Capítulo 42: Un ayuno por las naciones

Si tiene su Biblia y espero que sí, permítame invitarles a que la abra conmigo en Marcos capítulo 11. Quiero darle la bienvenida a adorar esta noche con la Iglesia en Brook Hills, y especialmente si esta visitándonos, ya sea que esté aquí de otra iglesia visitándonos, o quizás si está aquí y no conoce a Cristo, o está explorando el Cristianismo, la iglesia, explorando quién es Cristo. Queremos darle la bienvenida y esperar que esta noche sea evidente en usted en la iglesia mientras celebramos a Cristo en la forma en que lo hacemos. Sin embargo, usted ha venido en un tipo de día especial para esta familia de fe, porque este es un día que hemos preparado para ayunar y orar juntos como iglesia. Quizás usted es miembro de la familia de fe y obvió el memo, y no estamos molestos en lo absoluto que haya tenido un desayuno, y almuerzo, y meriendas durante el día. Pero le animamos a que se abstenga de la cena junto con nosotros esta noche.

La imagen es, y la vemos a través de las Escrituras entre el pueblo de Dios, el Viejo Testamento y el Nuevo Testamento, ayunar es una disciplina importante en nuestro crecimiento en Cristo, y no solo individualmente, pero como pueblo. En varias ocasiones en el Viejo Testamento, vemos al pueblo de Dios apartándose para días de ayuno por consejo, por dirección, por liberación. En algunas circunstancias, vemos al pueblo de Dios, vemos esto en Joel, la imagen de ayunar y confesión de pecados y arrepentimiento. Vemos el pueblo en el capítulo 13, las iglesias locales adorando y ayunando, y es ahí donde la jornada misionera de Pablo nace. Así que nos hemos apartado domingos periódicos durante este año para ayunar juntos y orar juntos, y este es ese domingo.

Y con frecuencia cuando mira en las Escrituras, usted ve ayuno por razones específicas. Y lo que estamos haciendo, y usted ve en el tope de sus notas ahí, es un ayuno, hoy, por las naciones. Ahora, cuando usted escucha esa palabra “Naciones”, quiero que usted piense en la misma manera en que lo hacen las Escrituras. Porque cuando las Escrituras hablan acerca de naciones, cuando Jesús dice, “Vayan y hagan discípulos a todas las naciones, vayan y prediquen el evangelio a todas las naciones” la imagen no es naciones como pensamos en nuestro mundo de hoy, 190 y algo de naciones como los Estados Unidos. Obviamente, los Estados Unidos no estaban en el primer siglo, igual que muchas de las naciones a nuestro alrededor. Así que es una imagen totalmente diferente.

Las Escrituras se refieren a las naciones

Cuando las Escrituras se refieren a las naciones, la imagen es de estas agrupaciones etnolingüísticas, tribus, clanes, pueblos, llamados “grupos de pueblos”. Y básicamente, tenemos unas 190 naciones en el mundo hoy, sin embargo, estudiosos bíblicos y antropológicos han identificados sobre las 11,000 agrupaciones etnolingüísticas o “grupos de pueblos” en el mundo hoy, más allá que el número de naciones, el número de grupos de pueblos. Y usted piensa acerca de ello, y hace sentido. Un grupo de pueblos es un grupo que comparte un lenguaje común, características culturales comunes. Usted toma una nación como la India, una nación masiva con sobre un billón de personas, esas personas no son monolíticas, no todos los Indios son exactamente los mismos. Usted tiene toneladas de diferentes grupos de pueblos en la India, toneladas de lenguas diferentes, toneladas de diferentes características culturales, no solo en la India, aquí en los Estados Unidos.

Creen el Evangelio

Existen toneladas de diferentes grupos de pueblos viviendo aquí en Birmingham, espacialmente si usted va a una mega ciudad como Nueva York o algo similar. Y usted se para en el subterráneo y usted escucha todas estas diferentes lenguas y todos estos tipos de grupos de pueblos representados a su alrededor, así que sobre 11,000 grupos de pueblos en el mundo. De manera que esos mismos académicos bíblicos y antropólogos han estudiado para ver cómo el Evangelio ha penetrado estos diferentes grupos de pueblos. Y, básicamente ellos han identificado más de 6,000 grupos de pueblos que están todavía hoy, no alcanzados por el Evangelio. No alcanzados significa que en ese grupo de pueblo, menos del 2% de las personas son Cristianos Evangélicos, Cristianos creyentes en el Evangelio, menos del 2% de las personas han escuchado y creen el Evangelio.

Lo cual prácticamente nos ayuda a entender esto, si usted está viviendo en uno de esos grupos de pueblos, la realidad es que usted nacería y viviría y moriría, y probablemente usted nunca escucharía el evangelio. Nunca si quiera oírlo. Estas no son personas que han escuchado el Evangelio, y 98% de ellos lo han rechazado. La realidad es las masas, algunos estiman sobre un billón y la mitad de las personas nunca la han escuchado, no tienen acceso a él. ¿Cómo es eso posible? ¿Cómo es posible por sobre 6,000 grupos de pueblos con todos los recursos que tenemos en la iglesia, que sobre 6,000 grupos de pueblos todavía no han sido alcanzados con el Evangelio?

Vamos a ir

Así que tenemos que decir como iglesia, como familia de fe, que no vamos a sentarnos contentos con ese número. Que vamos a dar, vamos a priorizar nuestros gastos en nuestras vidas y en nuestras familias, y vamos a parar de seguir todas las cosas de este mundo. Vamos a empezar a gastar en lo que realmente importa, esparcir el evangelio hasta los confines de la tierra. Vamos a dar. Vamos a ir. Vamos a ir en periodos cortos, por tiempos cortos. Vamos a ir por tiempos largos. Algunos de nosotros vamos a empacar, vender nuestras casas aquí y mudarnos a estos pueblos alrededor del mundo. Nos vamos a ir por periodos largos. Vamos a dar, vamos a ir, y vamos a orar.

Cuando Jesús en Mateo 9 está hablando acerca de la mies en necesidad del Evangelio, Él dice una cosa, Él dice: “Rogad, pues, al Señor de la mies” así que ese es el por qué, en particular, hemos apartado este Domingo como un día de ayuno y oración para que el Evangelio vaya a las naciones, a todos estos grupos de pueblos. Ahora el texto al que llegamos es Marcos capítulo 11. Es un texto que hemos leído la semana pasada. Vamos a empezar en un segundo en el verso 15. Es una historia, una corta historia, una historia sorprendente en los Evangelios, que nos da una imagen un poco diferente, un retrato de Jesús que el que usualmente pensamos. De manera que lo que quiero hacer, ustedes tienen en sus notas tres diferentes énfasis que quiero mostrarles en esta corta historia. Y lo que vamos a hacer es que vamos a ver cada uno de estos tres, y luego vamos a pausar, y vamos a empaparnos. Y vamos a pasar tiempo en oración. Usted ve, algunas oraciones que vamos a ora corporativamente juntos, vamos a orar individualmente, vamos a cantar juntos en música de adoración. Vamos a dejar estos tres énfasis empaparnos y dejemos así encapsular nuestro día de ayuno y oración.

Entonces, Marcos capítulo 11:15 escuchen esta historia conmigo:

“Vinieron (ellos siendo Jesús y los discípulos), pues, a Jerusalén; y entrando Jesús en el templo, comenzó a echar fuera a los que vendían y compraban en el templo; y volcó las mesas de los cambistas, y las sillas de los que vendían palomas; y no consentía que nadie atravesase el templo llevando utensilio alguno. Y les enseñaba, diciendo: ¿No está escrito: Mi casa será llamada casa de oración para todas las naciones? Mas vosotros la habéis hecho cueva de ladrones. Y lo oyeron los escribas y los principales sacerdotes, y buscaban cómo matarle; porque le tenían miedo, por cuanto todo el pueblo estaba admirado de su doctrina. Pero al llegar la noche, Jesús salió de la ciudad.”

Oremos. Dios, oramos que tu nos ayudes, en este lugar, a entender lo que provocó a Jesús en esta forma. Ayúdanos a ver lo que causó ira santa que se levantó en nuestro amado Salvador. A través de todo este año, Señor Dios, hemos visto la pecaminosidad de tu pueblo, un espejo de nuestras propias almas. Así que oramos que hagas este texto un espejo para nosotros, esta noche. Ayúdanos a ver cualquier cosa en nosotros mismos que necesitamos ver en ellos. Y oramos que Tú en la misma forma que Jesús hizo en ese día que tu boques algunas cosas en nuestros corazones y en nuestras vidas, y entre nosotros como tu pueblo para Tu propósito, para Tu gloria. En el nombre de Jesús, amén.

Antes de Jesús vaya a la cruz y muera

Entonces, aquí está el contexto. Esto es un par de días antes de Jesús vaya a la cruz y muera. Así que Él está caminando, en luto, en Jerusalén con Sus discípulos. La imagen del centro de Jerusalén fue que el templo que Dios había preparado en el Viejo Testamento, y la estructura del templo es realmente importante aquí. Imagine el templo construido en medio, rodeado por diferentes cortes, cortes donde personas se juntaban a adorar. En la parte externa las afueras eran la corte de los gentiles. Esta es donde los no judíos, gentiles, extranjeros, vendrían a adorar. Entonces usted si estaba tratando tu manera desde el exterior, y camina a través de la corte de los gentiles, y llegaba a una seña que literalmente dice, “Si usted es extranjero, no pase más allá de este punto. Gentiles: se paran aquí”

Entonces usted continua adentro si usted es judío, y llega a una corte de las mujeres judías, en donde las mujeres judías adorarían. Usted continúa adentrándose y llega a la corte de los hombres, en donde los hombres judíos adorarían. Sigue adelante y llega a la corte de los sacerdotes, donde los sacerdotes que guiaban al pueblo de Dios, en la adoración de Dios, harían su trabajo. Y luego llega al mismo templo, y usted progresa al centro de eso, y usted llega al Lugar Santísimo, donde Dios simbólicamente en Su gloria habita en medio de Su pueblo. Y lo que sucede es que usted se abre paso desde afuera y menos y menos y menos y menos personas están capacitadas para progresar. Tenemos a todos capaces de juntarse en la corte de los gentiles, usted llega al Lugar Santísimo, y solo el sacerdote en tiempos periódicos, solo en ciertos momentos, puede entrar al Lugar Santísimo. Existe una cortina que separa, la imagen que separa a simples hombres del un Dios santo. La única forma que alguien puede ir en la presencia de un Dios santo es ofrecer un sacrificio por un hombre pecador.

La forma que Dios ha diseñado para la adoración de Su pueblo

Y entonces, esa es la imagen, ese es el escenario, y esta es la forma que Dios ha diseñado para la adoración de Su pueblo bien atrás en el Viejo Testamento que vimos a principio de este año. Y entonces Jesús y Sus discípulos llegan a las cortes del templo e inmediatamente se encuentran envueltos en comercialismo. Hay personas cargando precios exorbitantes para cambiar moneas por un impuesto del templo. Hay bancos y mesas preparadas con palomas y aves y otros sacrificios, personas haciendo trueques, comprando y vendiendo, negocios pasando en todos los lugares. Usted se puede imaginar el bullicio y el negocio de todas estas personas cargando sus negocios.

Y entonces, en el verso 16, este es unos versos que más se pasan por alto en esta historia, en verso 16, dice, “y no consentía que nadie atravesase el templo llevando utensilio alguno.” Básicamente lo que estaba pasando en ese día es que el templo es un lugar bastante grande, si usted está en este lado de la ciudad y quiere llegar al otro lado de ella, usted no quiere caminar todo el camino alrededor del templo. Es mucho más fácil usar las cortes del templo y pasar a través de ellas. De manera que tenemos personas cargado sus mercancías, y si encontraban a alguien durante el camino a la cual le podían vender, entonces eso sería excelente.

¿Qué provocó la ira de Cristo?

Sin embargo, cargando sus mercancías a través del templo, entienda la imagen aquí, ¿Qué provocó la ira de Cristo? Es decir, imagine la escena. Imagine el fuego en Sus ojos y la intensidad en Su voz mientras Él va hacia estas mesas y Él las derriba. Ahora este es el mismo hombre que anteriormente en este capítulo, cuando llega a la ciudad, todos estaban postrados y adorando y viendo sobre la paz. Y ahora Él está violentamente tirando cosas, en todo el lugar en el templo. Él está diciendo a las personas que están caminando a través. Usando el templo como un atajo, “Paren” y Él, obviamente, atrajo la atención de la multitud en ese momento. ¿Por qué hizo esto?

Quiero mostrarles, vamos a progresar a lo que pienso es el clímax en este punto, pero empezaremos aquí. Él fue provocado a una ira santa porque estaba rodeado por personas que habían convertido en casuales con la presencia y gloria de Dios. Personas que estaban cargando todo sus negocios y negociando, y no estaban pensándolo bien la realidad de por quién ellos estaban ahí para adorar. Y aquel en cuya presencia estaban, Su gloria y Su fuerza, y Su poder y estas personas no estaban pensándolo bien. Ahora aquí es donde necesitamos ser realmente cuidadosos en este pasaje. Y no necesitamos igualarnos en ninguna forma el templo con el edificio de la Iglesia. Es decir, la imagen no es “Esta bien, debemos asegurarnos de no tener muchos negocios entrando en la edificación de la Iglesia” esa no es la imagen. Vamos a ver el templo y la edificación Iglesia muy, muy diferente.

La grandeza de nuestro Dios

Sin embargo, hay algunos paralelos. Permítame hacerle una pregunta, ¿piensa que es posible para nosotros como pueblo de Dios, ser tan consumidos con la actividad religiosa que perdamos de vista la grandeza de nuestro Dios? ¿Es posible para nosotros consumir nuestras vidas con rutinas religiosas, y perder de vista a aquel alrededor del cual, aquel a quien rendimos adoración? Hasta a un lugar como este, cuando hacemos una reunión como la iglesia, no es eso posible para nosotros que vayamos con el movimiento, cantar algunas canciones, escuchar a alguien hablar por un largo, largo, largo tiempo, y luego cantar un poco más y luego continuar, y eso es solo lo que hacemos, y nunca damos reconocimiento a la realidad para lo que nos hemos reunido.

Piense en ello. Hemos venido a reunirnos en este lugar para dar gloria y honor y alabanza a aquel que es infinitamente santo e inconcebiblemente maravilloso. Y Su grandeza, nadie en este lugar nadie puede sondar. Todos juntos en este lugar podemos imaginar el esplendor de aquel a quien adoramos, la grandeza, la gravedad de nuestro Dios. La magnitud de lo que está envuelto en la adoración. Dios ayúdanos a no ser casuales contigo, complacientes en Tu adoración. ¿Por qué estamos ayunando hoy? Estamos ayunando de comida, apartándonos de la comida diciendo, “más que nuestra hambre por comida, estamos hambrientos por la alabanza de Dios en la iglesia. Estamos hambrientos por la adoración de Dios. Queremos reverenciar a Dios, estar en temor de Dios. Queremos Su nombre y Su grandeza ser exaltada en la iglesia”

Así que lo que quiero hacer es que quiero que nos empapemos en oración y en adoración. Tienen en sus notas; ustedes notarán tres diferentes oraciones. Y estas oraciones son oraciones corporativas que quiero que oremos juntos. Ellas son tomadas de un gran libro Puritano de oración llamado El valle de la visión, y usted estudia a los hombres y mujeres puritanos, esto fue siglos atrás, y estos eran hombres y mujeres que caminaron con Dios, y conocían a Dios.

Ellos están orando

Y oradores, ellos están orando y escribiendo y preservados por siglos. Así que los tomé y en cierta forma los retrabajé un poco solo para tomar un poco de estos, de manera que podamos entender eso que estábamos orando. Pero quiero que juntos oremos corporativamente, y vamos a empezar con esta primera. Pero quiero que oremos juntos, y luego oremos un poco más. Pero a través de este lugar, antes de continuar, ser recordados de la gravedad de nuestro Dios y la maravilla de lo que hemos realmente juntado a hacer en este lugar, esta noche.

Así que le invito a que se ponga de pie conmigo. Y quiero que fije su mirada, fije la atención de su mente, y el afecto de su corazón, no en una forma casual, en temor sobre el Dios que adoramos. Así que vamos a leer a través de esta oración corporativamente juntos, vamos a orar esta oración corporativamente juntos. Y el objetivo no es pasar por el ayuno, como, que vamos a solo deliberadamente pasar por él. Quiero que considere la maravilla de nuestro Dios, o el Padre, y Dios el Hijo, y Dios el Espíritu. Que Él es el Dios que alabamos. Y vamos a orar esto juntos y luego vamos a cantar. Solo quiero que esto nos empape. Estamos hambrientos por la alabanza de Dios en la Iglesia. Oremos esto juntos.

“Tres en Uno, Uno en Tres, Dios de nuestra salvación, Padre celestial, bendito Hijo, eterno Espíritu, te adoramos como un Ser, una Esencia, un Dios en tres personas distintas. O Padre, Tú nos has amado y enviaste a Jesús a redimirnos. O Jesús, Tú nos has amado y asumiste nuestra naturaleza; has derramado Tu sangre para limpiar nuestros pecados. O Espíritu Santo, Tú nos has amado y entrado en nuestros corazones. Tú has implantado allí vida eterna, y Tú nos has revelado las glorias de Jesús. Tres personas y un Dios, te bendecimos y alabamos, por amar el amor tan inmerecido, lo indecible, tan maravilloso, tan poderoso para salvar al perdido y levantarlo a gloria.

O Padre, te damos gracias porque la plenitud de Tu gracia, Tú nos has dado a Jesús para ser Su oveja. O Jesús te damos gracias porque en la plenitud de Tu gracia Tú nos has aceptado y te convertiste en nuestro abogado. O Espíritu Santo te damos gracias que en la plenitud de Tu gracia. Tú has implantado fe en nosotros, Tú has sometido nuestro obstinado corazón, Tú nos has hecho uno con Cristo por siempre.

O Padre, Tú estás entronado para escuchar nuestras oraciones. O Jesús, Tu mano está extendida para tomar nuestras peticiones. O Espíritu Santo, estás dispuestos a ayunar nuestras debilidades para suplirnos con oraciones, y fortalecernos para alabar. O trino Dios, Tú gobiernas el universo, y oramos hoy, “Santificado sea Tu nombre, venga a nosotros Tu reino, hágase Tu voluntad en la tierra como en el cielo” Amén.”

La adoración de Dios en la Iglesia

Más de lo que tenemos hambre de comida, estamos hambrientos por la adoración de Dios en la Iglesia. Ahora vaya conmigo a Marcos Capítulo 15, y mientras llegamos ahí, quiero que entendamos en una manera más profunda qué está pasando en Marcos capítulo 11. Entonces, Jesús llega al templo y empieza a voltear todas las mesas. La realidad es que Él volteó muchas cosas aquí, y no solo mesas. Porque lo que Él está haciendo es Él está redefiniendo la adoración de Dios. Y esto es importante entenderlo. Usted va a cuenta en Juan, en Juan capítulo 2, de esta limpieza del templo, y en la conversación de Jesús con las personas después de, él hace claro que Su cuerpo es el templo, lo cual es una afirmación valiente. El templo era una imagen de la gloria de Dios, y Jesús dice, “ese soy yo”

Ahora, usted no dice eso tan ligeramente. Este es todo el retrato de quien es Cristo. Él es la gloria de Dios encarnado. Él es el templo de Dios encarnado. Y justo como usted iría al templo para encontrarse con Dios, la manera de encontrarse con Dios es yendo a Jesús. Él es el camino, la verdad y la vida, nadie viene al Padre sino es por Él. ¿Cómo podemos hacer ese tipo de afirmaciones? Y esta es la esencia de lo que vemos en el templo, Santo Dios habitando en medio de personas pecaminosas, y adoración dirigida por un sacerdote, que haría periódicamente, todo tipo de otros sacrificios, pero entonces, en el Día de Expiación entraría al Lugar Santísimo, con la sangre de un sacrificio. ¿Por qué? ¿Por qué sangre? ¿Por qué sacrificio? porque bien atrás; en Génesis 2, vimos a Dios que creó al hombre y a la mujer, y los creó para que habitaran con Él, y les dijo, “Si pecan, morirán”.

Así que en Génesis 3, ellos pecaron, pero ellos estaban todavía vivos. Y la única forma en que ellos estaban todavía vivos es porque Dios toma el sacrificio de un animal y los cierra en Su justicia; la penalidad por el pecado debe ser pagada. Así que ahí es donde vemos este sistema de sacrificios preparado, que cuando el sacerdote vaya en el Día de Expiación, expiación significa estar a una con algo, ser reconciliado con algo. Así que la forma que la persona, la persona pecaminosa, se reconciliaba con el Santo Dios es a través de un sacerdote ofreciendo un sacrificio en el altar, rociando sangre sobre lo que era la cubierta de expiación, la sangre del animal sacrificado para mostrar que el pago por el pecado, muerte, ha sido pagado para que la santidad de Dios pueda habitar entre personas pecaminosas.

Un sacrificio del templo

Bueno, cuando Jesús entra en escena, y el no dice vengo a hacer un sacrificio del templo, Él llega y dice, “Yo soy el sacrificio”, ahora lo pierda esto. Él es la gloria de Dios encarnada, la presencia de Dios encarnada, la santidad de Dios encarnada, Él no tiene pecado. De manera que días después de esto, cuando Él camina a la cruz y Él paga la penalidad del pecado, y todavía, Él no tiene pecado que pagar, entonces ¿de quién es la penalidad que Él está pagando? Qué bueno que me preguntó. Él está pagando la penalidad del pecado que se adeuda de hombres y mujeres en cada nación, cada grupo de pueblos. Y Jesús está pagando su precio de parte de ellos, nuestro precio en nuestro beneficio. Ahora, qué pasaría es que el sacerdote, cuando ofrecía un sacrificio, pasaría por esta cortina que lo separaba a él y al hombre pecador del Santo Dios, entrar ahí y ofrecer el sacrificio y salir.

Jesús, por otra parte, cuando Él ofrece el sacrificio, Marcos capítulo 15:37, verso 37 es Jesús, este es Jesús en la cruz, Él paga el pecado. Él muere. “Jesús dando una gran voz” el sin pecado “expiró”, Jesús murió; verso 38: “Entonces el velo del templo se rasgó en dos, de arriba abajo.”, Sí. La imagen aquí, Marcos es intencional al decirnos esto, a la luz de Marcos capítulo 11, recordándonos a Jesús ofreciendo el sacrificio, de una vez y por todas, por los pecados de hombres y mujeres, cada nación, ahora el camino había sido abierto para el hombre estar con Dios a través de Cristo, a cualquier persona, en cualquier nación, en cualquier momento, aquellos que confían en Cristo y lo que Él ha hecho as sacrificio por el pecado en la cruz, haciendo el pago por el pecado.

Y luego levantándose de la tumba, por cierto, en victoria sobre el pecado a todos aquellos que confían en Cristo, el camino está abierto para que estés con Dios, conocer a Dios, caminar con Dios, encontrar la gloria de Dios.

Este es el por qué Jesús dijo “Nadie viene al Padre sino es por Mí”, porque nadie más es sin pecado, capaz de pagar este precio, y nadie más ha muerto para pagar el precio, y nadie más ha conquistado el pecado y el precio de la muerte en la cruz al levantarse de la tumba. Cualquiera que traiga esas tres cosas a la mesa, entonces tenemos una discusión aquí. Sin embargo, no existe nadie como Él.

Usted tiene libre acceso a Dios y Él pone Su Espíritu en ti

Así que ahora se pone mejor. Es decir, no estoy inventando esto. Esto es real. Aquí en Marcos, y luego usted llega a 1ra Corintios capítulo 6, y el Nuevo Testamento asume un imagen totalmente nueva porque Pablo dice, “vuestro cuerpo es templo del Espíritu Santo la presencia de Dios” ahora, no en la misma forma que Jesús es gloria de Dios encarnada, presencia de Dios encarnada, esto no significa que somos como Jesús en ese sentido, pero la imagen es que cuando estás reconciliado a Dios a través de Cristo, a través de la sangre de Cristo, entonces usted tiene libre acceso a Dios y Él pone Su Espíritu en ti. Y entonces, la presencia de Dios habita en una persona pecaminosa.

Ahora, ¿Por qué es todo eso tan importante? Es importante porque cuando venimos a Marcos capítulo 11, nos damos cuenta, “waoo, esto realmente no se trata sobre qué mesas necesitan ser revueltas en el lobby de la edificación de la iglesia. Esto se trata de algo mucho más profundo que la edificación. Se trata de nuestros corazones y se trata de las mesas que necesitas ser revueltas dentro de nosotros. Es acerca de las facetas de nuestra vida como seguidores de Cristo; este mismo Espíritu de Dios habitando en nosotros. ¿Qué no le está agradando? ¿Qué hay en nosotros que es obstáculo para intimar con Él? ¿Con qué pecado estás luchando? ¿A qué tentación estas cediendo? ¿Qué estás buscando, dando afecto, anhelando más que a Dios?” este pasaje trata acerca de tumbar eso. Señor Jesús, tumba eso en mi corazón, cualquier cosa en mi mente, mi deseo, mi corazón, mi voluntad, acciones. ¿Qué en mi no te está agradando?

Entonces, es por esto que estamos ayunando. Estamos hambrientos por la alabanza de Dios en la iglesia, y segundo, estamos hambrientos por la santidad de Dios en nuestras vidas. Queremos caminar en Su santidad. Hemos confiado en el Cristo. Somos libres del pecado. No queremos volver a aquello de lo cual hemos sido salvados. No queremos llenar nuestras vidas con aquello por lo cual Él murió para limpiarnos. Queremos ser puros. Queremos caminar en santidad. Es por esto que Jesús está limpiando el templo, Él cita de Jeremías 7 en un punto, Él dice: “vosotros la habéis hecho cueva de ladrones.”

Y lo que Él está citando de ahí es Jeremías capítulo 7, Jeremías capítulo 7 es cuando Jeremías da una dirección al templo. Él está en el templo hablando a personas que fueron, no obvie esto, que estaban llevando practicas de adoración, pero utilizando sus prácticas de adoración como una cubierta para sus pecados, hasta como una excusa por sus pecados. “podemos pecar, podemos ir fuera de los sacrificios, estaremos bien”.

La dirección de adoración en nuestras vidas para cubrir por pecados en nuestros corazones

Ahora, una vez más, no es la misma imagen. No estamos hablando acerca de ir al templo a ofrecer sacrificios, sino, oh! Esto es peligroso aquí. En un nivel, ¿Es posible para nosotros tratar de usar actividades religiosas hasta bajo la dirección de adoración en nuestras vidas para cubrir por pecados en nuestros corazones? Todos sabemos que es posible venir a un lugar como este y cantar canciones, ir con la corriente, y nunca, ni una vez, ser honesto con Dios acerca del pecado que estamos luchando. Y si no somos cuidadosos, podemos convencernos a nosotros mismos que, sí, estamos haciéndolo bien, y aún así, ignorar el pecado persistente justo dentro de nosotros.

Y lo que es un peligro más profundo es que podemos abaratar una imagen por la cual Cristo ha muerto, podemos decir, “Bueno, es decir, ¿qué tan prevalente es?” sí, creo en Jesús, he confiado en Jesús, pero vivo como quiero. Hago lo que quiero y soy perdonado, ¿cierto? Oh no, amigo, no, no abarates la sangre que compró el perdón de Dios en Cristo de esa manera.

¿Qué necesita ser derribado, quitado en nosotros, limpiado en nuestros corazones?

Él murió para que podamos ser santos y puros, para que podamos ser libres del pecado, del dominio del pecado, y caminado con Dios y en santidad y pureza. Y entonces perderíamos este texto sino tomamos tiempo aparte para examinar nuestros corazones y pasar tiempo en confesión en este lugar. ¿Qué necesita ser derribado, quitado en nosotros, limpiado en nuestros corazones?

Así que ustedes tienen en sus notas allí, una segunda oración, es una oración de confesión. Lo que quiero que hagamos, y quiero que permanezcan sentados, pero vamos a orar juntos, corporativamente. Y entonces, después de eso, este grupo de hombres, estará aquí, y vamos a tener confesiones individuales a través de todo este lugar. No en voz alta, sino entre tú y e; Señor, cada uno de nosotros y el Señor pasando tiempo, honestos con Él acerca de nuestros pecados, pidiéndole, “Señor, ¿qué necesita ser quitado en mi corazón?” quizás usted está aquí esta noche y por primera vez, usted confiesa su necesidad para Dios limpiar su corazón a través de lo que Cristo ha hecho en la cruz por usted, y usted confíe en lo que Él ha hecho. Y diga “Necesito limpiar mi corazón. Quiero estar reconciliado contigo. Quiero venir a Ti a través de Jesucristo. Has eso esta noche” y entonces para los cristianos en todo este lugar, para ustedes pasar tiempo examinando nuestros corazones y pasar tiempo en confesión. Y estas personas van a cantar en ese proceso. No vamos a cantar juntos, vamos a orar en todo este lugar en confesión mientras ellos cantan. Así que quiero que oremos esta oración, corporativamente juntos, y entonces iremos a nuestros tiempos individuales de confesión. Vamos a orar esto juntos:

“Padre celestial, sálvanos por completo de nuestro pecado. Sabemos que somos justos a través de la justicia de otro, pero anhelamos por parecernos a Ti, somos Tus hijos y debemos cargar Tu imagen; ayúdanos a reconocer nuestra muerte al pecado. Cuando nos tente, ayúdanos a ser sordos a su voz. Libéranos de la invasión y el dominio del pecado. Concédenos caminar como Cristo caminó, para vivir en la novedad de Su vida, la vida de amor, la vida de fe, y la vida de santidad. Aborrecemos nuestros cuerpos de muerte, sus envidias, maldad y orgullo. Perdona, todo tipo de vicios en nosotros. Ten misericordia en nuestra incredulidad, de nuestros corruptos y errantes corazones.

Cuando Tus bendiciones llegan comenzamos a idolatrarlas, y preparamos nuestros afectos sobre ellas en vez de Ti, nuestro hijos, nuestros amigos, nuestras riquezas, y nuestro honor. Limpia este adulterio espiritual y danos pureza, cierra nuestros corazones a todo excepto a Ti. El pecado es nuestra más grande maldición. Permite que Tu victoria sea exhibida en nuestras vidas.

Tu gracia

Ayúdanos a ser devotos, confiados, obedientes, resignados, como niños en nuestro amor, para amarte con alma, cuerpo, mente y fuerza, amar a otros como nos amamos a nosotros mismos, ser salvos de temperamentos furiosos, pensamientos duros, palabras difamatorias, modales poco amables. Llénanos con Tu gracia, diariamente, que nuestras vidas puedan ser agradables a Ti. Amén”

Un lugar más al que quiero que vayan. Es Isaías capítulo 56. Y aquí es donde estoy convencido llegamos al punto principal de la limpieza del templo. Lo que hemos visto es obviamente muy importante, pero quiero mostrarte algo aún más profundo aquí. Cuando Jesús llega y empieza a voltear mesas, para a las personas cortándolas, las primeras palabras que salen de su boca, Él cita de Isaías capítulo 56 versos 6 y 7 “mi casa será llamada casa de oración para todos los pueblos.” Pero quiero que vean de donde Él esta citando. Empezando en el verso 6, este es Dios hablando a través de Su profeta Isaías. Y Dios dijo: “Y a los hijos de los extranjeros que sigan a Jehová para servirle, y que amen el nombre de Jehová para ser sus siervos; a todos los que guarden el día de reposo para no profanarlo, y abracen mi pacto” verso 7 “yo los llevaré a mi santo monte, y los recrearé en mi casa de oración; sus holocaustos y sus sacrificios serán aceptos sobre mi altar”y aquí está la cita “porque mi casa será llamada casa de oración para todos los pueblos.”

Ahora, la pregunta es ¿Por qué este verso? Fuera de todo lo que Jesús tenia para escoger, ¿Por qué este verso en este momento? aquí es donde cometemos el error y venimos a Marcos 11, y decimos, “Bueno, la iglesia es entonces supuesta a ser una casa de oración. El edificación Iglesia esta supuesto a ser un lugar de oración” No. ¿Sí? Cuando la iglesia se junta, necesitamos orar. No hay dudas respecto a eso. Pero ese no es el punto principal de lo que está pasando en Marcos capítulo 11, cuando Jesús cita de aquí. Él podía citar de una variedad de diferentes lugares para hablar acerca de la oración, buscando a Dios, interceder por otros.

Dios traerá estos a Su santo monte

En vez de eso, Él cita de este verso, en particular, ese está hablando acerca de cómo Su casa es para ser una casa de oración para todas las personas. Es cómo Dios traerá estos a Su santo monte. ¿quiénes son “estos”? arriba en el verso 6, “Extranjeros que se unen en el Señor, Él los traerá a este templo, y Su casa será llamada casa de oración para todas las personas”.

Ahora, cuando dice que Él traerá extranjeros, cuando dice “Extranjeros” ahí en el Viejo Testamento, ¿cree usted que se refiere a Judíos o Gentiles? ¿Gentiles verdad? Los extranjeros no son referenciados. Es decir, el pueblo Judío no está referenciado como extranjeros en el Viejo Testamento. Esto es Gentiles, no Judíos. Y Dios está diciendo que Él va a traer no solo el pueblo de Dios en el Viejo Testamento, no solo al pueblo de Israel, la nación de Israel, Él traerá a todas las naciones, todos los pueblos a contemplar Su gloria y ver Su maravilla, y darle adoración y a orar. Entonces eso es lo que Isaías 56 está hablando, “¿Por qué Jesús citó?” bueno, volveré a un imagen que vemos en Marcos 11, y por qué vimos en el contexto que hicimos. Recuerdan que tenemos el templo preparado de la que es, corte de gentiles, corte de mujeres judías, corte de hombres judíos, corte de sacerdote judío, y el Lugar Santísimo. Piense en ello.

¿Dónde cree usted que todas estas mesas, estas bancas y todo, dónde cree usted que ellos prepararon esto? ¿Cree que ellos prepararon eso en medio del Lugar Santísimo? Obviamente no, ¿Corte de los Sacerdotes? No, ¿Corte de los hombres judíos? ¿Corte de las mujeres judías? No. No, ellos preparaban todo esto en la corte de los gentiles, el único lugar donde todas las naciones podían encontrar, observando, adorando la gloria de Dios. Ellos lo habían convertido en un mercado por sus propios intereses. Ellos básicamente habían llenado la corte de los gentiles con todas sus cosas y todas sus actividades y todo para sus propios intereses, y en el proceso había dicho, “dejen que las naciones vayan al infierno” y esto es donde el espejo es más claro. Porque no es posible, no es lo que hemos hecho, no hemos llenado bajo las directrices de adoración y actividad religiosa, llenado nuestras vidas como el pueblo de Dios con cosas para nosotros mismos, y en el proceso, descuidamos más de seis mil grupos de pueblos que todavía ni siquiera tiene el evangelio.

La alabanza de Dios entre todos los pueblos

No es que no tenemos los recursos de llevarles el Evangelio a ellos. Tenemos más que suficientes personas y más que suficiente recursos representados en esta iglesia, hoy. Pero la realidad es, que hemos gastado nuestros recursos y nuestras energías y nuestro dinero y nuestras vidas en más actividades por nosotros mismos, y más comodidad para nosotros mismos, y más cosas para nosotros mismos. Hasta bajo las direcciones de actividades religiosas y adoración, llenado nuestras vidas con nosotros mismos, y en el proceso hemos dicho de generación en generación, entre más de 6,000 grupos de pueblos, que todavía no tienen el Evangelio, hemos dicho, “Usted pueden irse al infierno, pero vamos a tener nuestras cosas” necesitamos arrepentirnos y darnos cuenta del propósito de la adoración no es buscar detrás de cosas, interés propio para nosotros mismos de manera que tengamos actividades religiosas y programas y cosas. No. el propósito de la adoración es levantar a un pueblo que está apasionado sobre la alabanza de Dios entre todos los pueblos.

Dios dice, “Mi deseo es para Mi gloria se encuentre en cada grupo de pueblos en el planeta” Él se merece la alabanza. Él merece adoración de todos los 11,000 grupos de pueblos. Él merece adoración de cada uno de esos 6,000 grupos de pueblos que todavía no tienen el Evangelio. Y el pueblo de Dios, que cree en eso, dará sus vidas para que Su alabanza sea conocida entre ellos. De manera que estas es la razón primaria por la cual estamos ayunando y orando hoy, porque deseamos, estamos hambrientos por la alabanza de Dios en la Iglesia, sí. Estamos hambrientos por la santidad de Dios en nuestras vidas. Y estamos hambrientos por la gloria de Dios en las naciones, más que lo que anhelamos comida, más que lo que nuestros estómagos desean comida , nuestras almas desean que el Evangelio y la gloria de Dios vayan hasta los fines de la tierra.

Y la belleza de no es solo que Dios desea y merece sus alabanzas, Él recibirá sus alabanzas. Viene un día, y Él lo prometió en Isaías 56, viene acerca de en Apocalipsis capítulo 7, donde cada uno de estos grupos de pueblos serán representados alrededor del trono de Cristo, viendo Su alabanza, dándole gloria. Va a pasar, lo que significa más razones para dar todo nuestros recursos y llevar el Evangelio a ellos porque está garantizado que funciona. Y vaya a más de 6,000 grupos de pueblos que no tienen el Evangelio ahora , y predíqueles el Evangelio y usted puede que pierda su vida en el proceso, usted puede perder propiedades y pertenencias y cosas en este mundo, pero al final, ellos van a creer, hay personas que creerán y que se juntarán alrededor del trono de Dios dándole gloria, y eso es digno de que lo demos todo. Es digno de que lo entreguemos todo. Entonces ellos responderán.

El Señor lo trajo a Cristo

Quiero compartir con ustedes. Alguno de ustedes pudo haber estado aquí en Iglesia Secreta en el viernes en la noche. Muchos de ustedes, sé, porque los tickets se terminaron, se vendieron en 5 minutos. Pero tuvimos una oportunidad aquí de un amigo que les quiero presentarles, Raiza, y Raiza es de Asia central, y quiero que escuchen como un hombre en un grupo de pueblos, que no estaba alcanzado con el Evangelio, el Señor lo trajo a Cristo. Y quiero que escuchen la soberana gracia de Dios. Cómo Dios desea Su gloria de todos los grupos de pueblos. ¿Raiza?

Cómo Dios desea Su gloria de todos los grupos de pueblos

Raiza: Gracias. Sí mi nombre es Raiza. Nací en Irán, en el 1975, el tiempo que la revolución vino a mi país. Ese fue un tiempo muy duro cuando crecía en mi país, religiones islámicas muy fuertes. No podía hacer planes para mi futuro. Eso no era libertan entonces. Mi país empezó a pelear con el otro país, Iraq. Cada día, tenemos cohetes y bombas en mi ciudad y en mi país. Así que llega el tiempo y yo pensando mi futuro, y decido que no quiero quedarme en Irán, y salgo a otro país, el país que puedo hacer plan, que puedo tener libertad. Entonces un tiempo decir adiós a familia, amigos, y salir de Irán, y fui a Austria y empecé a vivir allá

Pero viviendo en Austria, necesito salir por el gobierno, y fui a un campamento de refugiados, y me quedé allí. Y entonces luego de eso, a la policía, y di mi caso y mi problema para mis países. Pero en ese tiempo en Irán, en Austria en el campo de refugiados, algunos iraníes, ellos salir allá, y ellos vieron que estoy solo allá, y ellos vinieron a mí. Ellos eran familia; ellos fueron muy buenos conmigo. Y a veces traían almuerzo para mí. Y un día, ellos vinieron a mí y dice, “miércoles, vamos a tener una fiesta. Y si quieres puedes venir a nuestra fiesta” entonces pensé la fiesta es buena, será bueno, y decidí ir el miércoles a esta fiesta. Así que me preparé, y fui allá, eso era un campo de refugiado e un salón. Y nos sentamos juntos, y ver el otro iraní está también allí. Y luego de algunos minutos, ellos se miraron unos a otros y ellos dice, “Está bien, podemos empezar” y yo digo, “Está bien. Será bueno. La fiesta empezará”.

Pero después de eso, uno de ellos miró al otro y dijo, “está bien, tu puedes orar”, y el otro dijo, “No ora tú” pero empiezo a pensar ¿qué tipo de fiesta que ellos quieren orar por esta fiesta? Realmente no entendía. Pero ellos habían empezado a orar y ese fue el primer momento e mi vida que tuve a alguien orar a ese Dios en mi idioma, y dice, “Padre celestial”. Eso fue maravilloso. Fue increíble y lo disfruté mucho. Pero luego de la oración, una señora de todas las ciudades en este grupo, y ella comenzó a compartir la Palabra de Dios, y el tema fue, “Dios es amor” y ella empezó hablando y “Dios tiene un plan para todos; Dios es amor. Dios ama a todas las personas, a todas las naciones”. Y estoy sentado allí, y no podía creer lo que ella dijo, y yo digo, “¿Qué dice esta señora loca? Ella dice, “¿Dios es amor?”

Y yo vengo de un país que es el país Musulmán, y amo el dios de este país. Hay una gran ley sobre todo que usted ve pasando en este país que viene de Alá. Y no podía entender cuando ella decía que Dios es amor porque no vi nada de Dios y llegando del amor en Dios. Estoy sentado y estoy en silencio. Pero después de la reunión, ella vino a mí y dijo, “estamos contentos de que estas aquí” pero realmente no estaba en esa reunión. Y después de eso ella dijo, “¿Sabes que Dios y tiene un plan para ti?” no podía, estaba sentada ahí, y me paré, y estaba mucha hambre por lo que ella compartió conmigo.

Y dije, “realmente lo siento por ti y por lo que estas compartiendo hoy, no podía creer que Dios me amó a mí. Pero si tu quieres realmente conocer a Dios tu puedes venir a mi país y vivir allá. Y entonces luego de eso, estaré sentado contigo hablándote acerca de dios” y estoy saliendo en este salón y ella dice, “pero tienes que saber que Dios te ama y nosotros te amamos, y oraremos por ti”. Estaba tan hambriento, pero dije “no necesito tu oración, y puedes orar para ti” estoy saliendo de ese lugar.

Entonces, vi esa noche que algo realmente pasó en mí, pero no lo entendí. Después de dos semanas, el gobierno Austríaco me envió una carta y me dice, “ya no puedes quedarte en ese país, tienes que volver a tu país” entonces no quería irme realmente de vuelta a mi país porque sabía cómo es este país, y sé cuan oscuro es, y vine de esa oscuridad. Y vi y no podía estar más tiempo en Austria, así que empecé a pensar, y estoy saliendo en la noche en mi habitación, y caminando, y me dije a mi mismo, “Raiza, ¿Qué quieres hacer con tu vida? No puedes volver a tu país. No me gustaba irme” y me dije a mi mismo, “no puedes quedarte aquí” estaba en un país libre, pero no era libre. Y me pregunto y lloro, “¿Dónde está mi país? ¿Dónde pueda estar allí y vivir allí?” y las únicas cosas que vienen a mi mente que puedo realmente hacer para mí mismo es que puedo suicidarme.

Entonces, estaba pensando, pero lo maravilloso en algún lugar, Dios tocó mi corazón. Empecé a hablarle a Dios. Y dije “¿Dios dónde estás?” si estaba en Irán y estaba preguntando “¿Dónde está Dios, mi padre, mi presencia?” el maestro dice tú no estás permitido cuestionar a dios. Sin embargo, ahora, vengo a Austria el país de occidente y alguien viene a mí y dice “Dios te ama y tiene interés por ti, y tiene plan para ti” y el Espíritu Santo comenzó a hablar a mi corazón esa noche, y Él utilizó la palabra que esta señora usaba para Su palabra, y habla a mi corazón y dice, “Sí, te amo y tengo un plan para ti” eso fue maravilloso. Fue increíble. Cómo la esperanza de Dios viene a mi corazón y la luz y todas las cosas oscuras que estaban en mi vida se habían ido.

Entonces, recuerdo que volví a mi cama, y estaba durmiendo muy bien, y en la mañana, me levanté, y llegando al campo de refugio estoy mirando a todo el mundo y me digo a mi mismo y a ellos, ustedes saben, “ustedes no necesitan realmente ciudadanía por Austria, lo único que les falta en sus vidas es Jesús” y volví a estos amigos que ellos compartían conmigo la Palabra, voy a ellos y digo, “realmente lo siento por lo que les dije, pero eso está pasando” y entonces vienen y me abrazan y dice, “Raiza, oramos por ti si tu sales de aquí” entonces eso pasó que vine al Señor. Después de unos meses, el gobierno de Austria me aceptó para ser ciudadano de Austria, pero era bueno saber que Dios me dio la ciudadanía del cielo, y puedo estar en Su reino por siempre con Él alabado sea el Señor.

[Termina de hablar el invitado]

Escuchado del amor de Dios en Cristo

Amén. Gracias, Raiza. Entonces, hay más de un billón de Raizas viviendo entre peronas que nunca han escuchado del amor de Dios en Cristo. ¿Qué pasa cuando ellos escuchan? No estoy diciendo que siempre será fácil de ningún modo. Raiza, usted escuchó el final de su historia que él recibió la ciudadanía en Austria luego de salir de Irán, pero Raiza no está solo de cabotaje en Austria, Raiza irá de vuelta a otro país, que dejaremos en anonimato, a proclamar el Evangelio allí arriesgando su vida. Él sabe que esas personas que nunca han escuchado necesitan escuchar.

Y él está dispuesto a dar todo para que sea conocido. Y yo dijo, unámonos a él. Yo digo, que demos y vayamos y oremos. Nos demos a nosotros mismos, nuestras vidas, nuestras familias, y la iglesia hasta que todos estos grupos de pueblos sepan, hasta que la palabra “no alcanzado” esté eliminada de la categoría, oramos y damos y vamos

De manera que quiero invitarlos que haga esto, quiero que, hay una bolsa marrón al final de cada fila. Están dentro de cada fila. Y puede que tenga que ir al costado para obtenerla. Le invito a que tome una de esas y empiece a pasarla, hay tarjetas dentro, tome una tarjeta, y luego páselas a través de la fila de manera que todos obtenga una tarjeta que se parece a esta. Así que tome esa tarjeta y entonces tomen sus notas, tiene esta tercer oración corporativa al final. Entonces lo que quiero que hagamos es cada una de estas tarjetas, y la mayoría de ustedes tienen diferentes, de forma que no todas sean iguales, pero tiene a un grupo de pueblos en ella, un no alcanzado, estos son los más grandes grupos de pueblos no alcanzados en el mundo.

Así que quiero invitarlos a tomar una tarjeta y en solo un segundo vamos a interceder, y vamos a llamar, vamos a rogar por el Evangelio y la gloria de Cristo pueda ser conocida entre estos grupos de pueblos. Lo que vamos a hacer es orar primero, corporativamente, juntos, con esta oración que está en sus notas, y entones eso nos va a guiar a nuestras oraciones individuales por estos grupos de pueblos. Y vamos a orar juntos para la gloria de Dios sea conocida entre las naciones entre los grupos de pueblos. Así que puede leer eso en un segundo y orar específicamente por ese grupo de pueblos, tomen sus notas conmigo, y oremos corporativamente esta oración juntos en voz alta.

Soberano Dios

Soberano Dios, Tu causa, no la nuestra, compromete nuestros corazones, y apelamos a Ti para preparar Tu reino en cada lugar donde Satanás reina. Glorifícate y nos gozaremos porque traer honor a Tu nombre es nuestro único deseo. Te adoramos, y anhelamos que otros puedan conocer y deleitarse en Ti. Oh! Que todos los hombres puedan amarte y alabarte, que puedas tener toda la gloria de todo el mundo.

Permite que los pecadores vengan a Ti, por el bien de tu nombre. Al ojo de la razón todo respetando la conversión de otros es tan oscura como la media noche, pero Tú puedes hacer grandes cosas. Esta es tu causa, y solo Tu puedes salvar al hombre para Tu gloria. Oh Señor úsanos como quieras, y has con nosotros lo que quieras hacer.

Oh Señor promueve tu causa, venga a nosotros Tu reino, y permite que Tus intereses sean avanzados en el mundo. Oh trae grandes número para Jesús, permítenos ver ese glorioso día, y permítenos estar voluntariamente morir por ese glorioso final. Es Tu causa y Tu reino que anhelamos, no para nosotros. Oh responde nuestra petición y has Tu alabanza conocida entre todos los pueblos. Amén