo lo que hicimos, estábamos constantemente dependiendo de Su presencia. Lo que quiero decirles es que creo que esa es la manera en que la vida del cristiano está intencionada a ser vivida. Pero quiero que vean que mientras esté en la parte de atrás del bote, no va a necesitar la presencia de Cristo de esa manera. No la va a necesitar, no va a depender en Él. No va a anhelar ver Su presencia. Por el contrario, cuando está en el frente y cuando está en su lugar de trabajo y en todas las naciones, haciendo discípulos, les garantizo, van a necesitar Su presencia y verán su presencia en maneras que no pudieran imaginar.  Su poder estará en el trabajo en maneras que no se podría imaginar, aquí en la ciudad. ¿Cree usted que cantando y sintiendo cosas es de lo que se trata la presencia de Cristo?

La presencia de Cristo se trata de estar en la línea del frente. Dando a conocer el Evangelio, haciendo discípulos, y verlo trabajar en maneras milagrosas que usted no se podría imaginar, cambiando las vidas de las personas y usándolo para impactar a las naciones para la gloria de Su nombre, ahí es donde la presencia de Cristo entra.

¿Cómo llegas a la fe en Cristo?

Recuerdo haber hablado con este hombre en Indonesia y le pregunté, le dije, “¿Cómo llegas a la fe en Cristo?” él dijo “soy parte de la tribu Batak del norte de Sumatra, Indonesia” él dijo “hubo un tiempo en que toda mi tribu era Musulmana, completamente Musulmana” dijo él “una pareja de misioneros bautistas vinieron a nosotros y comenzaron a compartir el evangelio con nosotros” y él dijo “Los líderes tribales escucharon lo que ellos estaban diciendo y no les gusto y mataron y canibalizaron esta pareja bautista” dijo él “Fue uno de los días más oscuros en la historia de la tribu” dijo él “Años después, otro misionero vino y nos trajo el Evangelio y esta vez los líderes  de las tribus dijeron “Este hombre está diciendo las mismas cosas que los demás dijeron. Quizás debamos escuchar” y así lo hicieron. Escucharon y pusieron su fe en Cristo. Fueron convertidos a la fe en Cristo. En dos meses, la tribu completa fue convertida, hoy hay  millones de creyentes entre las tribus Batak del norte de Sumatra, Indonesia.

Entonces, mi pregunta para ustedes es, ¿Quieren participar de esto o no? Creo que todo se resume a una pregunta. Quiero preguntarles esta pregunta general: ¿Están dispuestos a darle a Dios un cheque en blanco?

Por favor escúcheme. No le estoy pidiendo a nadie que diga que va a empacar sus cosas y que se va a mudar a Camboya la próxima semana. Y tampoco le estoy pidiendo que tengan todas las respuestas de cómo esto va a afectar su vida, pero si les estoy pidiendo que le diga a Dios, aquí está el cheque en blanco de mi vida, con la vida de mi familia. Y como estudiante, como adulto, quien quiera que usted sea diga “Dios, te estoy dando un cheque en blanco” sin ningún tipo de ataduras. De la manera en que pueda hacer discípulos más efectivamente de todas las naciones, lo haré.

Ahora, hay mucho riesgo en esa oración. Por favor no lo tome a la ligera. ¿Quién saber lo que Dios tiene por ahí? Mi pregunta es ¿estas dispuesto a decir “Tu eres mi Señor, dejo todo de mi vida y me voy a entregar a esta misión?

Le voy a pedir que haga dos cosas. Sé que hay muchas personas que nunca han llamado a Jesús Señor. Nunca le han pedido que venga a sus corazones y perdone sus pecados y nunca han rendido su vida a Él, quiero que sepan que Él es Señor, Él es digno de toda su adoración. Él murió en la cruz por sus pecados. Se levantó de la tumba y usted puede tener la oportunidad, por primera vez de someterse a Él como Señor. Y quiero invitarlo a decir “Quiero llamar a Jesús Señor por primera vez hoy”. Y justo aquí, justo ahora, usted puede tener su vida cambiada por toda la eternidad.

Quiero invitarle a responder como creyente, personas que han puesto su fe en Cristo. Hay un mandamiento en el centro de su vida. Que es hacer discípulos a todas las naciones. Y quiero pedirle que sea bien honesto. ¿Tiene Dios un cheque en blanco de su vida? ¿Tiene un cheque en blanco tuyo o de tu familia? Cuando piensa en carreras de vida, trabajos donde usted está en la vida, tiene eso un cheque en blanco, y esta su vida ahora mismo rendida a este mandamiento, hacer discípulos a todas las naciones, si no es así, le invito a que le diga a Dios, “Quiero darte un cheque en blanco” oro para que le diga a Dios “te estoy dando un cheque en blanco. Lo que sea que esto signifique en mi vida, quiero hacerlo. Lo que sea que conlleve para hacer discípulos en todas las naciones con los dones y personalidades, el talento que me has dado”

Pero quiero invitarlos como individuos, y como resultado de la Iglesia colectiva como un todo, a que vengan ante el trono de Dios y digan “te damos un cheque en blanco. Queremos hacer discípulos en todas las naciones. Queremos que nos consuma. Queremos que nos cautive. Y queremos  impactar las ciudades y naciones para la gloria de Cristo” y quiero invitarle a darle a Dios por primera vez o por primera vez en un largo tiempo y digan “Yo quiero”

Dios, te agradezco por esta misión. Gracias por involucrarnos. Dios te adoramos porque sabemos que viene un día cuando todos nos postraremos alrededor del trono de Cristo y cantaremos alabanzas  a Dios, queremos ser usados entre ahora y ese día para dar a conocer tu gloria. Dios, queremos llevarte a Ti y Tu Palabra y creerte cuando digamos que podemos impactar las naciones haciendo discípulos. Dios, oro por la Iglesia, Dios que te muestres en nuestra respuesta hoy para ser Señor de nuestras vidas y ser el Señor de las naciones. En el nombre de Jesús oramos. Amén.

David Platt

David Platt sirve como pastor en el área metropolitana de Washington, D.C. Es el fundador de Radical.

David recibió su doctorado del Seminario Teológico Bautista de New Orleans y es el autor de Don’t Hold Back [No te quedes donde estás], Radical, Sígueme, Contracultura, Algo tiene que cambiar, Before You Vote [Antes de votar], así como los varios volúmenes de la serie Christ-Centered Exposition Commentary [Comentario Expositivo centrado en Cristo]. 

Vive junto con su esposa e hijos en el área metropolitana de Washington, D.C.

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