Sesión 4: ¿Cómo nos afecta la cruz? - Radical

Iglesia Secreta 6: La Cruz de Cristo

Sesión 4: ¿Cómo nos afecta la cruz?

En esta sesión de Iglesia Secreta 6, el pastor David Platt explica prácticamente cómo la Cruz de Cristo afecta nuestras vidas. A medida que comenzamos a comprender la profundidad y las dimensiones del amor de Dios por nosotros, mejoraremos nuestra comprensión de las intenciones, implicaciones y aplicaciones de la cruz. En este mensaje, el pastor David Platt nos recuerda por qué podemos jactarnos de la cruz y, además, por qué deberíamos hacerlo. Por encima de todo, nuestra respuesta a la cruz debe ser alabanza, una alabanza interminable por toda la eternidad.

  1. El propósito de la cruz
  2. Expiación general
  3. Expiación definitiva
  4. Los efectos de la cruz

Tenemos dos secciones más para ver. La primera es la maldición de la cruz. La ambición de la cruz. “Porque hay un solo Dios y un solo mediador entre Dios y los hombres, Jesucristo hombre, quien dio su vida como rescate por todos. Este testimonio Dios lo ha dado a su debido tiempo”. Y la pregunta es ¿Por quién murió Jesús? Y yo mencioné al comienzo cuando vimos lo que básicamente se define como los cinco puntos del Calvinismo, lo que ustedes tienen es total depravación, elección incondicional, gracia irresistible y perserverancia de los santos y en medio tenemos la expiación limitada Y probablemente en la que hay mayor desacuerdo. Y así, esta es la pregunta, ¿por quién murió Cristo?

Las áreas de acuerdo son estas. La suficiencia de la muerte de Cristo, y digo que hay acuerdo entre los cristianos evangélicos. La creencia en la Biblia. La suficiencia de la muerte de Cristo, el pago de Cristo por los pecados en la cruz es suficiente para todo el mundo por eso no hay duda acerca del hecho de que la muerte de Cristo en suficiente para nosotros. Suficiente para los pecados de muchas personas, un número ilimitado de personas. La eficacia de la muerte de Cristo.

Solo aquellos que confían en Cristo para la salvación, de quienes nos vamos a referir de una u otra manera, los escogidos de la iglesia. Por elección, y este es un término escritural. A menudo cuando pensamos en la elección, hay muchos conceptos y es una parte de la discusión del Calvinismo, pero los escogidos es como se describe a veces a la iglesia en el Nuevo Testamento. Así que, solo aquellos que confían en Cristo para la salvación experimentan los efectos de la cruz. Y así es solo cuando ustedes confían en Cristo que la cruz y las realidades de la cruz, la redención, la reconciliación, se vuelven efectivas en sus vidas por la fe en Cristo.

Como nos afecta la cruz para la salvación

No es automático. No es universal, por ejemplo, como Cristo hizo esto, todos son salvos automáticamente. Bien, ustedes tienen que confiar en Cristo y luego proclamar la muerte de Cristo. El Evangelio es para ser predicado a todas las personas. Yo pienso que podemos decir tranquilamente que las personas de ambos lados de esta discusión están de acuerdo en estas tres cosas.

Áreas de desacuerdo, realmente, el área de desacuerdo, ¿Era la intención de Dios, en Cristo, posiblemente salvar a todas las personas? ¿Pretendía Dios en Cristo posiblemente salvar a todas las personas? O, ¿era la intención de Dios, en Cristo, posiblemente salvar a algunas personas? O sea los escogidos, la iglesia. ¿Pretendía Dios posiblemente salvar a todos? ¿Murió Cristo para hacer posible la salvación para todos, o murió Cristo para hacer posible la salvación solo a algunos? ¿Pagó Jesús por los pecados de todas las personas o solo murió por los pecados de los escogidos?

Ahora, la palabra que se ha utilizado en el debate del Calvinismo es expiación limitada. Yo no utilizaré esta palabra esta noche. En lugar de eso hablaré, en lugar de ilimitada y limitada, yo hablaré acerca de la expiación general y expiación definitiva. Esa palabra limitada, no creo que sea una buena palabra. Incluso para aquellos que creen esto, que de ese lado del tema, o aquellos que no creen, porque ¿Quién quiere limitar la belleza de aquello que hemos estado hablando acerca de la cruz? Nadie quiere limitar eso. Y en cierto sentido, todos, por naturaleza del efecto de que solo aquellos que creen en Cristo serán salvos por los efectos de la cruz, que todos nosotros estamos limitando la expiación en algún sentido. Mientras que no todos sean salvos, entonces hay un límite aquí para quién es salvo, y está basado en la fe.

Expiación general y definitiva. Quiero que profundicemos en estos dos aspectos. Expiación general. Expiación general primero. Aquellos que dicen que Cristo murió para pagar la pena por los pecados de todas las personas, haciendo de esa manera posible para cualquiera ser salvo. Por eso es que nos referimos a expiación general. Algunas verdades en las Escrituras que dicen esto. Dios ama a todas las personas y quiere que todas las personas sean salvas. Juan 3:16, obviamente el ejemplo esencial, “Porque tanto amó Dios al mundo, que dio a su Hijo unigénito”. 1 Pedro 3:9, “…porque no quiere que nadie perezca, Él es el sacrificio por el perdón de nuestros pecados, 1 Juan 2. Y no solo por nosotros, sino por los pecados de todo el mundo.

1 Juan 4:14, “Y nosotros hemos visto y declaramos que el Padre envió a su Hijo para ser el Salvador del mundo.” E incluso el texto que estamos mirando, 1 Timoteo 2:5 y 6, ha sido nuestro texto base, para todo. Así que, la expiación general dice, Dios ama a todas las personas y quiere que todas las personas se salven. Cristo murió por los pecados de todas las personas. Si Dios ama a todas las personas y realmente quiere que todos se salven, entonces sería inconcebible, aquellos que son, yo me voy a poner en ese lugar por un momento. Sería incocebible que Él ofreciara a Cristo para pagar por el pecado de solo algunas personas. El amor universal de Dios requiere un pago universal por el pecado. El Cordero de Dios que quita el pecado del mundo. Juan 1:29.

Nosotros colocamos nuestra confianza en el Dios vivo quien es el Salvador de todos los hombres y especialmente aquellos que creen. Y es allí donde vemos a todos los hombres, esta es una imagen universal y especialmente aquellos que creen, así que Él es el Salvador de todos, no solo de los creyentes. Los creyentes son añadidos a esta figura pero Él es el Salvador de todos los hombres. Hebreos 2:9. “…por la gracia de Dios, la muerte que él sufrió resulta en beneficio de todos.” 2 Pedro 2:1 dice, “En el pueblo judío hubo falsos profetas, y también entre ustedes habrá falsos maestros que encubiertamente introducirán herejías destructivas, al extremo de negar al mismo Señor que los rescató.” Estos eran falsos profetas, falsos maestros y Dios los compró. Cristo los compró a ellos.

Así que Cristo compró, en un sentido aquí, claramente, a todos los hombres, incluso los falsos profetas y falsos maestros. La siguiente verdad, la fe en Cristo es necesaria para que los beneficios de la muerte de Cristo se apliquen a nuestras vidas. Ya hemos hablado acerca de esto, aquellos que creen en Él tendrán vida eterna. Confiesa con tu boca que Jesús es el Señor y cree en tu corazón que Dios le levantó de los muertos, eso es cuando eres salvo. Y finalmente, el evangelio debe predicarse a todas las personas. Porque cualquier persona tiene la posibilidad de llegar a la salvación. El Evangelio debe predicarse a toda persona porque cualquier persona tiene la posibilidad de llegar a la salvación.

Obviamente, ir y hacer discípulos a todas las naciones. El Espíritu está en ti para ir a los confines de la tierra. Cómo podemos predicar realmente, auténticamente predicar el Evangelio a toda persona si realmente no está disponible a toda persona. Si Cristo solo murió por algunas personas, entonces cómo iremos a todas las personas a decirles que Cristo murió por ellas. Y esto es lo que Jesús dice, Él dice, “Vengan a Mí todos los que están cansados y cargados y Yo los haré descansar”. Él dice, todos los que están cansados. Él no dice algunos de ustedes.

Así que la imagen aquí en la expiación general es que Dios diseñó la Salvación para hacer, diseño la cruz para hacer posible la salvación para todas las personas. Esa es la expiación general. La expiación definitiva, permítame ponerme en estos zapatos. Cristo murió para pagar la pena por los pecados de los escogidos. Haciendo de esa manera seguro que Su pueblo será salvo. Él pagó por la pena de los pecados de los escogidos asegurándose de que Su pueblo sea salvo. Y aquí está la imagen a la que nos guiarán aquellos en la imagen de la expiación definitiva. Dios ama a los escogidos y diseña su salvación en la cruz. Él ama a los escogidos y diseña su salvación en la cruz. Efesios 1. En un largo pasaje que figura allí, pero lo que hemos visto en Efesios 1:3-14, es el Padre, el Hijo y el Espíritu Santo. Escuche esto.

“Alabado sea Dios, Padre de nuestro Señor Jesucristo,” comenzaremos con el Padre, “que nos ha bendecido en las regiones celestiales con toda bendición espiritual en Cristo. Dios nos escogió en él antes de la creación del mundo, para que seamos santos y sin mancha delante de él. En amor nos predestinó para ser adoptados como hijos suyos por medio de Jesucristo, según el buen propósito de su voluntad, para alabanza de su gloriosa gracia,” Así que el Padre nos escogió, nos predestinó, nos adoptó antes de la creación del mundo, para pertenecerle a Él. Luego él habla de Cristo, “En él tenemos la redención mediante su sangre, el perdón de nuestros pecados, conforme a las riquezas de la gracia que Dios nos dio en abundancia con toda sabiduría y entendimiento.”

Y unas oraciones más abajo vemos que dice, “En Cristo también fuimos hechos herederos, pues fuimos predestinados según el plan de aquel que hace todas las cosas conforme al designio de su voluntad, a fin de que nosotros, que ya hemos puesto nuestra esperanza en Cristo, seamos para alabanza de su gloria.” Y luego tenemos el Espíritu, “En él también ustedes, cuando oyeron el mensaje de la verdad, el evangelio que les trajo la salvación, y lo creyeron, fueron marcados con el sello que es el Espíritu Santo prometido. Éste garantiza nuestra herencia hasta que llegue la redención final del pueblo adquirido por Dios, para alabanza de su gloria.”

Así que lo que tenemos es, hablando desde la expiación definitiva, tenemos al Padre, quien antes de la creación del mundo nos ha escogido, puso su afecto, adoptó, predestinó, personas para ser adoptadas por Él mismo. Tenemos al Espíritu que hace esto una realidad, sellándolos para toda la eternidad. ¿Si el Padre y el Espíritu están enfocados en personas definitivas, entonces por qué el Hijo moriría por todas las personas? El Padre ha escogido, predestinado a estas personas. Lo que Efesios 1 está diciendo del Hijo, ¿Por qué el hijo moriría por personas que el Padre no ha predestinado para ser adoptadas como Sus hijos? Esto pondría al Padre y al hijo en contra. El Hijo intentando hacerlo posible para todos, pero el Padre, realmente solo predestinando, llamando, adoptando, solo a algunas personas, a ciertas personas.

Una imagen de la expiación definitiva dice, Dios ama a los escogidos y diseña su salvación en la cruz. Cristo murió para salvar definitivamente a Su pueblo. Definitivamente salvar a Su pueblo. Mateo 1:21 dice “…le pondrás por nombre Jesús, porque él salvará a su pueblo de sus pecados”, no dice podrá salvar, no dice hará posible, Él salvará a Su pueblo, Juan 6:37, Jesús mismo dice, “Todos los que el Padre me da vendrán a mí; y al que a mí viene, no lo rechazo. Porque he bajado del cielo no para hacer mi voluntad sino la del que me envió. Y ésta es la voluntad del que me envió: que yo no pierda nada de lo que él me ha dado”.

Aquí hay personas definitivas. Hechos 20:28, “Tengan cuidado de sí mismos y de todo el rebaño sobre el cual el Espíritu Santo los ha puesto como obispos para pastorear la iglesia de Dios, que él adquirió con su propia sangre.” Él compró la iglesia. “Esposos, amen a sus esposas, así como Cristo amó a la iglesia y se entregó por ella”. Por la iglesia. Tito 2, “…Jesucristo. Él se entregó

por nosotros para rescatarnos de toda maldad y purificar para sí un pueblo elegido, dedicado a hacer el bien.”

Esto es donde aquellos que defienden la expiación definitiva dirían, obviamente no todas las personas se salvan, no todas las personas se salvan. 2 Tesalonicenses 1:7-9 lo aclara, no todas las personas se salvan, así que. Pensemos en esto. Piense en esto conmigo. No todas las personas se salvan. Así que, si Cristo murió para pagar por los pecados de todas las personas, entonces esto significa que Él ha pagado por los pecados de todas las personas. Así que, ¿por qué aún algunos van al infierno? Si Él ha pagado por los pecados de todas las personas, entonces ¿Cómo es que ellos van al infierno?

Bueno, dirán ustedes, ellos no han confiado. Pero, la incredulidad es pecado, téngalo en mente, sus pecados incluyen el pecado de incredulidad y se ha pagado por él. Así que, si su pecado de incredulidad ha sido pagado, entonces, ¿Cómo pueden las personas estar en el infierno por los pecados por los que se ha pagado, incluso el pecado de incredulidad? Por eso es que Hebreos

2:17 dice, “Por eso era preciso que en todo se asemejara a sus hermanos, para ser un sumo sacerdote fiel y misericordioso al servicio de Dios, a fin de expiar los pecados del pueblo.”

El precio de los pecados

Esta es la imagen de la propiciación. Hebreos 2, se dirige a la expiación. La ira de Dios se ha calmado. Se ha pagado por los pecados. ¿Cómo es que ellos aún siguen yendo al infierno si se ha pagado por sus pecados y la ira de Dios se ha aplacado? Esto es lo que dicen quienes defienden la expiación definitiva. Ellos básicamente dicen que tenemos tres opciones. Tres opciones. Número uno, como Cristo soportó la ira de Dios por todos los pecados de todos los hombres, si ese es el caso, entonces todas las personas van al cielo, porque Él soportó la ira. Ya no hay más ira, Él la tomó toda. Así que ya no hay más ira para experimentar. Entonces todos los hombres van al cielo. Bueno, esto es el universalismo, sabemos que no es verdad. Saltemos a la tercera opción, luego regresamos a la segunda, Cristo soportó la ira de Dios por todos los pecados de todos los hombres o Cristo soportó la ira de Dios por algunos pecados de algunos hombres. Si ese es el caso, entonces nadie va al cielo. Sabemos que esto no es cierto.

Esto nos deja solo una opción. Cristo soportó la ira de Dios por todos los pecados de algunos hombres. Todos los pecados de algunos hombres. Vayamos un paso más, ¿Dios cumple siempre Sus propósitos? ¿Si Dios siempre cumple Sus propósitos y Cristo murió por el propósito de salvar a todas las personas, entonces por qué no todas las personas son salvas? ¿Cumple Él Sus propósitos o no? “…no es posible frustrar ninguno de tus planes”, dice Job. “Lo que he dicho, haré que se cumpla; lo que he planeado, lo realizaré”, Isaías 46. John Owen dijo, Si Cristo murió por todos, pero no todos son salvos, entonces Su propósito no se cumplió. ¿Dirás tú que la cruz de Cristo no es efectiva para salvar? ¿Qué Él murió para hacerlo posible y ahora Él solo está sentado esperando que alguien tome Su oferta?”

Esto debilita la imagen de Dios en Cristo. Cristo entonces murió por el propósito de salvar a ciertas personas, los escogidos. Él dice, “Yo soy el Buen pastor que da Su vida por Sus ovejas.” Cuando llegamos a Juan 17, Él dice, Yo no pido por el mundo, sino por aquellos que Tú me has dado. No ruego sólo por éstos. Ruego también por los que han de creer en mí por el mensaje de ellos. Él está pidiendo por los cristianos aquí. Jesús no está orando por todos. ¿Murió Jesús por las personas de las que Se rehusó a orar? ¿Él no estaba orando por ellos antes de ir a la cruz? Él está orando por ciertas personas.

Llegamos a Romanos 8 y esta imagen de “El que no escatimó ni a su propio Hijo, sino que lo entregó por todos nosotros, ¿cómo no habrá de darnos generosamente, junto con él, todas las cosas?” Él habla acerca de Cristo Jesús quien murió. “Cristo Jesús es el que murió, e incluso resucitó, y está a la derecha de Dios e intercede por nosotros. ¿Quién nos apartará del amor de Cristo? Cuando usted llega al final de esta imagen, nada nos puede separar del amor de Dios que es en Cristo Jesús Señor nuestro. Ahora, dice que Dios entregó a Su Hijo por todos nosotros. Pero la imagen completa es quién pondrá algún cargo contra aquellos que Dios ha escogido. ¿Quién acusará a los que Dios ha escogido? Dios es el que justifica. ¿Quién condenará?

¿Ven ustedes eso en medio de pasaje allí? Está hablando que el pueblo de Dios son aquellos a quienes Dios ha escogido y quienes tienen a Cristo como Salvador, quien está intercediendo a la diestra de Padre por nosotros. Ahora, aquellos que defienden la expiación definitiva dirían que la fe en Cristo es la manera ordenada de Dios y Cristo compró el regalo para que los escogidos sean salvos. Aquí es donde las cosas se ponen interesantes, y hasta candentes. Miremos Hechos 18. Cuando Apolos quería ir a Acaya, los hermanos lo alentaron y le escribieron a los discípulos allí para que le recibieran.

Con su llegada él fue de gran ayuda para aquellos quienes por gracia habían creído. Ellos creyeron por gracia. “Porque a ustedes se les ha concedido no sólo creer en Cristo, sino también sufrir por él”. Se le concede al que cree, esa fe es el regalo. La fe es algo que nosotros tenemos por gracia. No es que Dios haya hecho todas estas cosas en Cristo para venir a este lado de la mesa y ahora tenemos que añadir la fe. La realidad es que, los defensores de la expiación definitiva dicen aquí es que la escritura está diciendo que la fe misma es un regalo. Ustedes no podrían siquiera creer si la gracia no estuviera en ustedes para creer. Ustedes no la tienen en

ustedes. Ustedes están muertos en sus pecados. ¿Cómo pueden venir a la vida si están muertos?

La necesidad de la gracia con fe

Ustedes necesitan la gracia como un regalo para incluso creer. Packer, G.I. Packer dijo, “Uno hace a la salvación”, él está hablando acerca de la comparación entre la expiación general y la definitiva, él dice, “Uno hace a la salvción dependiente en la obra de Dios. La otra en la obra del hombre. Una considera la fe como parte del regalo de Dios de la salvación. La otra considera la fe como una contribución del hombre para la salvación”. Una da toda la gloria de creyentes salvos a Dios. La otra divide la alabanza entre Dios y el hombre. Por así decirlo, Dios por así decirlo, construyó la maquinaria de la salvación y ahora el hombre tiene que, creyendo, operarla.

Hablando de la expiación general, él dice, nosotros queremos proclamar a Cristo como Salvador, nosotros queremos, aún así terminamos diciendo que Cristo, habiendo hecho posible la salvación nos ha dejado a nosotros convertirnos en nuestros propios salvadores. Es más o menos de esta forma, queremos magnificar la gracia salvadora de Dios, y el poder salvador de Cristo, así que declaramos que el amor redentor de Dios se extiende a todo hombre y que Cristo murió para salvar a todos los hombres. Y luego para evitar el universalismo, tenemos que despreciar todo lo que hemos dicho anteriormente y explicar que después de todo, nada que Dios y Cristo haya hecho puede salvarnos a menos que nosotros añadamos algo a ello.

Y Packer sigue diciendo, el factor decisivo que realmente nos salva es nuestra propia creencia. Lo que decimos termina en esto, Cristo Jesús nos salva con nuestra ayuda. Y lo que esto significa, cuando uno piensa en esto, es que nosotros nos salvamos a nosotros mismos con la ayuda de Cristo. La fe es el medio ordenado de Dios en el regalo adquirido de Cristo, llegando al final aquí, el Evangelio deber ser predicado a toda persona porque algunas personas definitivamente se salvarán.

Ahora, hay personas que tomarán la expiación limitada o la expiación definitiva diciendo que nosotros no necesitamos ir a predicar, pero hay muchos a través de la historia, hay muchos predicadores evangelísticos, Charles Spurgeon, George Whitefield que han predicado el Evangelio apasionadamente y fielmente para que las personas lleguen a Cristo, y ellos eran defensores de la expiación definitiva. Ellos decían sí, nosotros predicamos el Evangelio a todas las personas porque no sabemos quiénes son los escogidos. Quienes aquellos que responderán por la gracia de Dios. Así que predicamos el Evangelio a todos y sabemos que alguien, algunos serán salvos, pero no sabemos quiénes son, así que predicamos el Evangelio a todas las personas.

Juntemos a estos dos. Es interesante cuando miramos la historia de la iglesia. Yo mencioné a George Whitefield, George Whitefield era un evangelista, John Wesley era un evangelista de la misma época. Ambos tenían diferentes puntos de vista en esto, debates realmente interesantes tenían uno con el otro. Bueno, ya ha pasado la hora y vamos a resolver este asunto ahora mismo, ¿están listos? Okay. Aclaremos, toda la historia de la iglesia apareciendo en este momento.

Si todos ellos pudieran estar aquí, esto es bueno. Okay, y el peligro es que vamos a profundizar en esto mañana a la mañana, tendremos toda clase de ideas acerca de lo que concluyamos, porque ya estamos cansados. Así que vamos a las conclusiones. Y esta no es una pregunta de sí o no. Y yo quiero con toda seriedad, quiero acercarme a esta imagen con tanta humildad como haya en mí, porque estamos en una larga línea de hermanos y hermanas que han ido delante de nosotros y han tenido muchas discusiones acerca de estas cosas y obviamente, Dios ha utilizado grandes hombres de Dios, grandes mujeres de Dios, quienes han creído diferentes cosas de algunos de estos temas. Pero así es como yo, como pastor, veo esta imagen, lo mejor que pueda basándome en la verdad de la Palabra de Dios. Hay múltiples percepciones de la voluntad de Dios.

Múltiples percepciones de la voluntad de Dios. Esto nos regresa un año atrás cuando observamos quién es Dios. Y quiero que usted siga conmigo. Fue la voluntad de Dios crucificar a Jesús y hacer que sufriera. Hemos hablado acerca de esto. Hechos 2:23, solo piense acerca de la cruz. Jesús fue entregado a sus perseguidores, torturadores y con Dios sabiendo de antemano y ustedes, con la ayuda de hombres malvados lo mataron colgándolo en la cruz. Así que, fue la voluntad de Dios que Cristo sea crucificado. ¿Significa esto que la voluntad de Dios para las personas es que asesinen?

Múltiples percepciones aquí de la voluntad de Dios. Piense en esto de dos maneras, en la Escritura, primero, la voluntad revelada de Dios, lo que Él declara. Es Su palabra. Su palabra. Él dice, ésto es lo que les ordeno que hagan, les digo que hagan. Mi Palabra, ésto es lo que Yo decreto. 1 Timoteo 3:4, Su voluntad revelada, 2:3-4, Esto es bueno y agradable a Dios nuestro Salvador, pues él quiere que todos sean salvos y lleguen a conocer la verdad.” Esta es Su voluntad revelada, pero ¿llegan todos los hombres a la salvación y al conocimiento de la verdad? No, ¿significa ésto que la voluntad de Dios no se cumple?

No, significa que Su voluntad revelada, lo que Él declara es diferente de lo segundo, la voluntad secreta de Dios, lo que Él decreta. Su voluntad revelada es lo que Él dice, lo que Él declara en Su palabra, Su voluntad decretada es lo que sucede, lo que realmente sucede en la tierra. Él no dice, Él no nos ordena pecar. ¿Hay pecado en la tierra? Sí. La voluntad revelada, no pecarás. Voluntad decretada, hay pecado y Dios tiene el control sobre todo. Salmos 139, “…todo estaba ya escrito en tu libro; todos mis días se estaban diseñando, aunque no existía uno solo de ellos.”

Veamos la imagen en Génesis 50:20. Dice, Cuando José fue vendido como esclavo por sus hermanos, él dijo, “Es verdad que ustedes pensaron hacerme mal, pero Dios transformó ese mal en bien para lograr lo que hoy estamos viendo: salvar la vida de mucha gente.” Dios no les declaró a los hermanos de José que lo vendieran como esclavo, sino que Él lo decretó para que al final, toda la familia de José se salvara del hambre porque él estaría en Egipto, así que voluntad revelada, voluntad declarada y voluntad decretada, ambas aquí. Vemos dos sentidos de la voluntad de Dios aquí. Ahora, ¿Cómo se unen estas dos? Aquí es donde hablamos de misterio el año pasado. La soberanía de Dios. Él tiene el control. Dios es absolutamente soberano. Él es absolutamente soberano sobre todas las cosas. Aquí no hay nada que nosotros podamos hacer, nada que ustedes o yo podamos decir para tomar a Dios con la guardia baja. La soberanía de Dios. Él tiene el control. Al mismo tiempo, hay responsabilidad en el hombre.

Nuestra responsabilidad con la Cruz

La responsabilidad del hombre, estamos tomando decisiones. Vemos la soberanía de Dios en pasajes como Romanos 9, Juan 15 y Efesios 1 que miramos anteriormente, Yo los escogí, los predestiné, esta es la soberanía de Dios. Él tiene el control de todo. Al mismo tiempo, no es una imagen, las Escrituras no nos dan una imagen de robots respondiendo a un Dios mecánico. Esto no es un determinismo fatal, donde solo hacemos todo lo que Él hace, hay una imagen aquí de la soberanía de Dios y la responsabilidad del hombre. Estamos haciendo elecciones, así que cuando llegamos a Hechos 2:23, Jesús estaba diciendo, este hombre fue entregado por ustedes por el propósito establecido de Dios y ustedes, con la ayuda de hombres malvados lo mataron clavándolo en la cruz. Esta era la soberanía de Dios. No era que Dios estaba sentado en el cielo esperando que ellos crucificaran a Su Hijo.

El ordenó que Su hijo sea crucificado al mismo tiempo, no son robots que están haciendo esto. Estos son hombres que le mataron haciendo elecciones que son responsables por lo que han hecho. Ahora, aquí esta el asunto acerca de nuestras decisiones. Nuestras decisiones son seguras, no necesarias. Lo que quiero decir con eso, las decisiones necesarias deben suceder. Este fatalismo determinístico robótico. No podemos actuar en un modo contrario al plan de Dios. Decisiones seguras, diferencias, ellas sucederán. No actuaremos de una forma contraria al plan de Dios. Y esto es la conclusión, pienso que las Escrituras nos enseñan aquí que nuestras decisiones son completamente reales. Tomamos decisiones reales, pero no completamente

libres. No somos libres en el sentido de que podemos hacer cosas que puedan tomar a Dios desprevenido y no verlas venir.

Al mismo tiempo, nuestras elecciones son reales. Hacemos elecciones reales cada día, no podemos culpar a otros por las elecciones que nosotros hacemos. Nosotros hacemos elecciones. No podemos culpar a Dios por las elecciones que hacemos, sí, Él es soberano, pero nosotros somos responsables. Nuestras elecciones tienen consecuencias reales con responsabilidades reales. Ahora, cómo une Dios estas cosas, Su soberanía y la responsabilidad del hombre, aquí es donde entra el misterio. Pero nosotros somos naturalmente responsables ante Dios. Las personas que clavaron a Jesús en la cruz fueron responsables por lo que ellos hicieron. Ustedes y yo somos responsables por nuestro pecado, a pesar de que nosotros pecamos bajo el paraguas, sobre toda la soberanía de Dios.

Somos naturalemente, y moralmente responsables ante Dios, intelectualmente responsables ante Dios. Y finalmente somos responsables ante Dios. He puesto varias citas de la Biblia allí, donde usted ve, no profundizaremos en esto, pero en cada pasaje pueden ver la soberanía de Dios, la responsabiliad del hombre, unidas. Vemos la soberanía de Dios y la responsabilidad del hombre unidas en cada una de estas imágenes.

Hechos 13:48, solo señalaré una, “Al oír esto, los gentiles se alegraron y celebraron la palabra del Señor; y creyeron todos los que estaban destinados a la vida eterna.” La soberanía de Dios, ellos fueron destinados para vida eterna. La responsabilidad del hombre, ellos creyeron. Van juntas, está sobreentendido, van unidas. Y así, vemos múltiples percepciones de la voluntad de Dios, tenga esto en mente. Segundo, hay múltiples dimensiones del amor de Dios. Múltiples dimensiones del amor de Dios. Dios es amor, ¿Qué significa esto? Bueno, piense en el amor de Dios expresado de cinco diferentes maneras en la Escritura.

El efecto del amor de Dios

Primero, Su amor en la trinidad. Vemos la imagen de que el Padre ama al Hijo y el Hijo ama al Padre, el amor de Dios en la trinidad. Esto se utiliza generalmente para describir el amor de Dios. Segundo, el amor de Dios por toda la creación. La Biblia habla acerca de cómo Dios ama a toda la creación. Incluso las aves del cielo son amadas por Dios, provee para ellas, son sustentadas por Dios, el amor de Dios por toda la creación. Tercero, en algunas oportunidades la Escritura habla acerca del amor general de Dios por todas las personas, Su amor por todo el mundo. Las Escrituras definitivamente hablan del hecho de que Dios ama a todo el mundo, a todas las personas en el mundo. Al mismo tiempo, cuarto, Dios tiene un amor particular para Su pueblo escogido, en la Escritura, sin duda. Escuche esta descripción de Dios y Su pueblo en Deuteronomio. “El Señor se encariñó contigo y te eligió, aunque no eras el pueblo más numeroso sino el más insignificante de todos. Lo hizo porque te ama y quería cumplir su juramento a tus antepasados; por eso te rescató del poder del faraón, el rey de Egipto, y te sacó de la esclavitud con gran despliegue de fuerza.” Es un afecto del que dice, Yo estoy poniendo Mi afecto en Israel. Vemos lo mismo en Deuteronomio 10, Malaquías 1. “amé a Jacob pero aborrecí a Esaú”. Esta es una imagen del amor de Dios por un pueblo particular.

Y luego llegamos al Nuevo Testamento. Efesios 5:25, Cristo amó a la iglesia y se entregó a Sí mismo por ella y así las Escrituras hablan de Dios entregando un amor particular para un pueblo particular. En quinto lugar vemos el amor de Dios como el amor condicional de Dios. ¿Es el amor de Dios incondicional? Antes de que responda a esta pregunta, piense en estos versículos. Él mostró amor a miles de generaciones de quienes lo amaron y guardaron Sus mandamientos. Juan 15:9 y 10, Jesús dice, “Si obedecen mis mandamientos, permanecerán en mi amor”. Manténganse en el amor de Dios mientras esperan por la misericordia de nuestro Señor Jesucristo, por la obediencia.

Ahora, aquí es donde tenemos que tener cuidado, el amor de Dios es incondicional, ¿verdadero o falso? Ustedes dirán amigo, es medianoche, no lo sabemos. Bueno, aquí está el asunto, en un sentido, sí, en el sentido de Su amor por toda la creación, en el sentido de Su amor por todas las

personas, sí, pero no en el sentido de Su amor condicional. Algunas veces en la Escritura, el amor de Dios se menciona como condicional.

¿Qué les parece ésta declaración?, bueno, Dios ama a todos por igual. ¿Verdadero o falso? Ambos, ambos. Sí, Él ama a todo el mundo en el sentido de Su amor universal por todas las personas, sí, Él ama a todos por igual, ¿Ama Él a todos por igual así como amó a Israel en el Antiguo Testamento? Absolutamente no. Así que tenemos que ser cuidadosos con estos clichés que utilizamos. Múltiples percepciones de la voluntad de Dios. Múltiples dimensiones del amor de Dios y aquí es donde ustedes pueden decir, yo no veo la conexión. Okay, aquí es donde se conecta, hay múltiples intenciones en la cruz de Cristo. Múltiples intenciones en la cruz de Cristo. Y aquí es donde yo junto todo, la voluntad de Dios, el amor de Dios, la cruz de Cristo. Yo diría, baasado en lo que hemos visto en la Escritura, Jesús murió por todos.

Como el amor de Dios afecta la Cruz

Él murió por todos, en el sentido de que Su muerte es suficiente para subrir los pecados de todo el mundo, refiriéndose aquí al amor general de Dios por todas las personas. Él desea que todos vengan al arrepentimiento. Esto es lo que enseñan las Escrituras. Él tiene un amor general por todas las personas. A través de la cruz Dios desea y demanda que todas las personas confíen en Él. Esta es Su voluntad revelada, lo que Él declara. Así que en el sentido de Su amor general por todas las personas, la voluntad revelada de Dios, lo que Él declara, Jesús murió por todos.

Pero al mismo tiempo, detenerse allí sería incompleto. Jesús murió por los escogidos, por la iglesia, en el sentido de que, Su muerte de hecho es suficiente solo para ellos. Dios tiene un amor particular por un pueblo escogido. Esto es lo que enseñan las Escrituras. Desde el Antiguo Testamento al Nuevo Testamento. Es la forma en que algunas veces las Escrituras hablan acerca de Su amor. Así que a través de la Cruz, Dios permite y faculta a Su pueblo a confiar en Él y esta es la voluntad secreta de Dios, lo que Él decreta. Es lo que sucede, no todos confían en Él. Él ha declarado que todos se vuelvan a Él. No todos confían en él.

Esta es la voluntad decretada de Dios, la voluntad secreta, lo que Él decreta. Y a través de la cruz, Dios permite y faculta a Su pueblo a confiar en Él. Así que ¿A dónde nos lleva esto? Múltiples intenciones, múltiples implicancias. Tres implicancias. Número uno, confesamos osadamente la suprema suficiencia de la muerte de Cristo en la cruz por los pecados de todo el mundo. Osadamente confesamos esto. La supremacía de la muerte de Cristo en la cruz por los pecados de todo el mundo. Nosotros en ninguna manera minimizamos esto.

Al mismo tiempo, segundo, reconocemos humildemente la eficacia de la gracia de la muerte de Cristo lo que asegura la salvación de los escogidos. Y aquí es donde yo creo que toda esta imagen nos lleva a cada uno aquó en este lugar, sobre nuestras rodillas porque no hay contribución de parte del hombre para hacer posible la salvación. Es todo por gracia y es todo por Su gloria e incluso nuestra habilidad para creer es comprada por sangre de Cristo y es incalculable, inexplicable, pero la realidad es, yo no he contribuído en nada para mi salvación, Él me ha salvado. Él me ha comprado. Yo he sido salvado. No es activo, es pasivo, Él ha hecho una obra de gracia en mi corazón y no hay otra manera para explicarlo, sino por la gracia de Dios. Esto es humillante. Y debería ser humillante. Al mismo tiempo, ¿Qué significa esto para el Evangelismo en misión?

Como nos afecta la cruz: el evangelismo

Proclamamos intrépidamente la cruz de Cristo a las naciones. Proclamamos intrépidamente la cruz de Cristo a las naciones. Nosotros vamos a todas las pesronas con un mensaje claro. Nuestro mensaje es que Dios te ama y desea tu salvación. Algunos que defienden la expiación definitiva, bueno, ustedes no pueden decir que Dios te ama y que Dios desea tu salvación. ¿Estas queriendo decir eso? Absolutamente, las Escrituras nos dicen que tenemos que decir que Dios te ama y dese tu salvación. Esta es Su voluntad revelada, voluntad declarada. Él quiere que las personas lleguen al arrepentimiento.

¿Ama Dios a todas las personas? Sí. ¿Quiere Dios que todas las personas lleguen a la salvación? Sí, absolutamente. Así que nosotros osadamente, predicamos este claro mensaje. Al mismo tiempo, vamos a todas las personas con una garantía segura. Y la garantía es, cuando prediquemos el Evangelio, damas y caballeros, las personas creerán y serán salvas. No es una posibilidad. En Apocalipsis 7, hay un día cuando toda nación, tribu, persona y lengua estarán representadas alrededor del trono de Dios cantando Sus alabanzas.

¿Sáben ustedes que significa esto? Significa que ustedes pueden ir a lo más profundo, oscuro, al grupo de personas no alcanzadas más atrincheradas en el mundo, en este planeta, ustedes pueden predicar el Evangelio y pueden descansar tranquilos de que alguien saldrá. Alguien estará alrededor de ese trono en aquel día. Cristo ha asegurado que toda tribu y toda persona y lengua se reunirán alrededor cantando Sus alabanzas. Esto es una gran confianza. Así que, prediquemos el Evangelio osadamente en nuestros lugares de trabajo, en nuestros hogares, en nuestros vecindarios, y tengamos la confianza de que este Evangelio tiene poder para salvar. No tal vez, sino que salvará a personas de sus pecados.

Así que aquí vamos. Resuelto. Siguiente. Muy bien, ustedes tienen más preguntas que respuestas, eso es bueno, yo también, lo último aquí es donde concluiremos. Los efectos de la cruz, Gálatas 6:14, “En cuanto a mí, jamás se me ocurra jactarme de otra cosa sino de la cruz de nuestro Señor Jesucristo, por quien el mundo ha sido crucificado para mí, y yo para el mundo.” Yo espero, realmente espero que este versículo tenga más sentido para ustedes ahora, que lo que era a las 6 de esta tarde. Es una rara afirmación, me jacto en la cruz. En el siglo primero, me jacto en un instrumento de tortura. Es como pensarlo hoy día y decir, me jacto en la silla eléctrica.

Qué hay acerca de la cruz que nos hace a nosotros decir, me glorío en esto. Me jacto y estoy obsesionado y estoy apasionado sobre esto en mi vida, me consume esto, la cruz de nuestro Señor Jesucristo. ¿Por qué, por qué nos jactamos en la cruz? Siete razones. Uno, porque la cruz nos confronta con lo que una vez fuimos. La cruz nos confronta con lo que una vez fuimos. Vieron Efesios 2 que se menciona allí. “En otro tiempo ustedes estaban muertos en sus transgresiones y pecados, en los cuales andaban conforme a los poderes de este mundo… éramos por naturaleza objeto de la ira de Dios.”

La cruz nos recuerda cuán horrible es el pecado. Necesitamos ver esto. La cruz nos da una imagen de horror inexpresado en el pecado. Y como resultado, allí es donde la cruz nos proteje. Hermanos y hermanas la cruz nos proteje de caer en el auto engaño del optimismo al que se aferra nuestra cultura hoy. Es por esto que la cruz no funciona en muchos escenarios en nuestra cultura de hoy que hablan de, autosuperación, y la cruz dice, imposible. No hay auto exaltación en la cruz.

La cruz nos recuerda y aquí está el asunto. Esta es la razón, es por esto que nosotros no podemos aceptar la cruz y luego avanzar en nuestras vidas cristianas hacia otras cosas. Es por esto que la cruz, CJ Mahaney dijo que la cruz no es una categoría en la vida cristiana, es el fundamento en la que las otras categorías están contenidas. Todo es penetrado por la cruz. Por esto es que nosotros no podemos dejarla atrás. Porque cuanto más sepamos, de la verdad de la cruz, más odiaremos al pecado.

Cuanto más nos veamos a nosotros mismos retrocediendo al pecado, del que hemos sido salvados y que fue lo que puso a Cristo en la cruz, no, yo no quiero eso. La clave para nuestro crecimiento en santidad es un firme conocimiento de la cruz. Y nosotros necesitamos esto. Nos hemos vuelto tan insensibles al pecado en nuestra cultura. Nos sentamos frente a la TV y vemos películas que utilizan el nombre de Dios en vano y ni siquiera lo reconocemos. Miramos imágenes, hombres en el internet mirando imágenes, seguidores de Cristo mirando cosas y pensando, bueno, otros hombres hacen esto. Diciendo cosas, teniendo pensamientos. Corneales Planning escribió un gran libro, llamado, Not the Way It’s Supposed to Be.

Él dijo, “La conciencia de pecado, una profunda conciencia de desobediencia y confesión dolorosa de pecado suele ser nuestra sombra. Los cristianos odian el pecado. Ellos le temen. Huyen de él. Se acongojan por él. Algunos de nuestros ancestros agonizaron por sus pecados.

Un hombre que perdía su temperamento podría preguntarse si podría continuar yendo a la Santa Comunión. Una mujer, que por años, envidió a su hermana por ser más atractiva e inteligente, podría preguntarse si este pecado amenazaría su salvación. Esa sombra se ha nublado. Hoy en día, la acusación, tú has pecado es muchas veces dicha con ironía y con un tono de broma. Hubo una época en que esta acusación tenía el poder de conmocionar a una persona”.

Necesitamos mirar la cruz y recordar cuán infinitamente horrible es el pecado. Necesitamos ver esto cada día. Y, la cruz nos recuerda cuán humillante es la gracia porque nos damos cuenta lo que un puritano dijo, aún nuestras lágrimas de arrepentimiento necesitan ser lavadas en la sangre de Jesús. No hay nada que nosotros traigamos a la mesa.

Necesitamos esta gracia en todo momento. La cruz nos recuerda lo que una vez fuimos. Me encanta 1 Pedro 1:17-21, por favor presten atención a estas palabras. “Ya que invocan como Padre al que juzga con imparcialidad las obras de cada uno, vivan con temor reverente mientras sean peregrinos en este mundo. Como bien saben, ustedes fueron rescatados de la vida absurda que heredaron de sus antepasados. El precio de su rescate no se pagó con cosas perecederas, como el oro o la plata, sino con la preciosa sangre de Cristo, como de un cordero sin mancha y sin defecto.” ¿Escucharon bien? Vivan sus vidas como peregrinos en temor reverente porque ustedes saben con qué fueron comprados. Dios, ayúdanos a vivir cada día en temor. Vivir en temor cada día mostrando que esta cruz es preciosa para usted mi hermano y hermana.

La cruz nos recuerda lo que una vez fuimos. Segundo, la cruz, ¿Por qué nos jactamos en la cruz? Porque la cruz nos conforta con lo que somos ahora. Si hiciéramos una encuesta de las cuatro imágenes que vimos, las cuatro escenas. La última cena, el Huerto de Getsemaní, el clamor por abandono y la declaración de triunfo, nosotros vemos estas verdades. La cruz nos conforta con lo que somos ahora. Estamos vivos para Dios.

Damas y caballeros, Él ha matado la muerte, estábamos muertos, ahora vivimos. Vivimos. Vivimos. No estamos muertos al pecado. Y no estamos muertos en pecados, estamos muertos al pecado. No somos esclavos de nosotros mismos. Vivimos. No solamente estamos vivos ante Dios, sino que tenemos un abogado delante de Dios, Su trabajo no está terminado. Tenemos un sumo sacerdote que está a la diestra de Dios en este mismo momento intercediendo de nuestra parte. El entró en la presencia de Dios, Su sacrificio es completo. Él se sentó a la diestra del trono de Dios y está intercediendo por nosotros.

Él soportó nuestra condenación de la que estábamos amedrentados, ahora somos amigos. Somos amigos. Amigos de Dios. Usted y yo pecadores merecedores del infierno, amigos de Dios. Tenemos un abogado ante Dios. Tenemos acceso a Dios. Acerquémonos a Dios. Él sufrió nuestra separación. Nosotros que fuimos expulsados, ahora damas y caballeros, somos invitados a entrar. Piense en ello, pecadores merecedores del infierno, seguros en la presencia de Dios. No simplemente seguros en Su presencia sino bienvenidos a Su presencia, invitados a Su presencia, queridos en la presencia de Dios. Fuimos adoptados por Dios. Redimidos, el pagó nuestra deuda. Damas y caballeros, éramos, éramos esclavos, ahora somos hijos.

Hijos, “El Espíritu mismo le asegura a nuestro espíritu que somos hijos de Dios. Y si somos hijos, somos herederos; herederos de Dios y coherederos con Cristo, pues si ahora sufrimos con él, también tendremos parte con él en su gloria” como hijos de Dios, adoptados en la familia de Dios. No nos emparentamos con Dios, no se pierda esto. Al caminar en Cristiandad, no nos relacionamos con Dios como uno que está listo para condenarnos en nuestro pecado a cada momento. Al caminar en relación con Dios como padre e hijo. Los hijos y las hijas de Dios. Cristo ha tomado nuestra condenación. Él ha pagado nuestra deuda y somos hijos. No llevamos, ya más, el peso de nuestro pecado. Ustedes no llevan el peso de sus pecados, cristianos, nunca más. Eres un hijo, una hija de Dios. Y esta es una buena razón para jactarse en la cruz. Tercero porque la cruz nos enseña lo que significa ser salvo. ¿A que me refiero con eso?

Como nos afecta la cruz: justificación

Bueno, la cruz hace más clara nuestra justificación. Gálatas 2:15- 20 habla acerca de cómo creemos en Cristo y llegamos al final allí “He sido crucificado con Cristo, y ya no vivo yo sino que

Cristo vive en mí. Lo que ahora vivo en el cuerpo, lo vivo por la fe en el Hijo de Dios, quien me amó y dio su vida por mí.” No somos justificados por observar la ley, él dice en cada comienzo allí, esto es por la fe en Jesucristo. Esto es de lo que trata la justificación. Cristo murió por nosotros. No hay base para la justificación en nosotros.

Cristo murió por nosotros. Al que no cometió pecado alguno, por nosotros Dios lo trató como pecador, para que en él recibiéramos la justicia de Dios. Escuche esto. El Catecismo de Heidelberg, pregunta número 60 dice lo siguiente. “¿Cómo eres justo ante Dios? Por la sola verdadera fe en Jesucristo, de tal suerte que, aunque mi conciencia me acuse de haber pecado gravemente contra todos los mandamientos de Dios, no habiendo guardado jamás ninguno de ellos, y estando siempre inclinado a todo mal, sin merecimiento alguno mío, sólo por su gracia, Dios me imputa y da la perfecta satisfacción, justicia y santidad de Cristo como si no hubiera yo tenido, ni cometido algún pecado, antes bien como si yo mismo hubiera cumplido aquella obediencia que Cristo cumplió por mí, con tal que yo abrace estas gracias y beneficios con verdadera fe.” Wow.

Como si no hubiese cometido nunca un solo pecado. Hablamos acerca de esto en Gálatas hace un par de meses atrás. Años atrás un Inglés acaudalado compró un Roll Royce. El llevó este nuevo auto a Francia. Había sido promocionado como el auto entre los autos. No podía haber problemas con él. Cuando el hombre llevó su auto a Francia, se rompió. Así que llamó a la gente de Roll Royce en Inglaterra y ellos mandaron a un mecánico en avión hasta Francia para arreglar el auto. Por supuesto el hombre esperaba recibir una gran factura de Roll Royce por enviar a alguien de lejos a arreglar su auto en un país totalmente distinto. Meses pasaron y nadie escuchó de ellos.

Así que finalmente les escribió diciendo, Yo puedo pagar la factura, simplemente mándemela. Y la compañía Roll Royce le envió una carta de regreso diciendo, Lo siento señor, pero no hay registro absoluto de nada que haya ido mal con su vehículo. El Dios del universo no tiene registro de nada que hayamos hecho mal en nuestra vida. Él le mira y ve la justicia de Jesucristo y no es que Él simplemente la barrió debajo del felpudo y pretende que no está ahí. Este es el punto de la cruz, Él lo ha llevado todo. Él lo llevó todo. Eso es la justificación. Y como resultado, no pierda esto. No estamos trabajando para justicia, estamos trabajando desde la justicia. Eso es bueno.

Esto cambia todo. ¿Cómo? Ferguson dice “Cuan fácilmente caemos en la trampa de asumir que quedamos justificados solamente en tanto hay terreno en nuestro carácter para la justificación” No trabaje para ser justo ante Dios, Crea, por fe en Cristo, usted es justo delante de Dios. La cruz hace posible nuestra santificación. Cristo vive ahora en nosotros. Estamos en Cristo. Cristo está en nosotros. Es toda la figura y la promesa del Espíritu Santo y Dios obrando nuestra salvación, Filipenses 2. Y esta es la belleza de ello. No estamos, preste atención, No estamos en deuda con Cristo. No caminamos por ahí fuera, esta noche, mirando la cruz de Cristo diciendo, le debo a Cristo tanto.

Porque la realidad es, esto no es verdad. No es verdad porque si nosotros le debiésemos algo entonces comenzamos a buscar verdaderamente rápido en nuestra vida como Cristianos para pagarle de regreso y diríamos incluso cosas como que como Cristo hizo esto por usted, que lo menos que podría usted hacer por él es esto, esto y esto. Pero tan pronto como comenzamos un momento a tratar de pagarle de regreso a Cristo, menoscabamos todo el punto de la gracia. Es la gracia porque no puede ser pagado de regreso.

No estamos en deuda con Cristo, estamos habitando con Cristo. Y esta es la realidad. Cuando hablamos acerca de la cruz, con frecuencia hablamos acerca de lo que Cristo hizo por nosotros. La realidad es, cualquier cosa buena que haga ahora está aún basada en Cristo. Cualquier bien que haga en el futuro está aún basado en Cristo. Todo mi ser esta basado en Su presencia que habita en mí. Es de lo que trata Colosenses 1, Cristo en ustedes, la esperanza de gloria. La cruz hace clara nuestra justificación, hace posible nuestra santificación, la cruz hace segura nuestra glorificación. Porque a los que

predestinó, también los llamó; a los que llamó, también los justificó; y a los que justificó, también los glorificó.

Cristo está regresando por nosotros y no estamos viviendo para este mundo. Estamos viviendo para el mundo que viene. El se sacrificó una vez para quitar los pecados de muchas personas, y Él aparecerá la segunda vez, no para llevar el pecado, sino para traer salvación a los que están esperando por Él. Cuatro razones por las que nos jactamos en la cruz, porque la cruz nos muestra lo que significa amar. Es así como conocemos lo que es el amor.

Jesucristo entregó su vida por nosotros. Así también nosotros debemos entregar la vida por nuestros hermanos. De este modo todos sabrán que son mis discípulos, si se aman los unos a los otros. Lo que significa amor en la iglesia. Hablamos acerca de esto en la última cena, la Cena del Señor, nos unimos alrededor de la cruz. La conversión de Cristo significa conversión a la comunidad. Somos un cuerpo. Nos pertenecemos, entre los perdidos proclamamos la cruz.

Ustedes no pueden abrazar esta verdad y no proclamarla. Si no proclamamos esta verdad, es porque no nos damos cuenta de las maravillas de la verdad. Y hacia el pobre, encarnamos la cruz, Cristo, aunque estaba bien, se volvió pobre por nuestra causa. Hermanos y hermanas, verdaderamente rápido, nuestra indulgencia en cuanto a las cosas de este mundo no suma a la cruz de Cristo Jesús. Y no muestra la cruz de Jesucristo a un mundo en donde 30000 niños hoy han muerto de hambre o por enfermedades prevenibles. No suma. Nosotros encarnamos la cruz para con el pobre.

Quinto, porque la cruz nos recuerda, nos jactamos en ella porque la cruz nos recuerda que nuestra seguridad no está en el mundo. Que gran palabra de nuestro hermano, que vimos antes, el lugar más seguro para estar es justo en donde Dios quiere que usted esté, aún en el lugar más oscuro y difícil en el mundo. La Cruz no se trata de jugar en lo seguro. No temamos sufrir. No temamos sufrir. No teman a los que matan el cuerpo pero no pueden matar el alma. Teman más bien al que puede destruir alma y cuerpo en el infierno.

Como nos afecta la cruz: hacer discípulos

Jesús les está diciendo a Sus discípulos allí, cuando ustedes salgan serán perseguidos. Serán odiados, esto es lo que Él esta diciendo en Mateo 10. Será difícil pero, aquí hay buenas noticias, lo peor que pueden hacerles es matarles. Buenas noticias. Muy bien, vamos. Pero esto es lo que les está diciendo, esta es la gloria de esta figura, lo peor que puede acontecerles es que mueran y esto es ganancia. Por causa de la cruz, asi que no tengan miedo de nada. No tengan temor de lo que los hombres puedan hacerles porque preferiría, quiero decir, quien quiere ser baleado o asesinado, esta experimentando el fruto de su salvación y nuestra salvación y lo hará por toda la eternidad, esa es la imagen. No necesitamos estar atemorizados de nada. Somos libres para sufrir.

Libre para sufrir. Porque a ustedes se les ha concedido sufrir por él. Filipenses 1. Venga a Cristo y obtenga un regalo, Sufrimiento. La estrategia de Dios para hacer Su gloria y Su amor conocido al mundo se centra alrededor de un siervo sufrido y al auto-sacrificio de Su unigénito Hijo. ¿Cómo debemos pensar que la estrategia de Dios para hacer Su amor en el mundo ahora es por medio de vidas fáciles? ¿Cómo mostraremos al Cristo de la cruz si todo va bien para nosotros? ¿Y todo es fácil para nosotros? Es en el sufrimiento que Cristo se muestra más claramente a Su pueblo.

Somos libres para sufrir. Seis, porque la cruz nos guarda de desperdiciar nuestras vidas en este mundo. La cruz nos guarda en cuanto a desperdiciar nuestras vidas en este mundo. Filipenses 3. Todo aquello que para mí era ganancia, ahora lo considero pérdida por causa de la cruz de Cristo. Todo en este mundo es basura comparado con una cosa, la incomparable vastedad de conocer a Cristo. Pablo lo está diciendo muy claro aquí, este mundo nada tiene para nosotros. Pablo esta muerto al mundo. Muerto al mundo. Este mundo no es la fuente de la vida y la satisfacción y el gozo. Y no es nuestro tampoco. Todo esto junto, aún las mejores cosas, juntas, combinadas, son estiércol comparado con una cosa, conocer a Cristo. El mundo no tiene nada para nosotros, porque Cristo tiene todo. Todo para nosotros. Dios, nos ayude a mostrar que nuestras vidas están totalmente rendidas a Cristo y no a la búsqueda de dinero y casas más grandes y autos más lindos y mejores empleos y mejores salarios y relaciones familiares más confortables. Dios, ayúdanos a mostrar que este mundo no tiene nada para nosotros, Si Cristo es todo en nosotros.

Usted dice, bueno, ¿Todo en el mundo es malo? Lo es, jáctese solamente en la cruz. ¿Significa eso que usted no puede jactarse cuando su propio hijo comienza a caminar? Su hijo de dos o tres años hace esto o aquello, o su esposa hace esto o aquello, ¿está mal jactarse en ello? Si, pero aquí esta el asunto, nos damos cuenta de que cada cosa buena que experimentamos en este mundo es solamente por Cristo la trajo a nosotros en la cruz. Y ahora, miramos a nuestros hijos e hijas y esposas y esposos, y mamás y papás y éxitos, todo está arraigado en el hecho de que Cristo lo trajo en la cruz porque nosotros no merecíamos nada.

Como nos afecta la cruz: el mundo que vendrá

Finalmente, la cruz nos capta con una visión del mundo que vendrá. La cruz nos capta con una visión del mundo que vendrá. Vaya conmigo a Apocalipsis 5. Y con esto terminamos. Apocalipsis 5. Una figura increíble. Apocalipsis 5. Usted tiene algunos de los versículos escritos aquí. La cruz nos capta con una visión del mundo que vendrá. Este es el asunto. Tenemos una figura de Jesús en Apocalipsis 5. Jesús, usted lo tiene en sus notas, Jesús ha identificado el problema final. 5:1 “En la mano derecha del que estaba sentado en el trono vi un rollo escrito por ambos lados y sellado con siete sellos.” La figura aquí es un rollo y vemos que es mencionado en distintas partes de Apocalipsis.”

Esta es una figura de un rollo que descubre la plenitud de la historia redentora. Y el final del pecado, y el sufrimiento para la imagen de una nueva creación que se desarrolla en Apocalipsis 21 y 22. La imagen es un rollo y la mano derecha del que está sentado en el trono. “También vi a un ángel poderoso que proclamaba a gran voz “¿Quién es digno de romper los sellos y de abrir el rollo?” Quién es digno de entrar en la misma presencia de Dios toma el rollo de cómo la historia de la humanidad habrá de desarrollarse. El final del pecado y la plena redención desarrollado. ¿Quién es digno de eso? Y Juan dice “Pero ni en el cielo, ni en la tierra, ni debajo de la tierra, hubo nadie capaz de abrirlo ni de examinar su contenido. Y Lloraba yo mucho porque no se había encontrado a nadie que fuera digno de abrir el rollo ni de examinar su contenido.”

¿Por qué estaba llorando? Póngase en el contexto del primer siglo, los creyentes que leen este libro, casi probablemente estén enfrentando persecución. ¿No hay nadie que pueda terminar esto? ¿No hay nadie que pueda acabar con el sufrimiento y el pecado y el cáncer, la enfermedad y la persecución? Y Juan lloraba porque ninguno fue hallado.

Este es el problema final del universo, hemos hablado de él anoche. ¿Quién? ¿Quién puede manejar el problema del pecado o encargarse de él? Y nosotros estamos frente a un Dios santo en esta situación desesperada y desprotegida. Desesperada y desprotegida. Es como cuando usted va a Chuck E. Cheese, ¿Ha ido usted a ese lugar? Usted tendrá un dolor de cabeza casi instantáneamente.

Y de niño usted iba a Chuck E. Cheese, ¿no es cierto? Y usted obtiene esas fichas, va y juega en los juegos. Juega a tiro al plato por una hora. Y luego, juega a otros juegos. Y al jugar ¿Qué sale de ahí? Pequeños boletos salen. Y estos boletos se dan vuelta, usted los trata de juntar a todos. Y luego usted se da cuenta, mientras esta saliendo para irse, para qué son todos los tickets, porque cuando usted sale, hay un lugar llamado contador de redención que esta por allí.

Y ustedes saben cómo es que funciona todo esto. Usted va al contador de redención, y usted es un pequeñito, su mamá o papá están con usted y usted tiene sus boletos en su mano. Usted mira hacia arriba, arriba al estante cerca del techo. Y está esa especie de animal disecado, un gran oso, como 80.000 boletos, y usted mira a su mamá y papá y no tiene nada mejor que decir que “Quiero el oso” Y sus padres le dicen “Uh, hijo, No creo que tengas suficientes tickets para el oso”

Así que usted baja un poco sus ojos y ve una lámpara de lava. Me temo, no hay cosa más inservible en el mundo que una lámpara de lava, y bien, quiero la lámpara de lava. Lo siento son 60.000 tickets y no los tienes. Usted baja, baja más hasta que encuentra un cartelito diminuto por allí y cerca usted ve una goma. Y si usted junta con los de sus otros amigos, también puede llevar el lápiz. Y dice, muy bien, me lo llevo. Es uno de los momentos más deprimentes que tiene un niño. Pasa horas jugando al tiro al plato y se lleva una goma para mostrar, al salir ve el oso encima del estante.

Retenga esa figura en mente. Cuando usted viene a Apocalipsis 5, la realidad es que la vara está mucho más alta, en el estante del techo, la redención del hombre. El final del pecado, la plena redención, conducida a la historia de la humanidad. Y se pasa lista en los cielos, ¿Quién puede abrir el rollo? ¿Quién tiene suficientes boletos? Y usted imagina pasar lista, Abraham, tú eres el padre del pueblo de Dios en el Antiguo Testamento, Abraham mira, no tiene suficiente. Moisés, Pacto Mosaico, seguramente si, Moisés baja la mirada y no tiene suficiente. Profeta tras profeta no tienen suficiente. Mateo, Marcos, Lucas, Juan, Pablo, tu escribiste la mayor parte del Nuevo Testamento, ¿Tienes suficientes boletos? Pablo mira, no tiene suficientes boletos. Sigue bajando por la lista, Billy Graham, tu predicaste a más gente que cualquier otro en la historia del mundo, seguramente tienes, Billy Graham no tiene nada.

Y el llanto de Juan ¿Quién va a ir? ¿Quién va a ir? ¿Mahoma va? ¿El Buda? Absolutamente no. Oprah, no. Entonces tú y yo. Miramos y nada. Y nuestra conclusión es que no tenemos suficientes boletos y la figura es de un incontrolable dolor. Yo lloro y lloro, porque nadie es digno, entonces encuentran ustedes en su etiqueta de precio, Jesús pagó el precio total. Entonces uno de los ancianos me dijo “Deja de llorar que ya el León de la tribu de Judá, la Raíz de David, ha vencido! El sí puede abrir el rollo y sus siete sellos.”

Es un león conquistador. El León de la Tribu de Judá, la Raíz de David. Vaya a Génesis 49, no solo es un León conquistador, sino “Entonces vi, en medio de los cuatro seres vivientes y del trono y los ancianos, a un Cordero que estaba de pie y parecía haber sido sacrificado.” Que figura, el cordero sufrido, ¿Lo captó? Un cordero inmolado, un cordero que mira como siendo despedazado, pero de pie en el centro del trono. Que conmoción. El Cordero León, el león como cordero. Y encontramos que Jesús puede cumplir el propósito final de Apocalipsis 5:7 “Se acercó y recibió el rollo de la mano derecha del que estaba sentado en el trono.” Estamos parados allí con nuestros pequeños boletos en nuestras manos y no podemos hacerlo.

Vemos, queremos, anhelamos plena redención y no tenemos nada para traer a la mesa y de pronto uno da un paso y dice, tengo suficientes boletos. Él tiene los boletos necesarios y dice “yo pago por todo”. Él paga por todo, por todo. Y abre la historia de la redención. Ahí es hacia donde se dirige toda la eternidad. Y lo que acontece es que, hay una canción de alabanza, Jesús merece la alabanza final. Ellos cantan una nueva canción, en el versículo 9, “Digno eres de recibir el rollo escrito y de romper sus sellos porque fuiste sacrificado y con tu sangre compraste para Dios gente de toda raza, lengua, pueblo y nación” Nuestra canción, damas y caballeros será nueva y nuestra canción nunca terminará. Nunca terminará de cada tribu, lengua, pueblo e idioma toda la iglesia redimida de Dios cantará sus alabanzas por siempre.

Esto nos conduce al final de las Escrituras, Apocalipsis 22:1-5, y usted puede leerlo mas tarde, pero básicamente por el sustituto satisfactorio en la cruz, aquí está la realidad. Los que una vez estaban muertos en pecado, un día vivirán para Dios. Los que una vez estaban bajo la ira de Dios experimentarán su bendición. Los que una vez estaban separados de Dios ahora ven Su rostro. Y los que una vez estaban cautivos al pecado y la muerte, reinan con Dios en vida por siempre. ¡Aleluya! ¡Qué Salvador!

LESS THAN 1% OF ALL MONEY GIVEN TO MISSIONS GOES TO UNREACHED PEOPLE AND PLACES.

That means that the people with the most urgent spiritual and physical needs on the planet are receiving the least amount of support. Together we can change that!