Celos por una cosa

Celos por una Cosa

Sí tienen una Biblia, y espero que así sea, les invito a abrirla en Hechos 16, o de hecho, empecemos justo al final de Hechos 15:36 en un momento. Estoy tan agradecido por los maestros de la Palabra en esta iglesia. Le semana pasada estudiamos Hechos 15, y vimos la gloria del evangelio y el peligro del legalismo. La pregunta es ¿Cómo se llega de Hechos 15 a Hechos 16?

Sólo somos Aceptados ante Dios por Su Gracia

Así que, hechos 15 es un interludio –este importante, breve, teológico, histórico interludio donde vimos que Sólo somos aceptados ante Dios por su Gracia. Esa es la esencia de la salvación. Somos salvos sólo por gracia, sólo a través de la fe y sólo en Cristo, no basado en nada que hagamos, sino en todo lo que Él ha hecho. Así que no trabajamos, vivimos, oramos, estudiamos o adoramos para ganar favor ante Dios, para ganar rango ante Dios. Tenemos favor ante Dios y rango ante Dios, únicamente basados en la fe en Cristo. El es nuestra rectitud.

Lo que nos hace preguntarnos entonces, ¿porqué trabajamos? ¿Porqué vivimos?, ¿porqué oramos? ¿Porqué estudiamos? ¿Porqué adoramos? Me alegro que lo pregunten. La cuestión es, que hacemos esas cosas, no para ganarnos el favor ni para de alguna manera incrementar nuestro rango ante Dios. Somos aceptados ante Dios por Su gracia, y como receptores de gracia, nuestros corazones anhelan que El sea glorificado.

Somos Celosos de Dios, por Su Gloria

Así que solo somos aceptados ante Dios por Su gracia, y por eso somos celosos de Dios, por su gloria. Estamos urgidos, cautivados por la gracia, y consumidos por gracia para vivir para su Gloria. Así que tengo una cita de J. C. Ryle, un pastor y teólogo del siglo 19. El una vez escribió sobre el tema del celo, y quiero leerles esta cita a ustedes, y quiero que ella establezca la escena para lo que veremos en el mundo. Así que, escuchen con cuidado lo que este pastor y teólogo dijo.

J.C. Ryle dijo, Un hombre con celo en la religión es preeminentemente un hombre de una cosa. No es suficiente decir que es honesto, energético, recto, de todo corazón ferviente en el espíritu. El sólo ve una cosa, a él le importa una cosa, él vive por una cosa, el está invertido en una cosa, y esa sola cosa es agradar a Dios. Ya sea que él viva o sea que muera; ya sea que tenga salud o enfermedad; ya sea rico o sea pobre; ya sea que le agrade a los hombres o que los ofenda; ya sea considerado sabio o tonto; ya sea culpado u honrado, todo esto al hombre celoso no le importa nada. El arde por una cosa, y esa sola cosa es complacer a Dios y avanzar la gloria de Dios. Sí el está consumido en la flama misma, no le importa; él está contento. El siente que, como una lámpara, el está hecho para arder, y sí fuera consumido durante el ardor, no ha hecho sino el trabajo para el cual Dios le designó.

Así que, la pregunta que quiero hacerles es ¿qué pasaría si cada miembro de la iglesia fuera celoso por una cosa, de esta manera? Por eso oro, en los pocos momentos que tenemos juntos en la Palabra de Dios, que cada hombre, cada mujer, cada estudiante, cada adolescente que conoce a Cristo, que Dios ponga en lo profundo de su corazón ese celo. Oro para que Dios implante un intenso entusiasmo por una cosa en sus corazones, que le lleve, que motive todo lo que ustedes son. Ya sea en sus matrimonios, familias, empleos, amigos, posesiones, planes o sueños, que sean compelidos por un deseo ardiente por una cosa, y eso es la proclamación de la gloria de Dios en el mundo. Todo se resume a esa sola cosa.

Lo que quiero que veamos en Hechos 16, 17 y 18 es una imagen, una ilustración de eso. Tal como lo hicimos hace un par de semanas cuando tomamos una buena porción de las Escrituras para estudiar, iremos leyendo y pausaremos en el camino, tratando de entender lo que estamos viendo y quiero que oremos juntos para que Dios nos de esta clase de celo por Su gloria.
Así que, este es el Segundo viaje misionero de Pablo. Tomó un par de años, pero nosotros lo cubriremos en unos pocos momentos. Así que tenemos mucho terreno que cubrir.

Comenzaremos en Hechos 15:36. Recuerden el contexto. Hechos 13 es el primer viaje misionero y Pablo y Bernabé están en Antioquia. Ellos son enviados en el primer viaje misionero. Vemos Hechos 13 y 14, que estudiamos cuando ayunábamos juntos y vimos el primer viaje misionero.

Al final de este viaje, Pablo y Bernabé vuelven a Antioquia. Esa era un poco su ciudad base. De hecho en Hechos 15, el cual es el concilio de Jerusalén, Pablo y Bernabé van a Jerusalén, lidian con un asunto teológico de gran importancia y peso y vuelven a Antioquia. Así que ellos viven en Antioquia cuando llegamos a Hechos 15:36. La Biblia dice: “Después de algunos días, Pablo dijo a Bernabé: Volvamos a visitar a los hermanos en todas las ciudades en que hemos anunciado la palabra del Señor, para ver cómo están. Bernabé quería que llevasen consigo a Juan, el que tenía por sobrenombre Marcos; pero a Pablo no le parecía bien llevar consigo al que se había apartado de ellos desde Panfilia, y no había ido con ellos a la obra.”

Algunas de sus traducciones literalmente dicen “porque Marcos los había abandonado en Panfilia y no había seguido con ellos en el trabajo. Fue tan serio el desacuerdo, que terminaron separándose: Bernabé se llevó a Marcos y se embarcó para Chipre, mientras Pablo, por su parte, escogió a Silas y, encomendado por los hermanos al amor del Señor, salió de allí y pasó por Siria y Cilicia animando a los hermanos en las iglesias.”

Leamos un par de versos más, capitulo 16:1: “Después llegó a Derbe y a Listra. Había allí cierto discípulo llamado Timoteo, hijo de una mujer judía creyente, pero de padre griego; y daban buen testimonio de él los hermanos que estaban en Listra y en Iconio. Quiso Pablo que este fuera con él; y tomándolo, lo circuncidó por causa de los judíos que había en aquellos lugares, pues todos sabían que su padre era griego. Al pasar por las ciudades, les comunicaban las decisiones que habían acordado los apóstoles y los ancianos que estaban en Jerusalén, para que las guardaran. Así que las iglesias eran animadas en la fe y aumentaban en número cada día.”

Celosos para la Gloria de Dios

Bien, celosos para la Gloria de Dios. Quiero que veamos una imagen de esto. ¿Qué significa tener celo para la gloria de Dios, arder por una cosa? Bueno, significa, desde el principio, amamos el pueblo de Dios. Celo por la gloria de Dios significa, conlleva amor por el pueblo de Dios. Así que Pablo y Bernabé están en Antioquia y Pablo le dice al último: “Bernabé, debemos volver a dar fuerzas a las iglesias que hemos plantado”.

Bernabé dice “Buena idea”. El único problema es que Bernabé quiere llevar a su primo Marcos. Sí recuerdan, cuando leímos hechos 13 y 14, hubo un punto en que Marcos había viajado con Pablo y Bernabé, pero este desertó y se alejo de ellos. Hay mucha especulación sobre a donde Marcos fue en ese punto. Algunos piensan que añoraba su hogar. Otros creen que tenía algún tipo de enfermedad. Algunos creen que Marcos no le gustó que Pablo ascendiera a una posición mayor de liderazgo en el equipo, sobre Bernabé. Otros piensan que Marcos no pudo aguantar la vida misionera.

Sin embargo, Pablo no quería que Marcos fuera, y Bernabé quería que fuera, y esto llevó a una división y un amargo desacuerdo. Ahora, imagínense, tenemos estos dos titanes de la iglesia de ese tiempo. Pablo le debía a Bernabé, en un sentido, más que a cualquier otro ser humanos. El efecto que Bernabé había tenido en su vida era monumental, y tenemos a Bernabé separándose de Pablo, uno de los más grandes sirvientes de Cristo en la cristiandad, y se separan por un desacuerdo. En y por sí mismo, esto no era bueno.

Piensen en Hechos 15:28, cuando dice que ellos oraron, y les pareció bueno al Espíritu Santo y a ellos tomar esa decisión. No hay ninguna parte en este pasaje en el que veas a Pablo y Bernabé orar y decir que habían recibido del Espíritu Santo que era correcto separarse. No, esto fue un desacuerdo, una división. Esto no fue por lo que Jesús oró. En Juan 17, Jesús oró para que fueran uno, como El y el Padre son uno, pero Pablo y Bernabé no eran uno. Ellos se estaban dividiendo, pero lo que quiero que vean es que Por la gracia de Dios [Dios] supera los conflictos que creamos dentro de las iglesias. Nosotros los creamos.

Somos propensos a estar en desacuerdo unos con los otros. Somos propensos a la división los unos de los otros. Eso es un resultado del pecado y de la imperfección entre nosotros. Seamos honestos, hermanos y hermanas, aun en esta habitación, somos propensos a estar en desacuerdo y a la división. Eso es lo que hacemos los humanos. Eso es parte de la creación de iglesias. No es una buena estrategia para implantar iglesias “nos dividiremos, y comenzaremos una segunda iglesia bautista, y una tercera, cuarta y quinta, y comenzaremos una iglesia bautista New Harmony” pero no será Harmony más de un par de semanas, porque el problema somos nosotros, ¿verdad? Es el pecado en nosotros lo que crea el desacuerdo y la división.

Vendrá el día en que no estaremos en desacuerdo, cuando estaremos completamente unidos en El, y veremos su rostro, y seremos uno, uno con los otros. Así que, este es el asunto, estamos trabajando para eso. Lo último que debemos hacer con Hechos 15 es tomarlo como una licencia para los desacuerdos y la división en la iglesia. “Bueno, como Pablo y Bernabé se dividieron y estuvieron en desacuerdo, nosotros haremos lo mismo”.

No. Efesios 4, “solícitos en guardar la unidad del Espíritu en el vínculo de la paz.” Esa es la orden en las Escrituras. Esto no es una licencia para estar en desacuerdo, sino que la imagen es, que por la gracia de Dios, El supera los conflictos que creamos dentro de la iglesia. Lo que encontramos es que Marcos, bajo a tutela de Bernabé, echa adelante y termina escribiendo un evangelio muy bueno, que llegó a nuestro libro. Dice en 1era de Pedro 5, que él era de gran ayuda para Pedro en el ministerio. Aun Pablo, al final de su vida, en 2da de Timoteo, le escribe una carta a este diciendo “Trae a Marcos contigo, pues él será de gran ayuda en el ministerio”. En 1era de Corintios, vemos que Pablo y Bernabé se reconciliaron uno con el otro también.

Así que, por la gracias de Dios, El supera los conflictos que creamos dentro de la iglesia y para Su gloria, Dios ordena la persecución que enfrentamos fuera de la iglesia. OK, en Hechos 16, Pablo viene a Listra y allí hay un discípulo llamado Timoteo, muy probablemente un adolescente en ese punto, y sabemos que la relación de Pablo con Timoteo será enorme en las páginas subsiguientes. Su compañerismo y su sociedad en el evangelio serán enormes.

Ahora, la pregunta que quiero hacerles es ¿cómo vino Timoteo a la fe en Cristo? Sabemos que su madre y abuela fueron una enorme influencia en el, pero quiero que vayamos aun más profundo que eso conmigo. ¿Donde está Timoteo? Timoteo está en una ciudad llamada Listra. ¿Recuerdan lo que pasó cuando Pablo estaba en Listra? Vuelvan a Hechos 14:19. Pablo está predicando en Listra, y escuchen lo que pasa.

“Entonces vinieron unos judíos” Hechos 14:19, “de Antioquía y de Iconio, que persuadieron a la multitud, y habiendo apedreado a Pablo, le arrastraron fuera de la ciudad, pensando que estaba muerto” El, por supuesto, no estaba muerto, sino apedreado hasta el punto que pensaron que estaba muerto. Así que no sabemos si Timoteo vio esto o no. Ciertamente, escuchó sobre ello. No sabemos si su madre o abuela vio esto o escucho de ello, pero la realidad es que esta imagen de los sufrimientos por Cristo en exhibición en la vida de Pablo en Listra ciertamente tuvo por lo menos algún efecto en que Timoteo fuera a Cristo.

Aquí es donde quiero que piensen en el patrón que vemos aquí en el libro de Hechos. Esteban es apedreado, y ¿quién está ahí? Pablo está ahí. Saulo estaba parado ahí mientras apedreaban a Esteban, y Dios usa aun este apedreamiento, dos capítulos más adelante. Para llevar a la conversión y salvación de Pablo. Entonces, el apedreamiento de Esteban, eventualmente llevó, en alguna forma, a que Timoteo viniera a la fe en Cristo y a que este formara esta asociación con Pablo.

Amo esto. Satanás está tratando de atacar la iglesia desde dentro y desde fuera. Dentro: conflicto en la iglesia. Dios dice “Estos desacuerdos no son buenos”, pero Dios lo usará. Así que, ¿que dice Dios? “Ya no será un equipo misionero, sino dos, llevando el evangelio. Toma eso Satanás. Entonces, ¿apedrearás a Pablo? Bueno, usare eso para llevar a Timoteo a Cristo, y para hacerlo compañero para Pablo en el ministerio de aquí en lo adelante” No se puede detener que Dios de a conocer su gloria. Llegaremos a eso.

La imagen es que amamos al pueblo de Dios. No tendría sentido decir “tengo un gran celo por dar a conocer la gloria de Dios” y no tener amor por el pueblo de Dios. Así que, amémonos unos a los otros. Unamos nuestros brazos. Unámonos en un gran entusiasmo por una cosa y amemos el pueblo de Dios.

Seguimos el Espíritu de Dios

Segundo, Seguimos el Espíritu de Dios. Estos próximos versos que vamos a leer son de enorme importancia. Un escritor dijo “Los verdaderos y auténticos puntos de retorno en la historia son pocos, pero seguramente entre ellos está el de la visión de Macedonia”. Lo que estamos a punto de leer tiene implicaciones sobre porque tenemos el evangelio aquí en el occidente.

Hechos 16:6 dice, “Y atravesando” ahora pongan atención a esto. Sigan esta idea. “Y atravesando Frigia y la provincia de Galacia, les fue prohibido por el Espíritu Santo hablar la palabra en Asia; y cuando llegaron a Misia, intentaron ir a Bitinia, pero el Espíritu no se lo permitió. Y pasando junto a Misia, descendieron a Troas. Y se le mostró a Pablo una visión de noche: un varón macedonio estaba en pie, rogándole y diciendo: Pasa a Macedonia y ayúdanos. Cuando vio la visión, en seguida procuramos partir para Macedonia, dando por cierto que Dios nos llamaba para que les anunciásemos el evangelio.”

Ahora, leamos esto. Pablo va en ese camino, entonces el Señor le dice “No, no prediques el evangelio ahí” así que va en camino, pero el Espíritu Santo no le permite ir allí. Va y viene.

Ahora, Pablo probablemente tenga maravillosos planes cuando sale a fortalecer las iglesias en esos lugares. El Espíritu Santo le redirigía hacia aquí y hacia allá. ¿Alguna vez sientes eso? Alguna vez sientes como que estas siguiendo a Dios y como que vas en esa dirección y entonces El te dice “No vayas en esa dirección mas” y tú dices “OK, iré en esta otra dirección” y El dice “No, esa dirección tampoco” y tú te preguntas que está pasando.

Este pasaje que leeremos echará por tierra todos tus dichos lindos sobre como discernir la voluntad de Dios. No sabemos cómo esto está pasando, pero Dios está re direccionando. Quiero que vean algo aquí, una lustración, una imagen de la realidad que vemos en todas las Escrituras.

Así que, como seguimos al Espíritu de Dios, primero obedecemos sus órdenes. Pablo no está simplemente sentado diciendo “¿Que quieres que haga Dios?” No, hay personas que necesitan el evangelio. Hay ciudades que necesitan el evangelio. Hay iglesias que necesitan ser fortalecidas. Hay trabajo que requiere ser hecho. Así que Pablo no está sentado esperando la voluntad de Dios. Tenemos órdenes. Sabemos huir de la inmoralidad sexual. Sabemos orar y caminar en la Palabra. Nuestra orden es hacer discípulos.

Sal y haz discípulos mañana, sal y comparte el evangelio mañana y estarás caminando en la voluntad de Dios. No tienes que preguntarte “¿estará esto bien?”, si está bien que hagas discípulos toda la semana, así que siéntete libre. No tienes que esperar sentir una sensación de cosquilleo que te baja por la espalda para pensar “oh sí, tengo que hacer discípulos ahora”.

Esto es por lo que Oswald Chambers dijo “El cristiano nunca debe hacerse la pregunta “que es la voluntad de Dios para mi vida” Esa pregunta nunca deber ser formulada. Esa es una de las preguntas más comunes, ¿verdad? El dice que no debe ser hecha esa pregunta. Oswald dice “Estás caminando por un bosque. ¿Cuando es el único momento en el que te preguntas cual es el camino? Cuando estás perdido” así que él dijo “sólo quédate en el camino. Sólo camina en la voluntad de Dios. No tienes que preguntar dónde está, sólo camina paso a paso en la voluntad de Dios”.

Aquí está lo bello: mientras caminas en la voluntad de Dios y a medida que obedecemos sus órdenes, El dirige nuestros pasos. Pablo no tenía idea de lo que venía esa noche. El no podía haberlo organizado, planeado o previsto. El estaba obedeciendo, y mientras obedecía, Dios lo guiaba y, como resultado, el evangelio, por primera vez iría a Europa y a la mayoría de nuestros ancestros allí. El no pudo haber planeado eso. El estaba obedeciendo y el Espíritu guiaba. ¿No es esto Proverbios 3:5-6? “Fíate de Jehová de todo tu corazón, Y no te apoyes en tu propia prudencia. Reconócelo en todos tus caminos, Y él enderezará tus veredas”.

Dios no está en el cielo tratando de mantener su voluntad escondida de ti y tratando de hacértela difícil. El quiere tanto que su voluntad sea lograda en tu vida, cristiano, que ha puesto su Espíritu dentro de ti. Él ni siquiera va sólo a darte direcciones. El dirá “Viviré en ti y cambiaré tus pensamientos y tus deseos y guiaré tus pasos. Tú camina en mí. Tú obedéceme. Yo dirigiré tus pasos”.

Ahora, esta no es siempre la ruta más directa. Quiero decir, obviamente, Dios pudo haber dado a Pablo esta visión un par de días antes de que empezara a ir en esa dirección pero el Espíritu Santo de alguna manera lo detuvo de ir ahí. En ese sentido, el Espíritu Santo, pudo haberle dado esa visión desde el principio, El pudo mostrarle el plan.

Alguna vez deseas que Dios haga esto en tu vida. Todas esa preguntas que tienes, y dices “okay, caminar en su voluntad, pero hay tanto que no están en la Palabra. Por ejemplo, ¿con quien me caso? El nombre no está ahí. Puede que esté, pero no se cual es; hay muchos nombres. ¿Qué trabajo tomo o donde vivo? ¿Qué decisión tomo en esto o aquello?” Estas luchando con esto. No tienes claridad en la Palabra al respecto, así que luchas con ello, y estás pensando, “sería agradable tener una visión macedonia y que de repente ella esté ahí” Eso nos salvaría de mucho estrés en citas sí tan sólo pudiéramos tener la visión. Así que, queremos eso, y la realidad es que Dios te lo pudo haber dado, pero no lo hizo. Quizás hay algo más profundo aquí que las indicaciones de cómo llegar a un cierto lugar. Quizás el destino es aún más profundo que Macedonia.

Quizás Dios mismo es el destino. Quizás, el conocer de Él, o la intimidad con Él y el caminar con Él. ¿Qué tal si ese es el gol, aún mas que la respuesta a nuestras preguntas? Si no somos cuidadosos, podemos quedarnos tan atrapados en tratar de aclarar todo aquí en la tierra que perderíamos el punto. Dios está dando forma y amoldando a Pablo mientras el iba de aquí a allá.

Ahora, no se ustedes, pero yo tengo la tendencia a ponerme impaciente. Mi esposa y yo hemos estado en el proceso de adopción por los últimos dos años. Hace un poco más de dos años, nosotros oramos y buscamos al Señor, y le dijimos “¿Tú quieres que adoptemos?” Nosotros claramente sentimos que el nos guiaba a adoptar. Pusimos un mapa en la mesa “¿adopción domestica, internacional, donde?”

Mientras orábamos, sentimos claramente al Señor guiándonos a un país en el sureste de Asía. Así que comenzamos el proceso y ellos nos dijeron que sería menos de un año. Dos años después, nuestros papeles están en Nepal, engavetados, haciendo absolutamente nada y ese país está prácticamente cerrado a las adopciones de los Estados Unidos. Por dos años hemos estado orando por una niñita del sureste de Asia y nada pasa. Pensábamos “creemos que a esto era que tu nos estabas guiando”.

Entonces, el final del año pasado nos enteramos que hay una forma en la que podemos empezar un proceso de adopción paralelo. Mantenemos nuestros papeles en ese país y podemos adoptar de otro país también, así que comenzamos el proceso en otro país. No sabemos si la posibilidad se volverá a abrir en el primer país. No sabemos cómo funcionará con el nuevo país.

Ciertamente estamos tentados, en algunos puntos “sí Tu nos hubieras mostrado esto hace un par de años, hubiésemos ahorrado algo de tiempo en sentido general”, pero la realidad es que hay una cierta impaciencia en mi esposa que empezará a afectarme a mí, pero quiero recordar que no hay necesidad de ser impaciente con Dios. El puede abrir la puerta en el primer país así de simple, y pudiéramos recibir una llamada mañana. El puede hacer lo mismo en el nuevo país. Pudieran traer niños de toda clase de países mañana, quién sabe. Él puede hacerlo. No es que el no tiene el poder, pero ¿Qué si el punto es más profundo que un hijo de un cierto país?, ¿Qué tal sí el punto es conocerle y confiar en Él, y disfrutarlo y amarlo? Así que anímense.

Mientras obedecemos sus órdenes, Él dirigirá nuestros pasos. A través de toda la historia, esto es lo que Dios hace. Mi hijo y yo leemos en la noche la biografía de David Livingstone “Misionero en África”. El tuvo un enorme impacto en que el evangelio llegara a África, y lo estamos leyendo. Cuando el partió, el quería ir a China. No tenía idea en ese momento de que Dios lo usaría en África.

William Carey, padre de las misiones modernas, tuvo un efecto enorme en la India, el estaba supuesto a ir a la Polinesia. Hay congregaciones e iglesias por todo la budista Birmania al día de hoy, por causa de Adoniram Judson. El se había dispuesto a ir a India, inicialmente. No es que todos estaban equivocados en el principio, es que Dios dirigirá nuestros pasos para nuestro bien y para Su gloria.

Confiamos en la Gracia de Dios

Esto nos lleva al hecho, de que como amamos al pueblo de Dios y confiamos y seguimos el Espíritu de Dios, en nuestro camino, confiamos en la gracia de Dios. Así que, ahora el evangelio va a Europa, su destino es la primera colonia romana de Filipos en Hechos 16:11, “Zarpando, pues, de Troas, vinimos con rumbo directo a Samotracia, y el día siguiente a Neápolis; y de allí a Filipos, que es la primera ciudad de la provincia de Macedonia, y una colonia; y estuvimos en aquella ciudad algunos días. Y un día de reposo salimos fuera de la puerta, junto al río, donde solía hacerse la oración; y sentándonos, hablamos a las mujeres que se habían reunido.

Entonces una mujer llamada Lidia, vendedora de púrpura, de la ciudad de Tiatira, que adoraba a Dios, estaba oyendo; y el Señor abrió el corazón de ella para que estuviese atenta a lo que Pablo decía. Y cuando fue bautizada, y su familia, nos rogó diciendo: Si habéis juzgado que yo sea fiel al Señor, entrad en mi casa, y posad. Y nos obligó a quedarnos”.

Ahora, quiero hacer una pausa aquí antes de que vayamos a las próximas par de historias en Filipos, quiero establecer lo que veremos aquí. Estamos a punto de ver que sin importar nuestro estatus, Dios nos da salvación. Cada palabra aquí es importante, a pesar de nuestro estatus, Dios nos da Salvación. Primero, Dios le da a ella salvación. Dios nos da Salvación. El Señor abrió el corazón de ella. Lucas nos muestra intencionalmente que el Señor hizo esto. Todas esas personas estaban escuchando, y el Señor abrió el corazón de Lidia al Evangelio. Dios hizo eso. El Señor abrió el corazón de una mujer asiática, empresaria de clase media alta. Ella era de Asia Menor, lo que es la Turquía de hoy, y ella era una mujer de negocios exitosa, una vendedora de purpura, y en ese día el Señor abrió su corazón a Cristo.

Después, sí seguimos, el Señor dio salvación a una esclava griega de clase baja. El completo opuesto del espectro socioeconómico. Una esclava y una exitosa mujer de negocios, ambas vinieron a la fe en Cristo.

“Aconteció que mientras íbamos a la oración” verso 16, “nos salió al encuentro una muchacha que tenía espíritu de adivinación, la cual daba gran ganancia a sus amos, adivinando.” Literalmente, ella estaba endemoniada y daba a sus amos ganancia a través de la adivinación. Ella era básicamente una prostituta espiritual. “Esta, siguiendo a Pablo y a nosotros, daba voces, diciendo: Estos hombres son siervos del Dios Altísimo, quienes os anuncian el camino de salvación. Y esto lo hacía por muchos días; mas desagradando a Pablo, éste se volvió y dijo al espíritu: Te mando en el nombre de Jesucristo, que salgas de ella. Y salió en aquella misma hora.”

No se dice que ella necesariamente acepto a Cristo como su Salvador como lo vimos con Lidia y como veremos con el carcelero filipense, pero la mayoría de los estudiosos de este pasaje, poniendo las tres historias juntas, sacan la conclusión de que ella ha sido llevada por el nombre de Cristo y que probablemente ha ido a la fe en Cristo y que era después parte de la iglesia en Filipos. No lo sabemos a ciencia cierta, pero estamos casi seguros.

“Pero viendo sus amos que había salido la esperanza de su ganancia, prendieron a Pablo y a Silas, y los trajeron al foro, ante las autoridades; y presentándolos a los magistrados, dijeron: Estos hombres, siendo judíos, alborotan nuestra ciudad, y enseñan costumbres que no nos es lícito recibir ni hacer, pues somos romanos. Y se agolpó el pueblo contra ellos; y los magistrados, rasgándoles las ropas, ordenaron azotarles con varas. Después de haberles azotado mucho, los echaron en la cárcel, mandando al carcelero que los guardase con seguridad. El cual, recibido este mandato, los metió en el calabozo de más adentro, y les aseguró los pies en el cepo.”
Así que, hemos visto dos conversiones hasta ahora: una mujer asiática de clase media alta y de una esclava griega de clase baja. Ahora un carcelero romano de clase media.

“Pero a medianoche, orando Pablo y Silas, cantaban himnos a Dios; y los presos los oían. Entonces sobrevino de repente un gran terremoto, de tal manera que los cimientos de la cárcel se sacudían; y al instante se abrieron todas las puertas, y las cadenas de todos se soltaron. Despertando el carcelero, y viendo abiertas las puertas de la cárcel, sacó la espada y se iba a matar, pensando que los presos habían huido.”

El Moriría sí ellos Habían Escapado

Mas Pablo clamó a gran voz, diciendo: No te hagas ningún mal, pues todos estamos aquí. El entonces, pidiendo luz, se precipitó adentro, y temblando, se postró a los pies de Pablo y de Silas; y sacándolos, les dijo: Señores, ¿qué debo hacer para ser salvo? Ellos dijeron: Cree en el Señor Jesucristo, y serás salvo, tú y tu casa. Y le hablaron la palabra del Señor a él y a todos los que estaban en su casa. Y él, tomándolos en aquella misma hora de la noche, les lavó las heridas; y en seguida se bautizó él con todos los suyos. Y llevándolos a su casa, les puso la mesa; y se regocijó con toda su casa de haber creído a Dios.”

¡Que Escena!

“Cuando fue de día, los magistrados enviaron alguaciles a decir: Suelta a aquellos hombres. Y el carcelero hizo saber estas palabras a Pablo: Los magistrados han mandado a decir que se os suelte; así que ahora salid, y marchaos en paz. Pero Pablo les dijo: Después de azotarnos públicamente sin sentencia judicial, siendo ciudadanos romanos, nos echaron en la cárcel, ¿y ahora nos echan encubiertamente? No, por cierto, sino vengan ellos mismos a sacarnos. Y los alguaciles hicieron saber estas palabras a los magistrados, los cuales tuvieron miedo al oír que eran romanos. Y viniendo, les rogaron; y sacándolos, les pidieron que salieran de la ciudad. Entonces, saliendo de la cárcel, entraron en casa de Lidia, y habiendo visto a los hermanos, los consolaron, y se fueron.”

Oh, esto está bueno. Así que, un terremoto está sacudiendo mientras ellos cantan. Ellos tienen himnos y terremotos y cantos. ¿Por qué pasó todo esto? Ellos fueron arrojados en prisión, tenían espadas laceradas, piernas y brazos adoloridos, cantaban canciones, terremoto y todo esto trae a un carcelero filipense y a su familia a Cristo.

Cuando uno oye estas historia de Lidia, la esclava y el carcelero, ¿no está tu corazón atraído a pensar en todas las circunstancias que Dios ha orquestado en tu vida, en todas las personas que ha traído en uno u otro momento, para que tu oyeras el evangelio en ese momento en que el Señor abrió tu corazón y te atrajo a Él? Él orquestó todas esas cosas para que tu conocieras a Cristo y creyeras en el Señor Jesús y fueras salvo. No basado en nada que hayamos hecho. Estamos corriendo de Él, muertos en nuestro pecado, imposibilitados de salvarnos a nosotros mismo, y Dios hizo todo eso. El nos da la salvación sin importar nuestro estatus. El nos da la salvación y a pesar de las circunstancias, Él nos da una canción.

Así que, estas son grandiosas noticias para la esclava y para el carcelero filipense, pero era difícil para Pablo y Silas. Ellos habían sido desvestidos, golpeados y tirados en medio de una celda de una cárcel romana. ¿Qué pasó con la idea de que el lugar más seguro es en el medio de la voluntad de Dios? No hay un verso en la Biblia que diga eso. Ese era el lugar más peligroso en el que ellos podían estar, en el medio de Macedonia, de camino a Europa del Este. Esto era peligroso para ellos, y aún así, mientras ellos estaban sentados en esa prisión, ellos sabían que no eran en realidad prisioneros, en última instancia, de Roma, sino que eran prisioneros de Cristo.

Él sostuvo sus vidas en Sus manos, y Él estaba usando todo esto para su bien, para el bien de otros, para la salvación de otros y para su gloria. Sepan esto: obviamente ninguno de nosotros estamos en una celda de una cárcel filipense ahora mismo, con las espaldas laceradas, pero permítanme recordarles que no importando las circunstancias en las que te encuentres ahora mismo, no importa las circunstancias en las que te encuentres en el futuro, no importa en qué oscuras circunstancias, que dolorosa la circunstancias puedan ser, tu no estarás, cristiano, sin una canción. No estarás sin una canción sin importar que tan duro sea, que tan difícil sea, sin importar a quien pierdas, quien se vaya, que pase, nunca estas sin una canción por que el Rey soberano guarda tu vida en Sus manos y Él te promete que usará esto para tu bien, para el bien de otros, y para Su gloria. Esto es por lo que debemos ser exuberantemente entusiastas. Más que por cualquier confort o facilidad en esta vida, somos entusiastas por su gloria, así que confiamos en la gracia de Dios.

Proclamamos la Verdad de Dios

Esto nos lleva al cuarto, proclamamos la verdad de Dios. Esto lleva a hechos 17, a lo que algunos han llamado el mayor documento misionero en todo el Nuevo Testamento. Comienza en Tesalónica, la cual era la capital de Macedonia. El verso 1 dice: “Pasando por Anfípolis y Apolonia, llegaron a Tesalónica, donde había una sinagoga de los judíos. Y Pablo, como acostumbraba, fue a ellos, y por tres días de reposo discutió con ellos, declarando y exponiendo por medio de las Escrituras, que era necesario que el Cristo padeciese, y resucitase de los muertos; y que Jesús, a quien yo os anuncio, decía él, es el Cristo.

Y algunos de ellos creyeron, y se juntaron con Pablo y con Silas; y de los griegos piadosos gran número, y mujeres nobles no pocas. Entonces los judíos que no creían, teniendo celos, tomaron consigo a algunos ociosos, hombres malos, y juntando una turba, alborotaron la ciudad; y asaltando la casa de Jasón, procuraban sacarlos al pueblo. Pero no hallándolos, trajeron a Jasón y a algunos hermanos ante las autoridades de la ciudad, gritando: Estos que trastornan el mundo entero también han venido acá; a los cuales Jasón ha recibido; y todos estos contravienen los decretos de César, diciendo que hay otro rey, Jesús. Y alborotaron al pueblo y a las autoridades de la ciudad, oyendo estas cosas. Pero obtenida fianza de Jasón y de los demás, los soltaron.”

Sigamos

“Inmediatamente, los hermanos enviaron de noche a Pablo y a Silas hasta Berea. Y ellos, habiendo llegado, entraron en la sinagoga de los judíos. Y éstos eran más nobles que los que estaban en Tesalónica, pues recibieron la palabra con toda solicitud, escudriñando cada día las Escrituras para ver si estas cosas eran así. Así que creyeron muchos de ellos, y mujeres griegas de distinción, y no pocos hombres. Cuando los judíos de Tesalónica supieron que también en Berea era anunciada la palabra de Dios por Pablo, fueron allá, y también alborotaron a las multitudes. Pero inmediatamente los hermanos enviaron a Pablo que fuese hacia el mar; y Silas y Timoteo se quedaron allí. Y los que se habían encargado de conducir a Pablo le llevaron a Atenas; y habiendo recibido orden para Silas y Timoteo, de que viniese a él lo más pronto que pudiesen, salieron.”

Tienen que ver esto. Esto es lo que vemos en todas partes donde Pablo va. Aquí es dónde siempre comenzó. Comienza con la Palabra siendo hablada; la palabra es predicada. Todo en todas estas historias gira alrededor de esto. Pablo va a la sinagoga, a las calles, a todos los lugares posibles, y predica la Palabra. En el verso 2 dice “discutió con ellos” en Tesalónica “declarando y exponiendo por medio de las Escrituras, que era necesario que el Cristo padeciese, y resucitase de los muertos” Entonces, ellos le creyeron. Algunos fueron persuadidos. Es por esto que Pablo en 1era de Tesalonicenses 1 dice: “Y vosotros vinisteis a ser imitadores de nosotros y del Señor, recibiendo la palabra en medio de gran tribulación, con gozo del Espíritu Santo.” Ustedes recibieron la Palabra.

Él va a Berea. Él enseña la palabra allí y ellos la reciben. Ellos examinan las escrituras cada día. Todo gira en torno a la recepción de la palabra de Dios y enseñar sobre la palabra de Dios. Ahora, obviamente, no todo el mundo está feliz en el proceso. Así que unos judíos empiezan a oponérsele en Tesalónica. Ellos van a Jasón y a otros hermanos; ellos los traen de la ciudad. ¿Qué está pasando? Escuchen sus palabras. Verso 6 dice “Estos que trastornan el mundo entero también han venido acá” No creo que él lo decía con esa intención, pero es un cumplido. Pablo y Silas eran conocidos por causar revuelo en el mundo pagano. Eso es bueno. Yo quiero, y queremos ser, conocidos por causar revuelo en el mundo pagano. Queremos ser conocidos por causar problemas a los poderes de la oscuridad.

¿No quieres que los enemigos en la oscuridad digan “el, ella, nos causan problemas”? Si, cuando se predicaba esta palabra, este mundo es cambiado. Esta palabra es buena, hermanos y hermanas. Esta palabra tiene el poder de poner de cabeza reinos. Así que, ellos están predicando y están diciendo “hay otro rey, además de Cesar” Absolutamente, hay otro rey. Hay otro reino que está avanzando, y esta Palabra es proclamada, causa revuelo y cambia corazones.
En medio de la idolatría, anhelamos que Dios sea adorado.

Así que, proclamamos la verdad de Dios donde quiera que vayamos, aun en áreas hostiles. Esto nos lleva a Atenas. El verso 16 dice “Mientras Pablo los esperaba en Atenas, su espíritu se enardecía viendo la ciudad entregada a la idolatría.” Pausemos por un momento. Quiero darles los antecedentes de Atenas. Atenas era el centro cultural y filosófico de Roma, de alguna forma era el lugar turístico del momento también. Esto es, donde todas las ideas e ideologías eran debatidas, una ciudad de belleza y brillantez, pero Pablo no estaba impresionado, por que el miraba y veía ídolos en todas partes. Los historiadores dicen que posiblemente había 30,000 dioses e ídolos en Atenas. Estaban en todas partes.

Un historiador dijo “es mas fácil encontrar un dios en Atenas que un hombre” Así que ahí tenemos este destino turístico de moda y Pablo no dice “Oh, finalmente la ocasión en que puedo visitar Atenas por un día y simplemente disfrutar y absorberlo todo” No, Pablo se siente provocado. ¿Qué significa esto? Significa que está inflamado de ira santa. ¿Por qué? Por que él ve esta situación en la que un ídolo, un dios, están recibiendo alabanza y honor y devoción y ofrendas, y Pablo sabe que sólo hay uno que es digno de adoración y honor y devoción y ofrenda. Así que, en medio de la idolatría, el tiene celo e intenso entusiasmo por una cosa. En medio de la idolatría, añoramos que Dios sea alabado.

Así que Pablo comenzó a hablar con cualquiera que pudiera encontrar. El verso 17 dice: “Así que discutía en la sinagoga con los judíos y piadosos, y en la plaza cada día con los que concurrían. Y algunos filósofos de los epicúreos y de los estoicos disputaban con él; y unos decían: ¿Qué querrá decir este palabrero? Y otros: Parece que es predicador de nuevos dioses; porque les predicaba el evangelio de Jesús, y de la resurrección. Y tomándole, le trajeron al Areópago, diciendo: ¿Podremos saber qué es esta nueva enseñanza de que hablas?”

Ahora tenemos un debate de ideologías con los mayores filósofos, “‘¿Podremos saber qué es esta nueva enseñanza de que hablas? Pues traes a nuestros oídos cosas extrañas. Queremos, pues, saber qué quiere decir esto. (Porque todos los atenienses y los extranjeros residentes allí, en ninguna otra cosa se interesaban sino en decir o en oír algo nuevo.)” Lucas nos dice lo que él piensa de Atenas.

Cuando llegamos al verso 22 y Pablo comienza a hablar. Ahora, antes de que lleguemos a lo que él dice, quiero que veamos esto, por que es de enorme importancia. Pablo está predicando. El va y habla con todo el mundo que él pueda encontrar en Atenas. Eso termina llevándolo al lugar más alto en Atenas. ¿Por qué lo hace? ¿Cuál es su motivación ultima?

Lo que quiero decirles es que su motivación no era el deber “bueno, se supone que debo predicar. Eso es lo que estoy supuesto a hacer, así que eso es lo que haré”, aún la obediencia es una buena motivación, pero eso no es lo que lo conduce. Su motivación tampoco es compasión. El texto no dice “Pablo vio la necesidad en todas estas personas a su alrededor” Había personas necesitadas en todo su alrededor, todos eso idólatras en todas partes, que no conocían a Cristo, que estaban separados de Dios, muertos en su pecado y oscurecidas sus mentes. El ve todo eso, pero eso no es lo que lo motiva.

La motivación última de Pablo era el celo y el entusiasmo por la gloria de Dios. En Isaías 42:8, cuando Dios dice “Yo Jehová; este es mi nombre; y a otro no daré mi gloria, ni mi alabanza a esculturas.” Ese es el celo de Dios; Dios tiene celo también por Su gloria y por Su alabanza. Lo que motivo a Pablo, su motivación última, fue la gloria de Dios. Quiero hacer una pausa aquí, aún pastoralmente, para poner eso antes que nosotros, por que para nosotros, ir a nuestra ciudad en esta semana no conlleva ver 30,000 ídolos por toda la ciudad, pero eso no significa que no estamos rodeados de idolatría.

Simplemente estamos ciegos a nuestra propia idolatría, tanto en la comunidad a nuestro alrededor como, temo, en nuestras propias vidas. Hay ídolos en todas partes en esta comunidad. Dinero, sexo, posición, poder, orgullo, entretenimiento, deportes y recreación, equipos, posesiones y en todo nuestro entorno nuestros afectos son halados y nuestra devoción es alejada del único que es digno de todo el afecto y toda la devoción. Así que, en nuestras propias vidas seamos celosos para guardar nuestros afectos y nuestra devoción. Peleemos contra todo y cualquier cosa que se meta en nuestras vidas y que pueda robar el afecto y la devoción por Él, y que cuando veamos personas en nuestra ciudad, que ellos y las naciones vean celo.

Okay, necesitamos hacer discípulos. Quiero poner esto ante nosotros. Si, necesitamos hacer discípulos, es una orden. Aquí en esta ciudad y alrededor del mundo hay más de 6,000 grupos de personas que no han sido alcanzados por el evangelio. Quiero que sepamos estas cosas, pero lo que nos conducirá no es la compasión por los necesitados u obediencia al deber y a la orden. Lo que nos conducirá serán los corazones que estén aferrados al celo por la gloria de Dios.

Eso es lo que condujo a Pablo, lo que es evidente cuando el tiene la oportunidad de hablar frente a ellos. Escuchen lo que dice “Varones atenienses” verso 22 “en todo observo que sois muy religiosos; porque pasando y mirando vuestros santuarios, hallé también un altar en el cual estaba esta inscripción: Al Dios No Conocido. Al que vosotros adoráis, pues, sin conocerle, es a quien yo os anuncio.”

Aquí está en el verso 24 “El Dios que hizo el mundo y todas las cosas que en él hay, siendo Señor del cielo y de la tierra, no habita en templos hechos por manos humanas”. Él es el creador del universo. Aquí es donde Pablo empieza. Pablo comienza diciendo “¿Piensan que pueden hacer un dios? La realidad es que Dios los hizo a ustedes y todas las cosas en su alrededor. Aquí es donde comienza el evangelio. El evangelio comienza con Dios.

“ni es honrado por manos de hombres, como si necesitase de algo; pues él es quien da a todos vida y aliento y todas las cosas” Él es el Sustentador de la vida. Dios no depende de ti. Tú dependes de Dios, Creador del universo, el Sustentador de la vida. Él es el Gobernador de las naciones e hizo de un hombre a todas las naciones. “Y de una sangre ha hecho todo el linaje de los hombres, para que habiten sobre toda la faz de la tierra; y les ha prefijado el orden de los tiempos, y los límites de su habitación” Él es el gobernante de las naciones y Salvador del necesitado.

El verso 27 dice: “para que busquen a Dios, si en alguna manera, palpando, puedan hallarle, aunque ciertamente no está lejos de cada uno de nosotros” El Creador del universo, Sustentador de la vida, Gobernador de las naciones y no está lejos de ti. Él es el Padre de cada uno de nosotros. “Porque en él vivimos, y nos movemos, y somos; como algunos de vuestros propios poetas también han dicho: Porque linaje suyo somos”.

Él es el padre de cada uno de nosotros y es el Rey sobre cada uno de nosotros. “Siendo, pues, linaje de Dios, no debemos pensar que la Divinidad sea semejante a oro, o plata, o piedra, escultura de arte y de imaginación de hombres” Él es Rey sobre ti. Tú no tienes autoridad sobre Él, Él tiene autoridad sobre ti, llevando a la realidad que Él es el Juez del mundo.

El verso 30 dice “Pero Dios, habiendo pasado por alto los tiempos de esta ignorancia, ahora manda a todos los hombres en todo lugar, que se arrepientan; por cuanto ha establecido un día en el cual juzgará al mundo con justicia, por aquel varón a quien designó, dando fe a todos con haberle levantado de los muertos.” “Dios” dice Pablo “juzgará a cada uno de ustedes por Jesús quien se ha levantado de los muertos” Esa no era la cosa mas popular que él podía decir.

El verso 32 dice “Pero cuando oyeron lo de la resurrección de los muertos, unos se burlaban, y otros decían: Ya te oiremos acerca de esto otra vez. Y así Pablo salió de en medio de ellos. Mas algunos creyeron, juntándose con él; entre los cuales estaba Dionisio el areopagita, una mujer llamada Dámaris, y otros con ellos.”

Que este himno resuene de nuestros labios, a lo largo de esta habitación, de esta ciudad y entre todas las naciones. Dios es el Creador, el Sustentador y el Rey. Él es el Padre de cada uno de nosotros, Rey sobre cada uno de nosotros y el juzgará al mundo. Esto es lo que proclamamos. Cuando vemos idolatría, añoramos que la alabanza a Dios sea conocida.
En medio de la inmoralidad, creemos en el poder del evangelio.

Finalmente, en medio de la inmoralidad, creemos en el poder del evangelio. Así que, Pablo va después a Corintios. “Después de estas cosas, Pablo salió de Atenas y fue a Corinto” Un centro metropolitano comercial, “Y halló a un judío llamado Aquila, natural del Ponto, recién venido de Italia con Priscila su mujer, por cuanto Claudio había mandado que todos los judíos saliesen de Roma. Fue a ellos, y como era del mismo oficio, se quedó con ellos, y trabajaban juntos, pues el oficio de ellos era hacer tiendas. Y discutía en la sinagoga todos los días de reposo, y persuadía a judíos y a griegos.”

Pausen aquí por un Segundo. Corinto: una enorme ciudad cosmopolita, multicultural, ciudad puerto, llena de inmoralidad. Afrodita era la diosa del amor, y el templo de Afrodita estaba en una colina por sobre toda la ciudad. Había mil prostitutas del templo que vivían allí y que cada noche bajaban a la ciudad a ejercer su oficio. Ahora, ven porqué cuando leemos 1era y 2da de Corintios Pablo dice “Huyan de la inmoralidad sexual”1. “Salid de en medio de ellos, y apartaos”2 una y otra vez. “su cuerpo es templo del Espíritu Santo”3 11era de Corintios 6:18 2 2da de Corintios 6:17.

Así que, estaba llena de rampante inmoralidad y no era una ciudad en la que era fácil estar. La realidad es, piénsalo, cuando se piensa en mega ciudades en nuestros días, y nuestra ciudad obviamente es de buen tamaño, pero cuando vas a Nueva York, cuando vas a Los Ángeles, cuando vas a Mumbai, cuando vas a Delhi, cuando vas a ciudad México, Londres, estas ciudades están llenas de enormes masas de personas, llenas de inmoralidad, y comienzas a pensar “¿Que puedo hacer?” es abrumador.

Pablo está en esa ciudad y cuando comienza a predicar, escuchen lo que pasa. “Cuando Silas y Timoteo llegaron de Macedonia, Pablo se dedicó exclusivamente a la predicación, testificándoles a los judíos que Jesús era el Mesías. Pero cuando los judíos se opusieron a Pablo y lo insultaron, éste se sacudió la ropa en señal de protesta y les dijo: « ¡Caiga la sangre de ustedes sobre su propia cabeza! Estoy libre de responsabilidad. De ahora en adelante me dirigiré a los gentiles.»”4 Cuando dice “se opusieron a Pablo y lo insultaron” Literalmente, la imagen es que ellos iniciaron una abierta batalla contra ellos.

Ahora, piénsenlo. Pónganse en los zapatos de Pablo. Tienes que cansarte en algún punto de esta rutina. Estamos a punto de ver la lucha en Corintios y él preguntándose sí debiera aun quedarse, y escuchen lo que pasó. El verso 7 dice “Entonces Pablo salió de la sinagoga y se fue a la casa de un tal Ticio Justo, que adoraba a Dios y que vivía al lado de la sinagoga. Crispo, el jefe de la sinagoga, creyó en el Señor con toda su familia. También creyeron y fueron bautizados muchos de los corintios que oyeron a Pablo”.

Escuchen esto “Una noche el Señor le dijo a Pablo en una visión: «No tengas miedo; sigue hablando y no te calles, pues estoy contigo. Aunque te ataquen, no voy a dejar que nadie te haga daño, porque tengo mucha gente en esta ciudad.» Así que Pablo se quedó allí un año y medio” un año y medio, “enseñando entre el pueblo la palabra de Dios”

Ahora, este es el asunto, y aquí es donde quiero darle un cierre a todo. Se que debiéramos saber que vivir con un celo unidireccional por la gloria de Dios no hará las cosas fáciles en esta vida; no te hará las cosas fáciles en el trabajo; no les hará las cosas fáciles en algunas de sus casas; no les hará las cosas fáciles en sus comunidades y ciertamente no les hará las cosas fáciles cuando vayan a diferentes contextos en el mundo. Ahora, no tenemos una visión de Cristo para nosotros. Quizás tengas una esta noche, maravilloso, pero sabemos que lo que estamos viendo aquí refleja verdades que Dios ha dado a Su pueblo a lo largo tanto de todo el Antiguo Testamento como del Nuevo Testamento.

Así que quiero animarles con esto. El miércoles pasado, yo predicaba en otra iglesia en nuestra área por una conferencia sobre misiones. Nos asociamos en el evangelio con esta iglesia, y yo estaba en una conferencia de misiones después, un hombre me sacó a un lado. Él vive en Europa del Este, donde está tratando de proclamar el evangelio. Él está en un área dura y fría de Europa del Este y él me abordó y me dijo “Sólo quiero agradecerle, y quiero agradecer a su iglesia por hacer que la Palabra y las enseñanzas de la palabra esté disponible por varias vías, porque estamos en una situación donde no hay cristianos en nuestro alrededor y estamos hambrientos y necesitamos la Palabra y estamos siendo alimentados por la iglesia diariamente. La Palabra nos provee una dieta constante a mi vida y la vida de mi familia, Así que, sólo quería decir gracias”

He hablado con diferentes personas que están en el mismo contexto. Sí puedo, quisiera animarles, si, a las personas aquí, pero también quisiera dar ánimo, quizás a un hermano o hermana quien pudiera estar viviendo en algún otro contexto en el mundo ahora mismo que
3 1era de Corintios 6:18 4 Hechos 18:5 están escuchando esto y se están preguntando sí deben o no quedarse. Se podrían estar preguntando qué hacer en medio de corazones oscuros y fríos que le rodean por todas partes y situaciones difíciles y abrumadoras alrededor. Así que quiero decirles esto. Esto es lo que vemos en todas las Escrituras.

Quiero que recordemos, primero que no tenemos miedo. No tengan miedo. Este fue el mensaje de Dios a Su pueblo a lo largo de todo el Antiguo Testamento y Nuevo Testamento. No tengan miedo. Dios no nos ha dado un espíritu de timidez o miedo, sino un espíritu de poder. Sé que pensamos “Me siento muy tímido cuando voy a compartir el evangelio en el trabajo. Me siento muy tímido de otras personas en otros contextos del mundo. Me siento muy tímido cuando estoy en la cultura musulmana, en la cultura Hindú. Me siento muy tímido. “¿Cómo no temer?” Eso nos lleva a nuestro segundo recordatorio: no tenemos miedo porque no estamos solos.

“Estoy contigo,” Jesús dice. Él no sólo se lo dice a Pablo en una visión, Él nos dice a nosotros “estoy contigo para siempre hasta el fin de los tiempos” Él está contigo, hijo de Dios. Tú nunca, nunca estarás solo. Pablo estaba en medio de la inmoral Corinto, donde la inmoralidad estaba en todas partes, y Jesús le dice “Estoy aquí contigo”. Hijo de Dios, aquí y en otros contextos alrededor del mundo, no estás solo. No estás nunca, nunca solo.

Él está contigo, así que no tengas miedo. No tenemos miedo y no estamos solos. Como resultado de eso, no estaremos silentes. Sigue hablando. Sigue hablando aunque parezca que nadie está escuchando. Cuando parece que nadie te escucha en casa, o que nadie te escucha en el trabajo, que nadie escucha en otros contextos cuando estás ministrando en esa ciudad, cuando parece que nadie escucha en ese país en el Medio Oriente o África del norte o el este de Europa o el centro o este de Asia, cuando parece que nadie alrededor escucha, como que el asunto no va a ninguna parte, sigue hablando. No estés silente, Dios abrirá los corazones.

Este evangelio es bueno, es poderoso. Él abrirá los corazones a través de la proclamación de esta Palabra. Él lo ha hecho por 2,000 años y no se detendrá ahora. Ellos trataron de detenerlo, esos judíos celosos trataron de detenerlo y se levantaron y llevaron a Pablo ante el Concilio Romano y dijeron “Concilio Romano, detengan a Pablo de predicar”. Pero el Concilio Romano dijo “No, de hecho, vamos a legalizar que Pablo siga predicando” así que les salió el tiro por la culata, y en consecuencia, el evangelio sigue adelante.

Dios llevará este evangelio adelante. No estén silentes. Nosotros no estaremos silentes, y como resultado, no seremos detenidos, y se harán discípulos e iglesias serán implantadas. Así que, aquí está Pablo en su segundo viaje misionero. Llegamos a Hechos 18:22. El vuelve a Antioquia, su base de operaciones y en su legado dejó un montón de discípulos y de iglesias, y ese es el objetivo. Nuestro legado, el legado de tu vida y nuestra vida, el legado de nuestra iglesia como una familia de fe, debe ser vivir con un celo exclusivo por la gloria de Dios y hacer discípulos y plantar iglesias y no seremos detenidos.