El deseo de querer más y buscar satisfacción en las cosas del mundo siempre ha sido una tentación para el pueblo de Dios. ¿Cuánto más cuando nuestra cultura nos enseña a vivir como consumidores y creer que merecemos que se cumplan nuestros deseos? Lamentablemente, como seguidores de Cristo, podemos caer fácilmente en estas mentiras. En este mensaje de 1 Timoteo 6:3–10, David Platt nos anima a considerar el dinero y las posesiones a la luz del Evangelio y de las urgentes necesidades del mundo. En lugar de ser engañados por las riquezas mundanas, debemos encontrar nuestro tesoro en Dios mismo.
El Evangelio y el Materialismo – Parte 1
Si tienen una Biblia, y espero que así sea, les voy a invitar a abrirla conmigo en Primera de Timoteo 6. Saquen esas notas que les dieron en su guía de adoración cuando entraron. Todos tenemos puntos ciegos, ¿verdad? Esas áreas de nuestras vidas que pensamos que están bien, pero en realidad, estamos engañados. Es una imagen simple, que se puede ilustrar con el momento en que estamos manejando. Miramos el espejo, y pensamos que está bien que cambiemos de carril y comenzar a movernos hacía ese otro, sin saber que hay un carro justo a tu lado. Te empiezan a tocar la bocina, tu te vuelves abruptamente a tu carril y te preguntas ¿Cómo pude no ver algo tan obvio?, estaba justo a mi lado, ¿Cómo no lo vi?” Eso es un punto ciego.
La semana pasada, hablamos sobre uno de los puntos ciegos más evidentes en la historia de la iglesia cristiana occidental: la esclavitud. Los cristianos se reunían a adorar cada domingo, cantando y estudiando la Biblia, todo, mientras usaban y abusaban de hombres, mujeres y niños como propiedad, como esclavos. De hecho, se creían generosos de obsequiarles a los esclavos una gallina extra en navidad y día de acción de gracias. Da miedo pensar como buenas intenciones, adoración habitual y aún un estudio semanal de la Biblia no previenen del todo la ceguera en nosotros. Hay algo en nuestra naturaleza pecaminosa que elige de manera instintiva ver lo que queremos ver e ignorar lo que queremos ignorar, a menudo, hasta que es muy tarde.
Los puntos ciegos son fáciles de ver en retrospectiva pero difíciles de ver en el presente. Así que reflexionamos en la esclavitud la semana pasada, y pensamos en como nuestros hermanos y hermanas que estuvieron antes de nosotros en comunidades como esta no se daban cuenta. Su ejemplo nos lleva, creo, a hacernos la siguiente pregunta ¿Hay puntos ciegos, entonces, en nuestras vidas hoy?, ¿habrá áreas donde la palabra de Dios es clara, pero no lo estamos viendo?” Pienso que si las hay.
Abre Tus Ojos
Ve la urgente necesidad espiritual en el mundo. Abre tus ojos. Esto no es algo nuevo, lo que estamos hablando, sino que esto es donde en 1era de Timoteo 6, creo, brilla una luz para los puntos ciegos que estamos propensos a olvidar y que están en nuestras vidas, en nuestras iglesias y en nuestras culturas. Abre tus ojos y ve la urgente necesidad espiritual en el mundo.
Hay 6.8 billones de personas en el mundo. La mayoría de los estimados liberales calculan en el mundo con una tercera parte de cristianos.
En muchos casos hay personas que alegan ser cristianos como un medio de identificarse política o socialmente, pero aún si asumimos todas esas personas como verdaderos seguidores de Cristo, eso nos dejaría 4.5 billones de personas en el mundo, en este momento, que no tienen a Cristo y en el camino que lleva al infierno eterno. Cerca de dos billones de ellos no tienen acceso al evangelio ahora mismo que estamos cantando y adorando. Hay una necesidad espiritual urgente.
He aquí un ejemplo. Estaba charlando con esta persona la semana pasada, el vive en Behar, india, hogar de los más pobres entre los pobres y de algunas de las personas menos evangelizadas del planeta. ¡Es un lugar tan desolado! Hay sufrimiento físico y la pobreza espiritual es masiva. Menos del .01 por ciento son evangélicos. La tasa de mortandad en esta región es de 5,000 personas diariamente, lo que significa que cada día, alrededor de 4,950 personas caen al infierno eterno. La mayoría, no han oído nunca del evangelio. Así que vean la urgente necesidad espiritual en el mundo
Vean la Urgente Necesidad Física en el Mundo
Sientan, por un minuto, la urgente necesidad espiritual en el mundo, y vean la urgente necesidad física en el mundo. Hoy, más de un billón de personas nacen y mueren en la más desesperada pobreza, con menos de un dólar por día. Cerca de otros dos billones viven con menos de dos dólares al día. Eso es cerca de la mitad del mundo, luchando por encontrar comida, agua, refugio y cuidado médico con la misma cantidad de dinero que tú o yo gastaríamos en una soda para el almuerzo. Más de 20,000 niños morirán hoy solamente de hambre o de enfermedades prevenibles.
He aquí un ejemplo específico. Consideren a Somalia en la actualidad. Más de 750,000 personas ahora mismo, en el día de hoy en Somalia, están al borde de morir de hambre y podrían no sobrevivir los próximos dos meses. La mayoría de ellos no tienen a Cristo. No sólo son pobres, sino que están desfavorecidos. Millones empobrecidos viviendo y muriendo en la oscuridad relativa, mientras nosotros los ignoramos de manera confortable desde nuestra afluencia. Seamos honestos, nosotros vivimos como que ellos no existen.
Date cuenta de la extraordinaria oportunidad de la iglesia en favor del Reino de Dios. Abre tus ojos y ve la urgente necesidad espiritual y la urgente necesidad física. Véanla, siéntanla y luego dense cuenta de la extraordinaria oportunidad que tiene la iglesia en favor del Reino de Dios. Nosotros, en la otra mano, somos ricos. Somos ricos. Puede que ustedes no siempre se sientan ricos, pero tenemos agua, comida y ropa. Sí tu ganas US$25,000 dólares al año, estas entre el 10% de las personas más ricas del mundo. Dios nos ha dado tanto, y sin embargo, ¿que estamos haciendo con lo que Él nos ha dado? Los cristianos en Norteamérica dan un promedio de 2.5% de sus ingresos a la iglesia, lo cual creo que es un estimado generoso, pero trabajemos con él.
Entonces, las iglesias en Norteamérica dan un promedio de 2% de su dinero a los necesitados del mundo, a las misiones. Así que si lo sumas todo, eso significa que de cada $100.00 dólares que un cristiano norteamericano gana, damos cinco centavos al resto del mundo. ¡Cinco centavos! Eso se parece a la gallina para los esclavos en navidad o acción de gracias.
Me pregunto, si Cristo no ha venido en ese entonces, si los seguidores de Cristo dentro de cientos de años miraran a los cristianos de hoy y se preguntarán “¿Cómo podían ellos vivir en tal afluencia mientras millones morían de inanición, muchos de los cuales ni siquiera habían oído de Cristo?”, ¿Cómo podían llenar sus iglesias de más cosas, más programas y más confort para sus hijos y sus iglesias mientras sus hermanos y hermanas del otro lado del mundo morían de cuerpos desnutridos y cerebros deformados?
¿Cómo podían vivir como que cuatro billones de personas no existían? ¿Qué hubiese pasado sí ellos se hubiesen dado cuenta de todo lo que Dios les había dado? ¿De que hubiesen podido ser parte en el mundo si hubiesen verdaderamente, de todo corazón, denodadamente, contra-culturalmente dado sus vidas, sus familias y sus posesiones por la difusión del evangelio y la gloria de Dios en un mundo de urgente necesidad física y espiritual?”
Oh, ahí es que quiero llegar. Ahí es donde quiero llevar a mi familia y quiero ser parte de guiar esta iglesia a experimentar la extraordinaria oportunidad que tiene la iglesia en favor del Reino de Dios, que Él nos ha dado para su gloria en el mundo. No importa lo que nos cueste, y quiero que lleguemos ahí por dos razones.
Una, porque estoy convencido por la palabra de Dios de que cuando damos de manera extraordinaria de nuestras vidas y, cuando damos extraordinariamente de nuestras posesiones, no sólo aportamos para que otras personas vivan espiritual y físicamente, sino que encontramos el verdadero gozo y deleite. Gozo y deleite que nunca terminan. La segunda razón por la que quiero que experimentemos esta extraordinaria oportunidad es porque si no damos nuestras vidas de manera extraordinaria, y si no damos de nuestras posesiones de manera extraordinaria para Su Gloria en el mundo, entonces las personas seguirán muriendo física y espiritualmente. Si no damos extraordinariamente de nuestras vidas y posesiones, entonces nos encontraremos como personas en un camino que lleva a la ruina y a la destrucción. Destrucción que nunca acabará. Déjenme mostrársela en 1era de Timoteo 6.
Ahora, esta es la situación, yo inicio con estadísticas, inicio llevándoles esta visión del mundo, porque debemos darnos cuenta, mientras estamos aquí mirando esta Palabra en esta mañana, que el mundo no se ve como nuestras reuniones de la iglesia. Necesitamos que nos recuerden eso. Hay más cristianos sentados aquí en la sección frontal de este auditorio que los que hay en todo el norte de Yemen. Hay ocho millones de personas en el norte de Yemen; hay más cristianos aquí mismo. Así que tenemos que darnos cuenta de lo que Dios nos ha dado aquí. La realidad es que si lo que está pasando con los niños alrededor del mundo estuviese pasando en nuestra comunidad, cada niño y niña menor de 18 años estaría muerto para el martes.
Así que necesitamos ver el mundo, pero más importante que eso, necesitamos ver la Palabra, porque necesitamos ver como la palabra batalla con el materialismo, no con estadísticas o historias, sino con la verdad de Cristo. Esto es clave porque las estadísticas y las historias, aunque útiles, no van a cambiarnos. Sólo Cristo va a cambiarnos y oro para que El lo haga, de adentro hacia afuera.
Cuiden sus Corazones
Abran sus ojos y cuiden su corazón. 1era de Timoteo 6:3-10: “Si, alguno enseña otra cosa, y no se conforma a las sanas palabras de nuestro Señor Jesucristo, y a la doctrina que es conforme a la piedad, está envanecido, nada sabe, y delira acerca de cuestiones y contiendas de palabras, de las cuales nacen envidias, pleitos, blasfemias, malas sospechas, disputas necias de hombres corruptos de entendimiento y privados de la verdad, que toman la piedad como fuente de ganancia; apártate de los tales.
Pero gran ganancia es la piedad acompañada de contentamiento; porque nada hemos traído a este mundo, y sin duda nada podremos sacar. Así que, teniendo sustento y abrigo, estemos contentos con esto. Porque los que quieren enriquecerse caen en tentación y lazo, y en muchas codicias necias y dañosas, que hunden a los hombres en destrucción y perdición; porque raíz de todos los males es el amor al dinero, el cual codiciando algunos, se extraviaron de la fe, y fueron traspasados de muchos dolores.”
Okey, así que Pablo aquí continúa hablándole a Timoteo sobre los falsos maestros en Éfeso, y notaran que usa la palabra “codiciar” en forma negativa. La usa en el verso 10: “porque raíz de todos los males es el amor al dinero, el cual codiciando algunos, se extraviaron de la fe, y fueron traspasados de muchos dolores” Así que basado en esta codicia malsana, este deseo malsano del que Pablo habla aquí, quiero instarles a que cuidemos nuestro corazón en dos formas.
No Codicies la División Espiritual
Uno, la Biblia dice que no debes codiciar división espiritual, así que Pablo habla aquí sobre personas que están enseñando diferentes doctrinas que llevan a la división de la iglesia, y nos advierte diciendo que los falsos maestros se alimentan de ignorancia y arrogancia. En el verso 4, el falso maestro está envanecido y nada sabe. El es arrogante e ignorante. No es una buena combinación. Es arrogante porque presenta sus enseñanzas como superiores a la Palabra de Dios y es ignorante porque sus enseñanzas no son verdaderas.
Falsos maestros, dice Pablo, dirigidos por la ignorancia y la arrogancia y tales enseñanzas resultan en controversia y conflicto. Controversia en la iglesia y conflicto entre cristianos. Pablo menciona cinco diferentes efectos de los falsos maestros en la iglesia “envidias, pleitos, blasfemias, malas sospechas y disputas necias” Las cuales llevan a mentes sin Dios y vidas sin Dios.
Así que en el primer par de versos, Pablo está urgiendo a Timoteo, tal como lo vimos hacer en el capítulo 1, con una simple exhortación: conténtate en el evangelio. Aférrate, dice en el verso 3, a “sanas palabras de nuestro Señor Jesucristo, y a la doctrina que es conforme a la piedad” Pablo dice, “No hay necesidad de buscar algo más. Quédate aquí. Pasa tu vida aquí. Satura la iglesia en el evangelio de Jesucristo. Satúrense a sí mismos con Su vida, Su muerte, Su resurrección, Sus mandamientos, Sus enseñanzas y Su Palabra. Aférrate al evangelio de Jesucristo y a este evangelio” dice Pablo “producirá mentes y vidas de acuerdo a Dios. No hay necesidad de codiciar nada más. Conténtate en el evangelio”.
Así que, esa es la primera advertencia y exhortación de Pablo, y nos lleva directamente a la segunda. Vean la relación aquí entre lo que estos falsos maestros estaban enseñando y cómo estaban viviendo. El verso cinco habla de “disputas necias de hombres corruptos de entendimiento y privados de la verdad, que toman la piedad como fuente de ganancia” La palabra “ganancia” aquí está cargada con implicaciones financieras. La búsqueda de Dios como un medio de ganancia financiera. Estos falsos maestros pensaban y enseñaban que Dios es un medio de ganancia financiera. Vivir para Dios significa, Dios mas ganancia financiera. Es la versión del primer siglo del evangelio de la prosperidad, y un espejo del primer siglo de nuestros propios corazones. Viviendo para Dios y para las cosas. Dios como un medio de ganancia financiera.
No Codicies Posesiones Materiales
Así que, Pablo nos advierte sobre el segundo anhelo, uno peligroso y destructivo. El y la Biblia dicen claramente “No codicies posesiones materiales”. Quiero ser claro aquí. Justo como Pablo es claro después en este pasaje en el verso 17, cuando dice que Dios “nos da todas las cosas en abundancia para que las disfrutemos” En otras palabras, las posesiones no son malas en sí mismas. Hablaremos sobre eso la próxima semana. Dios nos da abundantemente cosas para disfrutar, así que el dinero y las posesiones no son malos. En el verso 10, Pablo no dice “raíz de todos los males es el dinero” ¿Qué dice? Dice “raíz de todos los males es el amor al dinero”. El no dice que las riquezas son malas que el deseo de riquezas, que codiciar el dinero, codiciar las posesiones, desear las cosas, querer el próximo gadget, desear una casa más hermosa, mejores ropas, querer más, es peligroso. Pablo dice “no codicies las posesiones materiales”.
Esta es la advertencia. No tenemos tiempo de ir a la cita, pero es muy similar a lo que Jesús dijo en Mateo 6:17-21, cuando dijo “No os hagáis tesoros en la tierra, donde la polilla y el orín corrompen, y donde ladrones minan y hurtan, sino haceos tesoros en el cielo, donde ni la polilla ni el orín corrompen, y donde ladrones no minan ni hurtan. Porque donde esté vuestro tesoro, allí estará también vuestro corazón”.
Esa es una afirmación que da miedo. ¿Escucharon eso? Donde está tu dinero es donde está tu corazón. Así que, escucha esto: tu dinero es un indicador de tu corazón. Esa es una realidad que asusta en esta cultura ¿o no? Tu chequera refleja tu corazón. La cantidad de dinero que inviertes es cosas es un reflejo de cuanto de tu corazón hay en ellas. Tú dices “bueno, yo no amo el dinero”. La Biblia te señala a buscar en tu propio corazón. Obviamente, tú no tienes que decir que amas el dinero. No quiero decir que amo el dinero, pero cuando miro a donde yo gasto mi dinero, estoy mostrando donde está mi corazón. “Donde esté vuestro tesoro, allí estará también vuestro corazón”.
Lo que Jesús dice en Mateo 6 y lo que Pablo dice en 1 de Timoteo 6 es tan extraño para nosotros, porque estamos tan programados para pensar en el dinero siempre como una bendición, y lo es. El dinero es una bendición en muchas buenas maneras. Sin embargo, las escrituras, la Palabra de Dios, nos enseñan que el dinero también puede ser una barrera significativa en tu relación con Dios y una barrera para que tú experimentes la vida eterna. Pablo sabe esto, así que da tres advertencias cuando se trata de materialismo. Oh, Dios, danos gracia para escuchar, creer y poner atención a estas advertencias.
Somos personas materialistas. Yo soy una persona materialista. Nos olvidamos de esto. Yo he olvidado esto. Escuchen, hermanos y hermanas, estamos inmersos en un mundo materialista.
El materialismo es engañoso. Volveremos a la exhortación de Pablo en un minuto, pero escuchen el lenguaje de la advertencia. Miren el verso 9: “Porque los que quieren enriquecerse caen en tentación y lazo…”. Es una trampa, dice Pablo. El materialismo, el deseo por cosas, dinero, posesiones, cosas más grandes y mejores, es una trampa; es un lazo. El materialismo es como beber agua de mar. Estas sediento, hay mucha agua en el mar, así que beberé un poco de ella.
El agua de mar, por su alta concentración de sal, mientras más tomes, mas sediento estarás y más necesitará tu cuerpo agua pura. Uno no piensa “esto será malo para mí”, uno simplemente la bebe. Uno piensa que es agua y que será buena para ti, y la bebes, pero mientras más lo haces, más rápido te deshidratas. Si sigues bebiéndola, tendrás dolores de cabeza y resequedad bucal y bajará tu presión arterial, después se acelerará tu corazón y eventualmente te pondrás delirante, perderás el conocimiento y sí sigues bebiéndola, eventualmente morirás.
Es asombroso. Uno ve agua y piensa “eso es lo que quiero”, sin embargo, a medida que la bebes, aunque no lo sepas, estas matándote. Así son el dinero y las posesiones. Las ves y dices “lo quiero”, sin embargo, no te das cuenta de que es un lazo y mientras más te consientas con él, más matas tu alma. El amor por las cosas, el dinero y las posesiones, es engañoso.
El materialismo es peligroso. Te lleva, dice Pablo, a mucho deseos sin sentido y dañinos. El materialismo te pone en un camino, un sendero, que está forjado con peligro. Considera hacía donde el materialismo, el deseo por cosas te lleva. La lista es larga y te deja sin aliento. Puede seguir casi indefinidamente: egoísmo, engaño, fraude, perjurio, robo, envidia, peleas, odio, violencia y homicidio. ¿Cuantas dificultades maritales giran en torno al dinero? La pornografía está motivada por él. Tenemos la explotación y el chantaje de los débiles. Tenemos la opresión de los pobres, inmoralidad, injusticia. El materialismo es un campo donde germinan miles y miles de otros pecados. ¿Somos tú y yo tan tontos de pensar que somos inmunes a estas cosas?
Vean las advertencias a lo largo de las Escrituras. ¿Recuerdan Josué 7? Acán ve las posesiones. El ve unas cuantas cosas que quiere conservar del botín de Guerra, así que se las queda y las esconde. El y toda su familia mueren como resultado. El rey Salomón estaba arruinado, tal como muchos otros reyes del Antiguo Testamento, por el deseo al dinero y las posesiones. Ellos estaban arruinados. No es sólo en el Antiguo Testamento, sino también en el Nuevo Testamento. Jesús dice en Mateo 10 que es difícil que las personas ricas entren al reino de los cielos.
Jesús dijo en Lucas 6 “¡Ay de vosotros, ricos! porque ya tenéis vuestro consuelo. ¡Ay de vosotros, los que ahora estáis saciados! porque tendréis hambre.” En Santiago 5: “¡Vamos ahora, ricos! Llorad y aullad por las miserias que os vendrán. Vuestras riquezas están podridas, y vuestras ropas están comidas de polilla. Vuestro oro y plata están enmohecidos; y su moho testificará contra vosotros, y devorará del todo vuestras carnes como fuego. Habéis acumulado tesoros para los días postreros.”. Ustedes han vivido en la tierra en lujo y auto indulgencia.
Está a lo largo de toda la Escritura. El materialismo es peligroso. No sólo ahora, pero para siempre. El materialismo es engaño y el materialismo nos condena. Las personas que “quieren enriquecerse caen en tentación y lazo, y en muchas codicias necias y dañosas, que hunden a los hombres en destrucción y perdición”. Esto es serio, esto es extremadamente serio. Eso es sólo el deseo de tener riquezas. ¿Qué tal aquellos que ya las tienen y aquellos cuyos corazones están atados a esas riquezas? El materialismo nos hace caer a ti y a mí en la ruina y la destrucción. La palabra es, literalmente caer, te hundes, te arrastra, te sumerge al fondo y te ahoga. El amor por las cosas, el deseo de tener más, te ahogarán para siempre.
Sabemos que estamos hablando de la eternidad, basados en el verso siete, donde Pablo habla de cómo no te vas a llevar nada de este mundo, es decir, que cuando esta vida se acabe, no va a importar nada lo mucho que hayas tenido. Las posesiones siempre te decepcionarán en el momento más importante de tu vida, cuando vayas a morir. Ellos no harán nada por ti entonces. Es por eso que Pablo dice en el verso 12, aférrate a la vida eterna en contraste a la muerte eterna.
Así que escuchen esto. La Biblia habla así. Yo soy, como su pastor, hablando así, no sólo porque hay necesidades apremiantes en el mundo. La Biblia habla así, y yo estoy hablando así, en esta cultura, en este recinto, porque estoy preocupado por sus almas. No estoy siendo demasiado dramático al decir que, literalmente, la forma en que manejas el dinero te hará o te romperá eternamente. El dinero mata. El dinero destruye. El dinero es peligroso y te condena. Tu pones tu corazón en las cosas y en las posesiones y la riqueza de esta comunidad, y eso te destruirá y estarás todo el tiempo pensando que estás bien. Así que, quiero llamarles a correr. Corran de cualquier cosa cercana al amor al dinero, corro del amor del dinero al amor por Dios, y esa es la exhortación. El materialismo es engañoso, peligroso, te condena.
La exhortación: ¡estén contentos en Dios! ¡Búsqueda de Dios con contentamiento es ganancia, gran ganancia! Oh, que buena frase es esa. Pablo escribe otra vez, casi puedo imaginarlo escribiendo “no, no es solo ganancia, es una gran ganancia”. Pablo no dice “cristiano, deja de vivir por la ganancia, se miserable”, el dice “cristianos, empiecen a vivir por la verdadera ganancia”. Él es ganancia. “Vivan”, Pablo dice “por el verdadero beneficio, beneficio en Dios. No se conformen con el amor por el dinero, estén satisfechos en el amor de Dios”.
Esa es una manera muy diferente de vivir en esta cultura. Dice “santidad con contentamiento”, no santidad con codicia por algo más que la santidad con descanso, gozo, deleite y contentamiento en Dios. Pues en Dios, eres libre de codiciar más cosas de este mundo. Tienes a Dios. ¿No eso lo que Pablo dice en Filipenses 4? “he aprendido a contentarme, cualquiera que sea mi situación.”, este es el secreto: “todo lo puedo en Cristo que me fortalece”. No importa lo que yo tenga, tengo a Cristo; tengo todo lo que quiero, todo lo que necesito.
Pablo dice en filipenses 4:19, “Mi Dios, pues, suplirá todo lo que os falta conforme a sus riquezas en gloria en Cristo Jesús.”. ¿Por qué necesitamos vivir para las riquezas en Birmingham, cristianos, cuando tienes riquezas y glorias en Cristo Jesús? No tiene sentido. Cuando tú crees que Dios es ganancia, entonces vives muy diferente en el mundo. Se vive simplemente.
Esa es la exhortación de Pablo. Verso 8 “Si tenemos comida y ropa, con eso estaremos contentos. Pablo dijo que estaría contento con lo básico. Eso es todo. Las necesidades están cubiertas. Cristianos, Pablo dice, pueden y deben estar contentos con las necesidades simples de la vida. En una cultura de acumulación, construida en tener mas y mas, siempre consumiendo, siempre buscando la próxima transacción, pendientes de la próxima oferta, decimos “no necesitamos más y no queremos más”.
No se pierdan eso. Piensen en esto. ¿Dios te ama? Si. ¿Está Dios comprometido con proveer para ti? Si. Así que cuando vemos cosas como estas en la Biblia, estas cosas no están escritas para hacernos miserables. Están escritas para hacernos felices. Dios quiere que seamos felices y Él sabe que nuestra felicidad se encuentra en Él. Así que nos llama a alejarnos de las cosas, porque no nos harán felices; el materialismo es engañoso, peligroso y te condena. Él es deleite. ¿Le creemos? ¿De verdad le creemos? ¿De verdad confiamos en que Él es nuestro contentamiento? Si es así, entonces iremos contra el grano de esta cultura en esta comunidad. No estoy diciendo que esto sea fácil.
¿Tienes un buen teléfono móvil? No se habla de eso en 1Timoteo 6. Probablemente no esté en el mismo nivel de la comida y la ropa. ¿significa que un buen teléfono móvil es malo? No lo se. No hay, de ninguna forma, alguna medida legalista aquí. Si la hubiera, entonces perdemos todo el sentido. Tu dirías “ok, quiero poner un cotejo en esa parte” El punto es que ustedes miren en su corazón en esta mañana. Que mires tu corazón cada día y digas “Cristo, quiero que seas mi contentamiento, mi satisfacción”. Cuando tengas un deseo por cosas, por más, di “Cristo, tu eres mi suficiencia. Tú eres mi satisfacción. ¿Existe una mejor forma de usar los recursos que tú me has dado? ¿Es esto sabio? ¿Es esto bueno?
Sabes, el mejor tipo de guía que he leído, en una corta afirmación, de hecho, vino de “Compromiso Evangélico de Estilo de Vida Simple” producido por Lausanne Congress en “Evangelismo Mundial” hace treinta años. Decía: “Resolvemos renunciar al desperdicio y oponernos a la extravagancia en la vida personal, vestimenta y casa, viajes y edificios de iglesia. También aceptamos la distinción entre necesidades y lujos, hobbies creativos y símbolos vacíos de estatus, modestia y vanidad, celebraciones ocasionales y la rutina normal y entre el servicio a Dios y la esclavitud a la moda. Donde trazar la línea requiere pensamiento consciente de parte de nosotros junto con los miembros de nuestra familia”.
Yo diría, en el sentido de los miembros de nuestra familia de fe, que nosotros como iglesia, debemos ayudarnos unos a otros en estas áreas. Quiero llamarlos, basados en la autoridad de la Palabra de Dios, a vivir de manera diferente en esta cultura y esta comunidad. Para vivir simplemente. Para vivir contento con lo necesario. Para dejar de lado los lujos porque estamos contentos en Dios. Vivan simplemente.
Den sacrificialmente. Hablaremos mas de esto la semana que viene. Cuando llegamos a los versos del 17-19, escuchen lo que dice Pablo: “A los ricos de este siglo manda que no sean altivos, ni pongan la esperanza en las riquezas, las cuales son inciertas, sino en el Dios vivo, que nos da todas las cosas en abundancia para que las disfrutemos. Que hagan bien, que sean ricos en buenas obras, dadivosos, generosos; atesorando para sí buen fundamento para lo por venir, que echen mano de la vida eterna.”
Vivan simplemente y den sacrificialmente para la gloria de Cristo en un mundo de urgente necesidad espiritual y física. Esta es la enseñanza práctica de 1Timoteo 6 para nosotros, nuestras vidas y nuestras familias en esta iglesia. Es por eso que debemos darnos fuerzas unos a otros como iglesia, en vez de pensar sobre más y más cosas para nosotros mismos en esta iglesia.
En los últimos dos años, para limitar nuestro presupuesto, para establecer una línea, hemos dicho “Ok, veamos si podemos estar contentos con lo básico, para liberar lo más posible, para poder hacer sacrificios para la gloria de Dios en un mundo con una urgente necesidad física y espiritual”. Eso nos llevó a hacer las cosas de manera diferente, y no ha sido siempre fácil; a veces ha sido difícil, pero vale la pena. Guardar nuestros corazones, dar para la gloria de Cristo, hacerlo en nuestras familias. Que digamos “OK, en nuestras familias, en una cultura donde si ganas más dinero elevas tu estándar de vida, sólo di no. No, estaremos contentos. Estableceremos esa línea de contentamiento. Nos liberaremos para dar sacrificialmente y generosamente todo lo que esté por encima de esa línea. No veremos la santidad como un medio de ganancia financiera, sino la santidad como una motivación para la vida sacrificial”.
Sólo una nota al margen de algo que cruzó mi cabeza cuando estaba estudiando y de verdad indagando en mi propio corazón. Yo he sido acusado de escribir un libro o dos sobre ser radical sólo para beneficiarme. Ellos dicen “debe ser bueno vivir el sueño americano mientras se escribe en contra del sueño americano”. Sólo quiero asegurarles, hermanos y hermanas, que cada centavo que está entrando de esos libros está siendo alegremente donado para la gloria de Cristo para las naciones. Quiero que sepan eso.
En una forma similar a la que Pablo diría en el Nuevo Testamento “Quiero que sepan lo que está pasando aquí financieramente, para no ser acusado de mercadear el evangelio”. Nunca quiero ser acusado de mercadear el evangelio, de usar el evangelio de Dios para ganancia financiera. Quiero que sepan que todo está siendo donado y que hay un gozo profundo en dar para la gloria de Cristo.
Así que, vive simplemente. Pablo dice “da sacrificialmente” y prospera eternamente. Se rico en buenas obras, se generoso y dispuesto a compartir y, en el proceso estarás “atesorando para sí buen fundamento para lo por venir, que echen mano de la vida eterna.” Dice Pablo.
Vive simplemente, da con sacrificio, prospera eternamente. Recuerden esta imagen. ¿Recuerdan a John Wesley? Hemos hablado de esto. Hablamos de esto apenas hace un par de años, así que esto es sólo un recordatorio. En 1731, Wesley comenzó a limitar sus gastos para tener más dinero para dar a los pobres. Así que, un año, sus ingresos eran 30 libras y sus gastos eran 28 libras. Así que tenía dos libras para regalar. Al año siguiente su ingreso se duplicó, pero él seguía viviendo con 28 libras, por lo que regaló 32 libras. Tercer año, su ingresos subió a 90 libras, de nuevo, el gastaba para vivir 28 libras, así que regaló 62 libras. Cuarto año, hizo 120 libras, regaló 92 libras a los pobres. Wesley predicaba que los cristianos no debían sólo diezmar, sino que también debían donar todo ingreso adicional una vez que la familia y los acreedores habían sido compensados.
El creía que con el aumento de los ingresos, se debía incrementar el estándar de donaciones, no el estándar de vida. Él comenzó esta práctica en Oxford y la continuó a lo largo de toda su vida. Aún cuando sus ingresos subieron a miles de libras, él vivió de manera simple y regaló sus excedentes rápidamente. En un año, su ingreso fue un poco más de 1,400 libras, él regalo todo menos 30.
El temía acumular riquezas en la tierra, así que el dinero se iba tan pronto como entraba. Cuando él murió en 1791, el único dinero mencionado en su testamento fue el de las monedas sueltas encontradas en su bolsillo y las gavetas de su vestidor. Eso era todo lo que tenía en su testamento. La mayoría de las otras 30,000 libras que se ganó en su vida él las había donado ya. Convierte eso a la tasa de hoy. En un punto él estaba ganando $160,000 al año, pero estaba viviendo como que percibía $20,000 al año. Eso es extraño.
¿Por que vivir así? Se vive así porque la santidad con contentamiento es ganancia. Las personas se burlan de esa idea, pero que tal si Dios te da más, no para que incrementes tu estilo de vida, sino para incrementar tus posibilidades de dar. ¿Qué tal si tuvieras una estrategia para vivir simplemente y dar sacrificialmente? ¿Podría esta comunidad de fe superar y ser libre del peligro mortal de las posesiones materiales que una vez nos cegaron, y podríamos ser parte de divulgar el evangelio en medio de una urgente necesidad física y espiritual en el mundo?
Hay personas que dicen “tienen que tener cuidado con esto. No se vayan muy al extremo”. ¿Qué si las personas empiezan a vender todas sus cosas y empiezan a ser negligentes con las necesidades materiales de su familia?”. Miren a su alrededor, hermanos y hermanas. No estamos en peligro de hacer eso. Cuando esto suceda, nos referiremos a ello. La Palabra evitará que lo hagamos, pero no nos preocupemos demasiado por eso. Si de verdad creen que algún día nos pararemos ante Cristo y lo oiremos decir “tengo esto en contra tuya: diste demasiado para mi gloria. O en vez, debiste quedarte con más para ti mismo”.
Jesús nunca llamo a nadie tonto por dar demasiado y quedarse con muy poco. El sí llamo a alguien tonto por quedarse con demasiado y dar muy poco. Vale la pena. Vale la pena que me permitan darles ánimo con una conversación que tuve la semana pasada con un hermano que vive en Behar, India. Como iglesia le dijimos “Queremos bajar nuestros gastos en nosotros mismos y liberar tantos recursos como sea posible para donarlos”. De Nuevo, estas personas están entre los más pobres de los pobres. Menos de 0.01 porciento de cristianos evangélicos, cerca de 5,000 mil personas que caen cada día en un infierno eterno. Así que, como resultado de sólo una pequeña parte del “Experimento Radical” nos asociamos con hermanos y hermanas, los pocos que hay en esta área, para entrenarles y para impartir el discipulado.
Pienso que les he contado la historia sobre como un pastor, Rajesh, fue a su entrenamiento. El estaba al final de la cuerda. Él estaba totalmente deprimido, listo para rendirse y tirar la toalla. Cuando íbamos a este entrenamiento en el que éramos compañeros, sobre discipulado, él fue instado a encontrar una villa que necesite del evangelio, que no tenga conocimiento del evangelio. De camino a esa villa, cuando vayas caminando, acércate a las primeras personas que veas y diles “Estoy aquí en el nombre de Jesús, y quiero orar por las personas de esta villa”.
Rajesh pensó que eso era una locura, y que nunca funcionaría. Él dijo “sin embargo, no tengo nada más que hacer, así que iré”. Él llega a una villa y al primer sujeto que ve le dice: “Estoy aquí en el nombre de Jesús, Me gustaría orar por esta villa”. El sujeto le dice “¿Quien es Jesús?, quisiera oír más de Él”, Rajesh dice “¿te gustaría?” y el dice “si, pero espera, déjame buscar más personas para que escuchen también”. Así que Rajesh sigue al sujeto hasta su casa y éste llama a sus amigos y familiares. Para resumir la historia, en menos de dos semanas, 25 personas en esa villa habían confiado en Dios para ser su Salvador.
Este hermano del que les hablo, que es de Behar, me dijo la semana pasada que desde ese día, ese grupo de creyentes ha salido a hacer los mismo. De esa única villa han sido ya plantadas 147 diferentes iglesias.
Esto vale la pena, hermanos y hermanas. Hacer pequeños sacrificios que resulten en grandes frutos, no sólo alrededor del mundo, sino en nuestras vidas. Esto es bueno, ¿no? Esto es gozo, esto es deleite. Cuando te enfrentes a la muerte, no te llevarás tus posesiones contigo, pero nos llevaremos a los hermanos y hermanas de Behar con nosotros y hermanos y hermanas de todo el mundo están con nosotros. Nos hemos acercado en su sufrimiento físico, nos hemos acercado a su pobreza espiritual y su falta de conocimiento del evangelio. Vale la pena. Vale la pena vivir de manera diferente a esta cultura y edificar iglesias de manera diferente en esta cultura. Vivir simplemente, dar con sacrificio, prosperar eternamente.
Den Sus Vidas
¡Proclamemos el evangelio como algo bueno! Así que, demos nuestras vidas. Dos cosas: ¡Proclamar el evangelio como algo bueno! Este evangelio es algo demasiado bueno. Debemos querer dar nuestras vidas y nuestras posesiones para hacerlo conocer. ¡Esto es buenas noticias!
2 Corintios 8:9, Dios en Cristo “se hizo pobre, siendo rico, para que vosotros con su pobreza fueseis enriquecidos”. La Biblia describe la encarnación en lenguaje de riqueza y pobreza. Cristo volviéndose pobre, llevando nuestro pecado en Sí mismo, para que podamos tener la rectitud de Cristo. Para que podamos decir a cada persona en el mundo y a cada grupo en el mundo que hay buenas noticias.
Hay noticias infinitamente buenas. Dios ha venido. Así que para ti que morías de hambre física y espiritual, Dios ha venido. El te ama, El cuida de ti, El se ha hecho pobre para que tú puedas ser rico en El; para que puedas conocerlo ahora y para siempre. Nosotros y Su pueblo, estamos aquí para decirte que El te ama y El cuida de ti. Hagamos esto en nuestra ciudad, hagamos esto en los confines de la tierra y en cada lugar entre ambos lugares, vivamos, proclamando su evangelio como algo bueno.
Déjame hacerte una pregunta ¿Puede un mundo materialista ser ganado para Cristo por una iglesia materialista? Yo no lo creo. Esto porque, número uno, mientras seamos una iglesia materialista, no mostraremos que Cristo es la satisfacción plena. Le mostraremos al mundo que Cristo más las cosas materiales es satisfactorio, y eso no es el evangelio. ¿Cómo llevaremos a las personas a abandonar estas cosas de este mundo si llenamos su iglesia con las cosas de este mundo? ¿Es su palabra suficiente para nosotros? Vean nuestros hermanos y hermanas alrededor del mundo reuniéndose, tarde en la noche, por horas, no porque la nueva banda y sistema de sonido son buenos y las transiciones son armoniosas. Se reúnen por que quieren oír la Palabra. Quieren conocer a Dios y Dios no es un medio de ganancia financiera para ellos. Que no lo sea para nosotros.
La segunda razón por la que no creo que un mundo materialista será alcanzado por una iglesia materialista es porque los recursos necesarios para ganar el mundo para Cristo se quedarán en nuestra segunda casa y en nuestras posesiones de mejor calidad, y continuaremos dando nuestros centavos a la Gran Comisión. Ralph Winter dice “La obediencia a la Gran Comisión ha sido envenenada de manera más consistente por la afluencia que por cualquier otra cosa”. Así que demos nuestras vidas y nuestras posesiones, proclamando el evangelio como algo bueno y viviendo como que Dios es nuestra ganancia.
¡Viviendo como que Dios es nuestra Ganancia!
! Vivamos como que Dios es nuestra ganancia! Este es el punto mismo de la comunión. Cristo se ha vuelto pobre, Él ha derramado su sangre, ha dado Su cuerpo por nosotros, para que podamos ser reconciliados con Dios. Yo caminaba hoy temprano en la mañana simplemente mirando el cielo y las nubes y sabiendo que Dios sostenía cada una de estas nubes con Su propia mano y que las dirige. Al mismo tiempo, Él me estaba escuchando mientras yo le alababa por ello.
Empecé a pensar, “tenemos a Dios, ¿para qué necesitamos más cosas en el mundo?” Pongamos nuestros corazones en Dios y no en más cosas en el mundo. Donde está tu tesoro, allí estará tu corazón. Así que, por Su Espíritu y por Su gracia, miremos donde está nuestro tesoro, donde están nuestros corazones. Digamos “¿Cómo podemos soltarnos de las cosas del mundo y poner nuestros corazones más en Dios y en Su trabajo en el mundo?”. En el proceso, experimenta la delicia de Dios en el evangelio y difundamos la gloria de Dios en el evangelio.