Parece que todos tienen una “clave” para la vida cristiana: alguna lista de cosas que hacer, alguna técnica o alguna práctica espiritual que mejorará tu vida. Pero ¿y si tu identidad como seguidor de Cristo no depende en última instancia de lo que puedes hacer? ¿Y si vivir la vida cristiana no se trata simplemente de mejorar tu vida? En este mensaje de Colosenses 1:24–29, David Platt explica la buena noticia de que Cristo mismo habita en Su pueblo. Si eres cristiano, tu transformación en la semejanza de Cristo, tu esperanza eterna y todo lo demás están asegurados a través de esta gloriosa realidad: Cristo en ti.
Bien, si ustedes tienen sus Biblias, y espero que así sea, déjenme invitarles a abrirlas conmigo en el libro de Colosenses. Quiero invitarles a abrirlas conmigo en Colosenses capítulo uno.
Cristo en ustedes
Vamos a ver Colosenses 1:24-29 y realmente vamos a acampar en un versículo, Colosenses 1:27. Realmente vamos a acampar en siete palabras. Siete sencillas palabras poderosamente transformadoras de vida, que estoy convencido que si logramos poner nuestros brazos, corazones y mentes alrededor de estas siete palabras, esto revolucionaría absolutamente nuestra cristiandad. Esto revolucionaría Absolutamente nuestras vidas. Así que quiero que acampemos sobre esas siete palabras y consideremos lo que significan, por lo que significa vivir la vida de Cristo, lo que significa ser un seguidor de Cristo. Colosenses capítulo 1: 24, Pablo está escribiendo a la iglesia de Colosas y dice 24 Ahora me alegro en medio de mis sufrimientos por ustedes, y voy completando en mí mismo lo que falta de las aflicciones de Cristo, en favor de su cuerpo, que es la iglesia.25 De ésta llegué a ser servidor según el plan que Dios me encomendó para ustedes: el dar cumplimiento a la palabra de Dios,26 anunciando el *misterio que se ha mantenido oculto por siglos y generaciones, pero que ahora se ha manifestado a sus *santos.27 A éstos Dios se propuso dar a conocer cuál es la gloriosa riqueza de este misterio entre las *naciones, que es Cristo en ustedes, la esperanza de gloria. 28 A este Cristo proclamamos, aconsejando y enseñando con toda sabiduría a todos los *seres humanos, para presentarlos a todos *perfectos en él.29 Con este fin trabajo y lucho fortalecido por el poder de Cristo que obra en mí. Colosenses 1: 27, siete palabras de este verso “Cristo en ustedes la esperanza de gloria”. Lo que quiero que hagamos es, que dejemos estas siete palabras desempaquen la vida del cristiano. Estoy convencido de que si podemos captar esta verdad, este cuadro “Cristo en ustedes, la Esperanza de gloria” cambiaría la manera que examinamos nuestra vida cristiana. Estoy convencido de que las verdades más básicas y fundamentales del cristianismo están contenidas en estas palabras y aun ellas son verdades que la mayoría de los cristianos todavía tienen que permitir que penetren a sus mentes y corazones. Así que déjenme ir palabra por palabra, Cristo en ustedes, la esperanza de gloria.
Comenzaremos con Cristo. La vida cristiana es la vida empoderada. Comienza con Cristo. Hemos entendido que el Libro de Colosenses fue escrito por Pablo para esta iglesia debido a que estaban enfrentando algunas falsas enseñanzas en la iglesia, que estaban socavando los mismos fundamentos de su fe, especialmente socavando la persona de Cristo. Y así vemos que lo que está sucediendo alrededor de Colosenses capítulo 1, realmente en todo el libro, pero especialmente en el capítulo uno, es él dándonos un retrato de la supremacía de Cristo. Él está pintando uno de los retratos más bellos que tenemos de Cristo en cualquier parte de la escritura. Y quiero que regresen conmigo al verso 15 y quiero simplemente que vean el retrato de Cristo aquí. El Verso quince dice: Él es la imagen del Dios invisible, el primogénito de toda creación. Lo tienen en sus notas. Él es la imagen de Dios. Primogénito es una palabra que básicamente significa supremo. No significa que fue creado, y eso es lo que vemos en el siguiente versículo, él no fue creado, sino que es supremo sobre toda la creación. Él es el primogénito sobre toda creación, la imagen de Dios. Es Dios revelado en carne. Vea el capítulo 2 verso 9: Toda la plenitud de la divinidad habita en forma corporal en Cristo. . Es Dios revelado en carne. Él es la imagen de Dios. Entonces tenemos en el capítulo 1: 16 y 17 porque por medio de él fueron creadas todas las cosas en el cielo y en la tierra, visibles e invisibles, sean tronos, poderes, principados o autoridades: todo ha sido creado por medio de él y para él. 17 Él es anterior a todas las cosas, que por medio de él forman un todo coherente. Él es el autor de la creación, ustedes fueron creados por Cristo. No solamente él ha sido el creador, sino que es siempre el creador. Él está sosteniendo su creación. Todas las cosas están unidas por causa de él. Si él retirara su mano de la creación todo cesaría. La única razón de que permanezca la grama fuera de este auditorio es porque Cristo la sostiene.
Él sostiene
La única razón por la que cualquiera de nosotros está respirando es porque Él sostiene nuestra respiración justo ahora. El sostiene todo, Él mantiene todo unido. Él es el autor de la creación desde el principio hasta el final. Somos creados por Cristo. Él es la imagen de Dios, el autor de la Creación. La cabeza de la iglesia y Él es el Salvador del mundo. Vean los versos 19 y 20 Porque a Dios le agradó habitar en él con toda su plenitud 20 y, por medio de él, reconciliar consigo todas las cosas, tanto las que están en la tierra como las que están en el cielo, haciendo la paz mediante la sangre que derramó en la cruz. Cristo no solo creó todas las cosas, pero la única forma en que todas las cosas que alguna vez fueron creadas pueden ser reconciliadas con Dios es atravez de Cristo, por medio de su sangre derramada en la cruz. El es el Salvador del mundo, de toda la creación. Este es el cuadro de Cristo en Colosenses capitulo 1. Y ese Cristo está en algún lugar cerca de su vida, entonces todo cambia completamente.
La belleza de Colosenses 1: 27, sin embargo, es el hecho de que este Cristo no solo está cerca de nuestras vidas, este Cristo está en ustedes. Piense en eso. La imagen del Dios invisible, el autor de toda la creación, la cabeza de la iglesia, y el Salvador del mundo, Él habita en ustedes, cristianos. El vive en ustedes, reside en ustedes. Este Cristo reside en ustedes. Dios nos libre de un pequeño concepto del que vive en nosotros. La vida cristiana es una vida empoderada. No deje que simplemente pase por usted. Justo ahí donde está usted sentado, éste Cristo, si usted ha confiado en Él para ser salvo de sus pecados, Él está habitando dentro de usted. El ha hecho de su vida, su hogar. Esta es una verdad colosal. La vida cristiana es la vida empoderada. ¿Cómo nos afecta eso? ¿Qué significa para Él vivir en nosotros? La vida cristiana es la vida empoderada y segundo es la vida transformada. Es Cristo en ustedes.
Ahora, este cuadro que nos da Pablo en los versos 26 y 27, él está hablando acerca de un misterio, que había sido escondido, que había sido guardado. Y básicamente es un cuadro, no de algo que Dios estuvo tratando de ocultar y que finalmente el secreto sale a la luz, sino que es algo que Dios estaba esperando para revelar a través de la historia de redención hasta ese punto. Hay un cuadro que los santos del Antiguo Testamento tenían de Dios que es completamente distinto cuando usted tiene colosenses capítulo 1 verso 27. Esta es una verdad asombrosa en las páginas de la Escritura, que nos da un cuadro totalmente diferente del que habíamos visto hasta este punto. Este misterio que está siendo revelado y el misterio es Cristo en ustedes. Piense acerca de esto junto conmigo.
Usted va de viaje por el Antiguo Testamento y observa la relación de Dios con su pueblo. Una y otra vez, la verdad que resuena es que Dios está mostrando su misericordia y su amor y su gracia a su pueblo. La verdad que resuena una y otra vez es Dios está con ustedes. Génesis 12, capitulo 15, Estoy contigo Abraham. Génesis 26, estoy contigo Isaac; Génesis 28, Estoy contigo, Jacob; Génesis 39, en cuatro momentos distintos dice que El Señor estaba con José. Cuando usted llega a Éxodo ¿Cómo puedo ir a Faraón y hablarle? Dios dice: ‘estare contigo, Moisés’, él pasa el metal del liderazgo a Josué. Tal como estuve con Moises, así estare contigo. Nunca te dejaré ni te desampararé. Dos veces en Josué capítulo uno, versos 1 al 9, yo estoy contigo, no lo olvides. Estoy contigo. Él le dijo a Gedeón. Tú vas a pelear contra los madianitas. Yo estoy contigo. No olvides eso. David, yo estoy contigo. Salomón, tal como estuve con David, yo estoy contigo, no temas ¿Por qué? Porque estoy contigo, esta es la verdad que atraviesa el Antiguo Testamento. Dios CON Su pueblo. Dios habitando con su pueblo. Dios haciendo tabernáculo con su pueblo en el templo. Su gloria descansó con ellos en el Templo. Ellos tenían un cuadro de Dios con ellos. Cuando usted llega al Nuevo Testamento Jesús entra en escena y la Palabra dice “llamarás su nombre Emmanuel”
Dios con nosotros
¿Qué significa eso? Dios con nosotros. Este es un cuadro de quién es Cristo. Pero entonces vamos a Juan 13: 33 y Él dice “poco tiempo me queda para estar con ustedes”. Se levantan banderas rojas. Dios con nosotros no va a dejar. Así que llegamos a Colosenses 1 y con ese cuadro del Antiguo Testamento mostrándonos una y otra vez que Dios esta con ustedes, llegamos a este cuadro que es el misterio que ha sido escondido por las edades y generaciones, pero ahora es develado a los santos. Capte esto: a Ustedes, ahora es develado a ustedes. A ellos Dios los había escogido para darse a conocer, literalmente dice “Dios se complace”, Dios halló gran placer en dar a conocer entre los gentiles las gloriosas riquezas de este misterio. No Dios con ustedes, sino Cristo en ustedes. Esta es, estoy convencido, la más asombrosa verdad en la Biblia. Cristo en ustedes, no apenas en cualquiera. Esto está hablando de los gentiles, los paganos gentiles que no eran parte del pueblo escogido de Dios. Tienen a Cristo, la imagen del Dios invisible, el autor de la creación, la cabeza de la iglesia y el Salvador del mundo. Él va a hacer su residencia en los corazones y vidas de gentiles paganos que se unen a los judíos. Y ellos van a ser el lugar en que él vive. Él vive en ustedes, ese es el cuadro aquí. Estoy convencido de esto. Estoy convencido de esto por la forma en que muchos de nosotros vivimos el cristianismo.
Este cuadro de Cristo en ustedes cambia todo. La mayoría de nosotros, estoy convencido, creemos que Jesús murió por nuestros pecados. El murió para darnos perdón y creemos eso, y es bueno. Y Él murió para perdonarnos. Pero quiero recordarles que Jesús para perdonarlos de sus pecados, sino que murió de forma que pudiera vivir en ustedes. Aquí está la verdad. Jesús murió por usted y así él puede vivir en usted. Jesús murió en una cruz por sus pecados y se levantó de la tumba de forma que pudiera vivir Su vida a través de usted. Ya no es solo nuestro Salvador. Que sorprendente verdad es que Él nos salva de nuestros pecados, pero no es todo. El no es solo nuestro Salvador.
El es nuestra vida
Damas y caballeros, él es nuestra vida. Él está en nosotros, y él es nuestra vida en nosotros. Observe a través de la historia, algunos de mis héroes de la fe de los que he leído, y estudiado y escuchado, todos hablan sobre Cristo en ellos. Ian Thomas dijo esto. Él fue un líder en la congregación cristiana Intervarsity. Estaba trabajando en Londres y en toda clase de suburbios haciendo el ministerio. Él había sido creyente por 7 años y estaba haciendo toda clase de cosas. Y él dijo ‘Yo había sido reducido a un estado de total agotamiento espiritual hasta que sentí que ya no tenía sentido continuar’. Estoy convencido de que muchos de nosotros estamos ahí hoy, haciendo toda clase de cosas bajo un total agotamiento. ‘Entonces una noche en Noviembre, justo a medianoche, me fui de rodillas ante Dios y lloré en total desesperación. Dije ‘Oh Dios, sé que soy salvo, amo a Jesucristo, estoy perfectamente convencido de que soy convertido. Con todo mi corazón, he querido servirte. He intentado hasta el máximo y estoy desesperadamente frustrado.’
Él dijo ‘esa noche sucedieron cosas’ Puedo asegurarles honestamente que nunca había escuchado de los labios de los hombres, el mensaje quien vino a mí entonces. Dios esa noche simplemente enfocó sobre mí el mensaje de la Biblia, de Cristo quien es nuestra vida. Y el Señor parece que se reveló a mí claramente a través de lágrimas de amargura. Ves que por siete años estuviste ciertamente intentando vivir para mí, la vida que por siete años he estado esperando para vivir a través de ti. ¿Nota la diferencia? Él dijo: ‘me levanté la mañana siguiente a una vida completamente diferente’. A George Mueller se le preguntó: ¿Cuál es el secreto detrás de todo lo que has hecho? Él dijo: ‘Hubo un día cuando definitivamente morí. Morí a George Mueller, sus opiniones, sus preferencias, sus gustos y su voluntad. Morí al mundo, a su aprobación o su censura. Moría por la aprobación o la acusación de mis hermanos y amigos. Y desde entonces he estudiado solo para hallarme a mí mismo aprobado ante Dios’.
Hudson Taylor, el misionero a la China, su biografía completa está titulada ‘El Secreto espiritual de Hudson Taylor” y el secreto de su vida y ministerio fue el punto en el que se dio cuenta que su vida entera esta designada para procurar lo que él llamó las insondables riquezas de Cristo, las inagotables riquezas de Cristo. Era Cristo en él. Y él habló de eso en las cartas que escribió. El decía: Esto me libertó, cuando me di cuenta que todo lo que hacía no era de mi voluntad o de acuerdo a mi personalidad, sino que era Cristo en mi. Él estaba viviendo su vida a través de mí. Este es el cuadro. Jesús murió de manera que pueda vivir en usted.
Transformación espiritual
Ahora quiero mostrarles, quiero intentar mostrarles, como creo que hemos pasado esto por alto. Estoy convencido, basado en colosenses 1:27, que la auténtica transformación espiritual ocurre de adentro hacia afuera. Ocurre de adentro hacia afuera. Tome un pedazo de papel en blanco, vamos a dibujar un diagrama. En el centro del papel, dibuje un círculo pequeño, no muy grande porque vamos a dibujar siete círculos más alrededor de este, pero asegúrese de hacer el primer círculo suficientemente grande como para escribir en él. Entonces, en ese pequeño círculo escriba Cristo en usted. Entonces, dibuje un círculo un poquito más grande alrededor del primero. Nuevamente, no muy grande, porque como dije vamos a dibujar siete, y cada uno será un poquito más grande. Así que, usted ha dibujado el primer pequeño círculo en el centro del papel, y otro un poco más grande alrededor del pequeño. Ahora dibuje otro círculo que sea un poco mayor alrededor de los dos círculos, y continúe añadiendo círculos que son progresivamente más grandes hasta que tenga un total de siete. Y quiero que vea que el mismo centro del diagrama es un cuadro de Cristo en usted. Así que hemos escrito Cristo en usted dentro del círculo pequeño.
Y entonces usted tiene círculos concéntricos saliendo de este. En el siguiente círculo (el segundo más pequeño) escriba mente. Entonces, en el tercer círculo escriba emociones. En el cuarto escriba cuerpo, en el quinto escriba voluntad y en el sexto relaciones, y en el séptimo, misión. Ahora que tenemos el diagrama lleno, quiero que pensemos, solo pensemos, cómo afecta Cristo nuestra mente, y cómo afecta Cristo, en el siguiente círculo, nuestras emociones, la forma en que usted siente es obviamente afectada por lo que usted piensa. Lo que pensamos afecta la forma en que sentimos. Su cuerpo, siguiente, es afectado por su mene y sus emociones. Nuestra voluntad, en el siguiente círculo, afectada por eso. Lo que hacemos, lo que escogemos hacer, siempre actuamos basados en lo que creemos. Nuestras vidas siempre corresponden con nuestras creencias. Usted dice que hay un montón de cosas que creo que no están mostrándose en mi vida. Pienso que eso es nuestra de que usted realmente no cree en esas cosas. Siempre vivimos de acuerdo a lo que creemos. Nuestra voluntad y esto afecta como nos relacionamos con otros. Y finalmente el círculo exterior, mision. Porque todo eso afecta el propósito por el cual vivimos, la misión por la cual vivimos.
¿En qué enfocamos nuestras energías?
Ahora, aquí está el asunto. Cuando usted mira este cuadro del hombre en la esencia de que quienes somos afecta nuestra mente, nuestras emociones, nuestra voluntad, nuestras relaciones con otras personas y finalmente nuestra misión y propósito en la vida, cuando pensamos en cristiandad, ese es el cuadro. ¿En qué enfocamos nuestras energías? Enfocamos la mayor parte de nuestra energía en los círculos externos. Hay personas a lo largo de este salón que están enfocados en relaciones, ¿cómo puedo ser un mejor esposo o mejor esposa? Necesito trabajar en mi matrimonio o necesito trabajar en mi rol paterno. Necesito trabajar en mis relaciones románticas, necesito trabajar mis amistades, o en mis relaciones, nuestra voluntad. Y así vemos áreas de nuestras amistades que necesitamos trabajar como cristianos. Se supone que debemos tener un tiempo devocional, se supone que debemos tener un tiempo de oración y estudio. Estamos supuestos a hacer esto o aquello. Y así estamos intentando pensar cómo puedo encajar esto en todo lo demás que tengo en acción.
¿Qué puedo hacer? ¿Cómo puedo lograr esas conductas, esos hábitos en mi vida? Sabemos que nuestro cuerpo esta supuesto a ser puro, así que pensamos, bien, ¿Qué puedo hacer para ser puro? Todos hemos tenido distintos pecados con los que luchamos. Y decimos bien, ¿Cómo voy a intentar vencer o lograr vencer ese pecado? Y nuestras emociones y nuestra mente en medio de este mundo plagado de cosas que están constantemente llegando a nuestras mentes ¿Cómo mantenemos la mente de Cristo? Y así lo que hacemos es gastar todas nuestras energías intentando enderezar todas estas cosas. Tratando de que todo eso se alinea con las verdades que vemos en la Biblia. Tratando de vivir la vida cristiana. Y así lo que hacemos es ir a estudios Bíblicos, y venir a adoración, y hablamos sobre cómo necesitamos vivir mejor y salimos con cosas prácticas que ahora necesitamos hacer para vivir mejor. Y algunas veces nos comprometemos a hacer esas cosas prácticas. El único problema es que dos semanas más tarde esos compromisos se han desvanecido a favor de otros compromisos que hemos descubierto que necesitamos hacer. Y estamos constantemente trabajando en esos círculos exteriores y como resultado muchos de nosotros estamos completamente frustrados en nuestra vida cristiana, desanimados y derrotados en medio de ella.
Y estoy convencido de que hay una razón para esto. La razón es esta: La vida cristiana es imposible. Usted no puede hacerlo. No puede vivirla por usted mismo, usted no puede arreglar todas esas cosas y componerlas y esto está diseñado de esa forma. Esta diseñado de forma que la única manera que estas cosas pueden ser un reflejo de Cristo es si El está viviendo su vida en usted. Él está en usted para habilitar que esto sea posible para usted. Tenemos que cuidar esto.
Deje a Cristo vivir en usted
Escuche a Ian Thomas, cuando leí esto, me sentí tan culpable: “Cuidado con siquiera ser como un cristiano que cae en la trampa de Satanás. Puedes haber encontrado y llegado a conocer a Dios y al Señor Jesucristo, recibirlo con sinceridad como tu redentor, sin embargo, si no te introduces en el misterio de la piedad y permites que Dios este en ti, el origen de Su propia imagen… (escuche esto), vas a procurar ser piadoso sometiéndote a reglas externas y normas y por conformarte a patrones de conducta impuestos sobre ti por la sociedad cristiana en particular que has escogido y en la cual esperas ser hallado aceptable. De esta manera, perpetuarás el hábito pagado de practicar la religión en la fuerza de la carne. Y en la verdadera búsqueda de la justicia cometer idolatría por honrar al cristianismo más que a Cristo”, ¡Qué cuadro! Idolatras. Caemos en esta trampa en toda la iglesia. Honrando al cristianismo más que al propio Cristo. Así que les encarezco hoy, dejemos de intentar vivir la vida cristiana. Deténgase y permita que su corazón y su vida capte esta enorme verdad, “Cristo, la imagen de Dios, el autor de la creación, la cabeza de la iglesia, y el Salvador del mundo, a quien pertenecen las inagotables, indescifrables riquezas”. Deje a Cristo vivir en usted. Deje que Su luz brote de usted, de forma que usted no se consuma tratando de que la vida cristiana sea una realidad porque está dejando a Él hacer esto en usted. Cristo en usted afecta todas esas cosas.
Escuche esto, Jesús no desea mejorarlo. El Desea transformarlo. Es una gran diferencia. Eso nos libera, podemos dejar de leer libros de superación personal. Aun los libros de autoayuda cristianos, podemos dejar de leerlos porque no importa que tanto sigamos eso que leemos ahí si seguimos viviendo la vida cristiana basada en reglas y regulaciones y principios y si podemos ponerlo en práctica, entonces todo estará bien. Y eso no es cierto. Es una mentira del enemigo. Solo Cristo puede satisfacer. Solo Cristo puede llenar. Solo Cristo puede cambiar nuestras mentes, nuestras emociones, nuestro cuerpo y nuestra voluntad para que sean de la forma que honre y glorifique a Dios. Así que déjelo hacer esta obra de transformarle. El no murió para darnos una forma ética de vivir completamente nueva. El murió para darnos vida en él. Y hay una diferencia radical entre las dos cosas. El cristianismo no es nada menos que sobrevivir a la morada de Cristo. Cristo en ustedes, transformando su mente, Cristo transformando sus emociones, de forma que usted comienza a sentir lo que Él siente. ¿Qué sucede, iglesia, cuando Cristo llega a ser la fuente de la cual todas nuestras emociones fluyen? Cristo está transformando nuestro cuerpo de forma que no estemos viviendo contra las reglas legalistas que dicen esto es pureza y esto otro es santidad, pero de tal forma que Él esté desarrollando su santidad. El que es Santo es Santo en nosotros. En nuestra voluntad comenzamos a pensar y Romanos 12:2 se hace real. Somos transformados de acuerdo a su voluntad. Ahora conocemos su voluntad y la aprobamos, la disfrutamos y esta afecta la manera en que nos relacionamos unos con otros. Sé que hay matrimonios en dificultad. Sé que hay familias en lucha, Cristo es nuestra esperanza. Es nuestra única esperanza. Cristo en ustedes, así que busque a Cristo y sumérjase en sus riquezas. El nos afecta desde adentro hacia afuera. La vida transformada.
La vida intercambiada
Y esto nos lleva al siguiente cuadro, Cristo en, no solo con, pero Él está en usted. La vida intercambiada, la vida empoderada, la vida transformada y la vida intercambiada. Quiero que vea las dos opciones cuando se trata de lo principal en este cuadro. Voltee su hoja de papel y dibuje dos nuevos juegos de siete círculos lado a lado. Tenemos dos opciones: en el círculo interior sobre la derecha escriba ‘naturaleza pecaminosa’. Esa es una opción. Y en esta es que todos hemos nacido. Todos hemos nacido con una naturaleza pecaminosa como principio. Cada uno de nosotros tiene una naturaleza pecaminosa como su principio. No es que simplemente pecamos, ese no es nuestro problema. Es que tenemos una naturaleza pecaminosa. Todos nosotros. Una naturaleza que está inclinado al ego, hacia las cosas de este mundo, una naturaleza inclinada a apartarse de Dios. Es la naturaleza pecaminosa que heredamos de Adán. Muchas gracias Adán y Eva, pero esto es lo que obtuvimos. tenemos una naturaleza pecaminosa. Todos nosotros. Es evidente en todo en nuestras vidas. Como resultado, no importa cuán difícil trabajemos en esos círculos para hacer cosas buenas y hacer cosas que son correctas, aun tenemos el problema fundamental en el fundamento de nuestro ser llamado naturaleza pecaminosa. Y esto es enorme. Por favor escúcheme.
Esto es enorme. Porque estoy convencido de que hay muchas personas en la iglesia que han logrado mantener las cosas en orden en algunos de esos círculos externos y están viviendo la vida cristiana y haciendo negocios cristianos, y casándose con otros cristianos y enseñando otros cristianos, quizás en un grupo pequeño o en un ministerio y están viniendo a adorar y estamos haciendo todas esas cosas, pero nunca ha habido un cambio fundamental en nuestro ser. Y estoy convencido de que es posible hacer todas esas cosas, pero nunca ha habido un cambio en el fundamento de nuestro ser. Y estoy convencido de que es posible hacer todas esas cosas que un cristiano hace y aun perder de vista lo que significa a Cristo transformar los cimientos de lo que somos. Muchos me dirán en ese día, Señor, Señor, ¿No profetizamos en tu nombre, y en tu nombre echamos fuera demonios, y en tu nombre hicimos muchos milagros? Y entonces les declararé: nunca os conocí; apartaos de mí, hacedores de maldad. Tenemos que guardar esto. Una naturaleza pecaminosa a causa inclusive de nuestra actividad religiosa puede ser enraizada en la naturaleza pecaminosa. La belleza de esto es que no es la única opción. Jesús ha intercambiado su vida con nosotros y así podemos dejar la avieja naturaleza a la izquierda y tenemos la naturaleza espiritual a la derecha. De manera que en el círculo interior del lado derecho escriba ‘naturaleza espiritual’. Jesús ha intercambiado Su vida con nosotros. Aquí está la belleza de lo que Cristo hizo en la cruz. No paso esto por alto. Él tomó su naturaleza pecaminosa, la crucificó y en su lugar se colocó a sí mismo. Puso al Espíritu de Dios, la naturaleza espiritual, la puso dentro de usted. Cristo en Usted. Es un intercambio completo de vida. Jesús toma todas las ramificaciones de su naturaleza pecaminosa, mayormente llamada de muerte y la carga sobre sí mismo. En cambio, pone Su Espíritu dentro de nosotros. De esto es exactamente de lo que Pablo está hablando.
La carne v el Espíritu
Retornemos a la izquierda y vamos a Gálatas capítulo 5. Quiero mostrarles esto. Gálatas capítulo 5, verso 16, este pasaje habla sobre la interacción entre la naturaleza pecaminosa y la naturaleza del espíritu. La carne y el Espíritu. Escuche lo él dice en Gálatas capítulo 5, solo un par de libros hacia la izquierda. Gálatas 5:16. El dice: “16 Así que les digo: Vivan por el Espíritu, y no seguirán los deseos de la naturaleza pecaminosa.17 Porque ésta desea lo que es contrario al Espíritu, y el Espíritu desea lo que es contrario a ella. Los dos se oponen entre sí, de modo que ustedes no pueden hacer lo que quieren.18 Pero si los guía el Espíritu, no están bajo la ley. Lo que él hace es darnos básicamente los hechos de la naturaleza pecaminosa en los versos 19 al 21, y entonces el fruto del Espíritu en los versos 21 y 22, y si avanzamos al verso 24 dice Los que son de Cristo Jesús han crucificado la naturaleza pecaminosa, con sus pasiones y deseos. 19 Las obras de la naturaleza pecaminosa se conocen bien: inmoralidad sexual, impureza y libertinaje;20 idolatría y brujería; odio, discordia, celos, arrebatos de ira, rivalidades, disensiones, sectarismos21 y envidia; borracheras, orgías, y otras cosas parecidas. Les advierto ahora, como antes lo hice, que los que practican tales cosas no heredarán el reino de Dios. 22 En cambio, el fruto del Espíritu es amor, alegría, paz, paciencia, amabilidad, bondad, *fidelidad,23 humildad y dominio propio. No hay ley que condene estas cosas.24 Los que son de Cristo Jesús han crucificado la naturaleza pecaminosa, con sus pasiones y deseos.25
Si el Espíritu nos da vida, andemos guiados por el Espíritu. Estas son buenas noticias. Pablo está hablando a esos hermanos de Galacia y les está diciendo, “a ustedes se les ha dado el Espíritu dentro de ustedes y todavía muchos de ustedes están viviendo como si fueran esclavos de la naturaleza pecaminosa. Y él les dice “Ustedes han sido liberados de eso. No vivan más de acuerdo a la carne. Vivan en los pasos del espíritu. Ahora el Espíritu está en ustedes” Damas y caballeros, hay una palabra ahí para nosotros hoy. Y es una buena palabra. Durante demasiado tiempo la iglesia de Jesucristo en la que Cristo habita, ha parecido exactamente igual a los que viven según la naturaleza pecaminosa. Y la belleza de Gálatas 5 y la belleza de colosenses Capítulo 1, verso 27, Damas y Caballeros, es que cuando usted confía en Cristo la naturaleza pecaminosa es crucificada. Es sometida impotente, completamente impotente. Y ustedes no están ya esclavizados al pecado. Ninguno en este salón que ha confiado en Cristo está más en esclavitud del pecado. ¿Sabe por qué? Porque Cristo no está esclavizado al pecado y Cristo está en usted.
Por tanto, usted no tiene que vivir nunca más como esclavo del pecado porque Cristo lo ha vencido y usted no tiene que derrotarlo porque Cristo ya lo ha derrotado por usted. La vida cristiana no es acerca de ir nosotros a intentar derrotar los pecados y las emociones con las que luchamos. Cristo ya ha tenido cuidado de eso. Es vivir en la vida por la que Cristo ya ha pagado el precio para darnos. Así que somos liberados de la naturaleza pecaminosa. Él intercambia, pone su espíritu en nosotros. Jesús ha intercambiado su vida con la nuestra. Gálatas 2:20 ¿Qué dice él? 20 He sido crucificado con Cristo, y ya no vivo yo sino que Cristo vive en mí. Lo que ahora vivo en el cuerpo, lo vivo por la fe en el Hijo de Dios, quien me amó y dio su vida por mí. Estoy crucificado con Cristo. La naturaleza pecaminosa, ida, fuera del cuadro. Cristo vive en mí y la vida que ahora vivo en la carne la vivo por la fe en él. Ahora vivo por fe en aquel que me amó y dio su vida por mí. El ha tomado su naturaleza pecaminosa y la ha crucificado en la cruz. No está más en esclavitud porque Cristo está en usted y lo ha transformado desde la misma esencia de su ser. Ahora, ¿Por qué él ha hecho esto? ¿Por qué él ha intercambiado su vida con la nuestra? Él ha hecho esto para cumplir su misión a través nuestro.
Él se revela
Y aquí está el cuadro. Cuando Cristo está en usted, entonces es casi como el cuadro de la encarnación una vez más. No en el mismo sentido, no es que nosotros seamos todo Dios y todo hombre, pero la encarnación está fundada sobre “la palabra siendo hecha carne” ese es el cuadro de la encarnación. Dios, la palabra hecha carne en Jesús.- cuando Jesús sale y el misterio es revelado, que él vivirá su vida en cada uno de nosotros y Su palabra será hecha carne en cada uno de nosotros. Y así como él vive en nosotros, él se revela a sí mismo y su gloria a través de nosotros. Esa es la belleza de Cristo en usted. ¿Cómo está Dios revelándose a sí mismo al mundo? No a través de habitar en el templo. El se está revelando a sí mismo a través de habitar en su gente. Habitando en usted y en mí. Somos la revelación de la naturaleza de Cristo a nosotros. Y Cristo está en nosotros. Mostramos el retrato de Cristo a aquellos alrededor de nosotros. Eso es el cuadro.
Déjenme mostrarles un ejemplo de esto. Regresemos al verso 24. Este pasaje completo es el contexto de Pablo hablando acerca de su ministerio y él dice en el verso 24, Ahora me alegro en medio de mis sufrimientos por ustedes, y voy completando en mí mismo lo que falta de las aflicciones de Cristo, en favor de su cuerpo, que es la iglesia.
Ahora quisiera que piensen en esto conmigo. Pablo dice que él completa lo que falta de las aflicciones de Cristo. ¿De qué se trata esto? Respecto de las aflicciones de Cristo ¿No tuvo él suficiente sufrimiento? Absolutamente que fue suficiente. Todo el cuadro que es pintado a partir del verso 20 es que él ha pagado el precio de nuestros pecados a través de su sangre derramada sobre la cruz. Sus sufrimientos fueron más que suficientes. Pero hay un cuadro que Pablo nos está dando aquí. Jesucristo sufrió y murió sobre una cruz de manera que vivir en su pueblo. Así que el moriría por sus pecados y viviría en ellos. Pero el problema es que Pablo escribe esta carta desde una prisión en Roma. El sabe que su meta es llegar a España porque había personas en España que todavía no conocían el misterio. Ellos no sabían que Cristo había muerto por ellos. No habían oído acerca de esto. Y él quería llegar allá. En efecto, mi propósito ha sido predicar el evangelio donde Cristo no sea conocido (Romanos 15:20) Quiero llegar allá porque el misterio necesita ser revelado a ellos. Ahora
En su carne lo que falta de las aflicciones de Cristo
¿Cómo va a ser revelado? Pablo dice que será revelado a través él completando en su carne lo que falta de las aflicciones de Cristo. Cristo ha pagado el precio por sus pecados. Ellos necesitan saber eso y necesitan ver eso en mi vida. Por eso es que Pablo a todo lo largo de sus cartas habla acerca de cómo él acoge los sufrimientos. Él quiere conocer el compañerismo y compartir los sufrimientos de Cristo. ¿Por qué? Porque cuando el sufre para dar a conocer el evangelio, entonces el mundo lo ve con claridad en él, al Cristo de la cruz. Empapémonos de esto. Cuando él sacrifica su vida para dar a conocer a Cristo, entonces el mundo ve el cuadro de Cristo en su sacrificio. Ve al Cristo de la cruz.
Aquí está el principio: Cristo sufrió para cumplir la salvación. Nosotros sufrimos para esparcir la salvación. Cristo está dando a conocer su amor y su sacrificio alrededor del mundo ¿Cómo? A través del amor de su pueblo, en el que Él habita.
Josep Soana es un pastor rumano que ha enfrentado toda clase de persecución. Él lo cuenta mejor: El dijo: “La cruz de Cristo fue para la propiciación para hacernos justos ante Dios. La cruz de Cristo fue para propiciaciòn. La nuestra es para propagación. En otras palabras, levantamos nuestra cruz porque queremos mostrar al mundo un salvador que murió de manera que ellos puedan conocer su amor. Esto tiene enormes ramificaciones para un mundo donde mil millones de personas nunca han escuchado el nombre de Jesús y la mayoría de ellos están en lugares muy difíciles de alcanzar. Muchos de ellos están en lugares que simplemente no quieren el evangelio. Así que la pregunta que debemos hacer es ¿Abrazaremos la cruz de manera que ellos puedan disfrutar del Cristo de la cruz? Iglesia, esta es una gran pregunta. ¿Abrazaremos la cruz de manera que ellos puedan disfrutar del Cristo de la cruz?
En el Medio Oriente, en una parte del mundo donde la abrumadora mayoría de la gente no tiene relación con Cristo y no tiene conocimiento del misterio de Cristo, hay muchas partes del Medio Oriente donde no conocen acerca del misterio de Cristo y todavía hay creyentes en el Medio Oriente que están literalmente sacrificando sus vidas para dar a conocer alrededor el amor y la misericordia y la gracia de Cristo que hay en ellos. Cristo está en ellos y Cristo está en nosotros y la pregunta para ellos y para nosotros es ¿Sacrificaremos nuestras vidas de forma que ellos vengan al conocimiento del amor de Cristo? Porque, no pierda esto de vista, es el sacrificio de nuestras vidas que ellos van a visualizar la imagen más brillante del amor de Cristo sobre una cruz. Y cuando nosotros mostramos esa clase de amor entonces ellos llegarán a conocer la esperanza de gloria. Cristo en ellos, Cristo para ellos. Este es el cuadro. Jesús ha intercambiado su vida con nosotros para cumplir su misión a través de nosotros. Eso nos guía al cuadro de la esperanza.
Esperanza
La vida cristiana es la vida empoderada, y la vida transformada y la vida intercambiada; es también la vida asegurada. La vida asegurada. Amo este cuadro. Esperanza. Esto no es un sueño o un deseo o un “quizá” en la Escritura. Esto es absolutamente cierto. Esperanza, certeza absoluta de que la gloria nos espera. Absoluta certeza y confianza en Gloria. Y usted obtiene esto cuando comprende el cuadro aquí. Hace años yo estaba escuchando un sermón en un CD y ellos usaron una ilustración que quiero usar para que ustedes capten el cuadro aquí de Cristo en ustedes. Así que sígame por un segundo. Quiero que visualice un contenedor, quiero que visualicemos ese contenedor como usted. ¿bien? Esta es su vida. Ahora, usted nació con una naturaleza pecaminosa, vacío del espíritu de Cristo. Pero cuando usted confía en Cristo para el perdón de sus pecados, entonces Cristo estará en ese contenedor en particular porque Cristo viene a vivir en usted. Así que tomamos un pequeño contenedor y escribimos Cristo sobre él, y entonces tomamos la tapa de usted (el contenedor) y ponemos a Cristo en usted.
¿Correcto? Así que Cristo está en usted y no la va a dejar. Efesios 13 y 14, Él le ha sellado con su Espíritu Santo. Su redención está garantizada. Así que cuando tiene a Cristo en usted, El no va salir de usted en ningún momento por toda la eternidad. El está en usted. Este es un sello bien firme. No va donde quiera ¿Bien? Pero la belleza es que usted tiene el verso, vea el verso 28 (Colosenses 1: 28) A este Cristo proclamamos, aconsejando y enseñando con toda sabiduría a todos los seres humanos, para presentarlos a todos perfectos en él. Este es, de hecho, el cuadro más común que tenemos de Pablo respecto a nuestra relación con Cristo. No Cristo en nosotros sino nosotros en Cristo. De manera que , añadamos un contenedor más grande. Y escribamos Cristo en el frente aquí y no solo es Cristo en nosotros, pero nosotros estamos en Cristo. ¿Correcto? Así que tomemos el contenedor etiquetado usted y póngalo en el contenedor mayor etiquetado Cristo y séllalo. Pablo habla sobre esto todo el tiempo. Crucificado con Cristo, ahora estoy en Cristo. Así que ahí está usted. Se tiene a usted. Tiene a Cristo en usted, y ahora tiene usted en Cristo. Es un cuadro bastante seguro, pienso. Pero se pone aún mejor. Vamos a Colosenses capítulo 3, busque Colosenses capítulo 3, verso 3, pues ustedes han muerto y su vida está escondida con Cristo ¿ en quien? Esto es bueno, usted ve que Cristo está en Dios. Así que traigamos a Dios al cuadro. Escribiremos la palabra Dios sobre un contenedor aún más grande y vamos a colocar a Cristo dentro de Dios, y sellar el contenedor. Ahora este es el cuadro de usted. Cristo está en usted y usted está en Cristo y Cristo está en Dios.
El adversario quiere hacer algo contra usted
Porque Cristo está en usted y usted está en Cristo y Cristo está en Dios. Y esto significa que si el adversario quiere hacer algo contra usted, entonces él tiene que encontrar la forma de traspasar a Dios, de lo cual no tiene un buen historial. El tiene que pasar a través de Dios el Padre, y entonces, una vez que el logra traspasar al Padre de alguna forma, entonces viene a enfrentar a Cristo, cara a cara, lo cual por cierto ha pasado antes y ha perdido. Perdió miserablemente. El pensó que había ganado, pero tres días después Cristo estaba de regreso y él fue derrotado. Así que si él logra atravesar a Dios, entonces tiene que enfrentar a Cristo y entonces llegar a usted. Pero el problema es, una vez que ha llegado a usted es que pasa sobre usted aún le queda un segundo asalto con Cristo quien habita en usted, el Espíritu Santo de Dios. Y así usted tiene la vida cristiana, no lo pase por alto, diseñada en tal forma que su vida está completamente segura con el Espíritu Santo, la presencia viviente de Cristo en usted, usted está en Cristo y Cristo está en el Padre.
No hay absolutamente nada que pueda pasarle a usted en este mundo aparte de la gracia, la misericordia, el amor y el poder y la soberanía de este Dios. Y esa es una buena noticia. Usted está completamente seguro en El y no tiene nada que temer. Usted no tiene nada que temer. Esto es el por qué Pablo dice cuando está hablando sobre el sufrimiento “ voy a dar mi vida de manera que ellos puedan conocer” El dice “Me regocijo en eso” ¿Por qué se regocija usted en eso? Porque no hay nada que pueda pasarle a usted en este mundo que pueda deshacer este cuadro, por toda la eternidad. Cristo en usted, usted en Cristo y Cristo en Dios. Esa es una buena noticia. Eso es la vida cristiana, Oro que Dios nos dará la gracia de conocer este cuadro. ¿La esperanza de qué? Cristo en usted, la esperanza de gloria.
La vida completa
La última característica de la vida cristiana que quiero que veamos es la vida completa. La vida cristiana es la vida empoderada, transformada, intercambiada, segura y es la vida completa. Veamos el verso 28 nuevamente en colosenses capitulo 1. Dice: A este Cristo proclamamos, aconsejando y enseñando con toda sabiduría a todos los seres humanos, para presentarlos a todos perfectos en él. Perfecto. Aparentemente la meta aquí es perfección. Realización en Cristo. Regresamos al capítulo 3, verso 4 que vimos unos segundos antes. Escuche esto. Cuando Cristo, que es la vida de ustedes, se manifieste, entonces también ustedes serán manifestados con él en gloria. Esta es su esperanza, cuando Cristo es que su vida, entonces, hay un día en que usted va a aparecer con él en gloria. Filipenses 3:20 y 21 lo dice de esta forma: Un día Él transformará nuestro cuerpo miserable para que sea como su cuerpo glorioso.” I Juan 3:2, lo pone de esta forma: “Seremos Como El”. El blando, el propósito, la ganancia final de la vida cristiana es el día cuando toda persona en este planeta que ha confiado en Cristo, que han recibido a Cristo en ellos serán un día completos en Cristo y no habrá más lucha con el pecado, no habrá más tristeza, no más dolor, estaremos completos en él, con El.
Por eso es que él es llamado en colosenses 1, el primogénito entre muchos hermanos. Somos parte de la familia. Hebreos capitulo 2, verso 10 “a fin de llevar a muchos hijos a la gloria” por eso es que Romanos capitulo 8 verso 28 dice: “Ahora bien, sabemos que Dios dispone todas las cosas para el bien de quienes lo aman, los que han sido llamados de acuerdo con su propósito. 29 Porque a los que Dios conoció de antemano, también los predestinó a ser transformados según la imagen de su Hijo, para que él sea el primogénito entre muchos hermanos.30 A los que predestinó, también los llamó; a los que llamó, también los *justificó; y a los que justificó, también los glorificó. Un día, damas y caballeros, estaremos completos en él y eso merece el sacrificio de nuestras vidas a la luz del hecho de que sabemos, nosotros sabemos que estaremos de pie frente al Padre, completos en Jesucristo. Cristo en usted significa Cristo en usted para siempre, victoria, plenitud de vida. Cristo en usted la esperanza de gloria. El nos ha dado la vida empoderada. Dios nos libera de un concepto pequeño de Cristo. El ha transformado nuestra vida desde adentro hacia afuera. El nos está transformando aun mientras estamos sentados aquí justo ahora.
El está transformando, 2 Corintios capitulo 3, verso 18 somos transformados a su semejanza con más y más gloria por la acción del Señor, El nos está haciendo más como Cristo, momento a momento. Y él lo está haciendo, no usted. Usted no se transforma, Él lo transforma a usted. Él no está mejorándolo, Él está transformándolo. Él ha intercambiado su vida con la suya. Él ha tomado su naturaleza pecaminosa, Él la ha crucificado de manera que usted pueda vivir en Su rectitud , Su santidad, Su redención, Su poder. Él ha intercambiado. Usted tiene el Espíritu en lo más profundo de su ser. Él ha asegurado su vida en Sí mismo y no hay nada que pueda tocarle en este mundo fuera de pasar a través del Padre y el Hijo y el Espíritu Santo de Dios. Él un día lo completará. Alabado sea Dios por esta extraordinaria verdad. Cristo EN USTED la Esperanza de gloria.
¿Inclinarán sus rostros conmigo? Mientras inclinamos nuestras cabezas y cerramos los ojos y solo pensamos, reflexionamos en este cuadro, tengo dos preguntas para cada persona de este salón.
¿Está Cristo en usted?
Pregunta número uno: ¿Está Cristo en usted?. No estoy preguntando si usted ha sido bautizado o si usted es miembro de una iglesia. No estoy preguntando si usted ha ido a la iglesia toda la vida. No estoy preguntando si usted es un líder en la iglesia. No estoy preguntando si usted está en el personal de la iglesia. Estoy preguntando ¿Está Cristo en usted? ¿Ha ocurrido en su vida ese cambio fundamental en lo más profundo de su ser donde Cristo ha puesto su Espíritu dentro de usted? Donde usted ha dicho “no traigo nada a la mesa, ni una pizca puedo yo hacer que me justifique ante Dios. Solamente Cristo puede hacer eso”. ¿Ha confiado usted en Él para salvarle de sus pecados, vivir en usted, habitar en usted? Si usted nunca ha hecho eso, si Cristo no está en usted, entonces en urjo a que justo ahora, en estos momentos le diga “Te quiero en mi vida, tengo una naturaleza pecaminosa que quiero intercambiar por tu naturaleza de justicia, confío en que Tú lo harás, no por nada que yo pueda hacer, sino solo por tu gracia. No puedo hacer nada para obtener esto, pero Tú lo das todo gratuitamente”. Yo sé que al usted expresar eso a Él, si usted confía en Él, la Biblia dice que Cristo habitará en usted. El viene a vivir y residir en Usted. ¿Está Cristo en usted?
¿Es Cristo su vida?
Pregunta número dos: para aquellos quienes dicen con absoluta confianza: “Sí, Cristo está en mí, sé que Cristo está en mí” Mi pregunta es ¿Es Cristo su vida? Sabe que Él es su salvador, Él le salvó de sus pecados, pero ¿Es Él su vida? ¿ Está Él transformándose día a día desde adentro hacia afuera? ¿Se ha dado por vencido al intentar vivir la vida cristiana en su propia fuerza? ¿Ha confesado usted que eso es imposible, no puedo hacerlo de modo que me rindo y necesito que lo hagas por mí? ¿Es Cristo su vida? Y si usted ha estado atrapado en su naturaleza pecaminosa, atrapado en su autosuficiencia, pensando que usted puede hacer esto por su cuenta, quiero surgirle hoy a decir a Cristo “Quiero que seas mi vida. Quiero morir a mi mismo porque quiero que vivas en mí, quiero esta vida cristiana. Cristo en mí, la esperanza de gloria.” Voy a orar y si usted necesita responder una de estas dos preguntas en su vida. Si usted necesita a Cristo en usted o si usted necesita que Cristo sea su vida, quizá por primera vez en mucho tiempo, que sea realmente su vida, quizá usted necesite arrodillarse y decir “Cristo quiero morir a mí mismo hoy y quiero que tú vivas en mí.
Padre, oro que tú nos liberes del cristianismo derrotado. Padre oro que tú levantes una persona que tú conoces y que está experimentando la vida transformada, intercambiada, en el poder, la seguridad y la plenitud. Dios oramos que tú nos libres de reglas y reglamentos que seguimos y que nos privan de experimentar el gozo de Cristo en nosotros la esperanza de gloria. Dios, oro que estas personas hoy confíen en ti. Por primera vez vas a revolucionar radicalmente lo más profundo de su ser por tu Espíritu. Y oramos que nos levantes como gente que exhibe al mundo lo que significa que Cristo vive en nosotros, la Esperanza de Gloria. En el nombre de Jesús. Amén.