El Evangelio y el Matrimonio - Radical

El Evangelio y el Matrimonio

El matrimonio existe para Dios más que para nosotros. El problema principal en cada matrimonio es el pecado, pero la solución es nuestro Salvador. Las esposas dan una imagen de la iglesia al mundo y los esposos dan una imagen de Cristo al mundo. Como Cristo se relaciona con la iglesia, el esposo es la cabeza de su esposa. Como la iglesia se relaciona con Cristo, la esposa es la ayuda para su esposo. Esta imagen ha sido diseñada por Dios, pero ha sido distorsionada por el pecado. En este episodio del Radical Podcast sobre Efesios 5:22–33, el pastor David Platt enseña a los cristianos cómo ver el matrimonio bíblicamente.

  1. La gloria de Dios es el objetivo principal del matrimonio.
  2. La gracia de Dios es la esperanza principal para el matrimonio.
  3. El Evangelio de Dios es la imagen principal en el matrimonio.

Si usted tiene una Biblia, y espero que así, le invito a que la abran conmigo en Efesios 5. Quiero comenzar esta serie donde nos quedamos la última vez en la serie de Lazos, el Evangelio y nuestras familias. 

Lo que vamos hacer esta mañana es que vamos a ver al Evangelio y el matrimonio. La próxima semana vamos a ver al Evangelio y la condición de ser padres. Después al Evangelio y la soltería, que fue pospuesto de la semana pasada. Después el día de los Padres vamos a ver al Evangelio y la condición de ser Hombres. 

Efesios 5 contiene la declaración mas larga en el Nuevo Testamento en la relación entre esposos y esposas. No tengo que decirles que cuando usted mira al panorama político y moral en nuestro país hoy en día, los fundamentos del matrimonio se están rápidamente desgastando en nuestra cultura. 

Los fundamentos desgastados del matrimonio

Pero mi objetivo no es lamentar los fundamentos desgastados del matrimonio en nuestra cultura. Mi objetivo es hacer frente a los fundamentos desgastados del matrimonio en la iglesia. Para decirlo sin rodeos, estoy convencido que hemos ignorados los estándares de Dios para el matrimonio en la iglesia hoy en día. Y hemos ignorado y descuidado las expectativas de Dios para el matrimonio en la iglesia hoy en día. 

Como resultado, necesitamos mucho, necesitamos desesperadamente volver a lo que la palabra de Dios tiene para enseñarnos sobre el matrimonio. Ahora el pasaje que vamos a ver hoy fue escrito en el contexto del primer siglo, una cultura Greco Romana que era centrada en sí mismo, auto-saturada, inmoral cuando se trataba del matrimonio y la sexualidad. Las palabras que están aquí en la página proporcionan un contraste sorprendente con la cultura que rodeaba a la iglesia en este día. 

Quiero advertirle desde el mismo principio, las palabras que vamos a leer proporcionan un contraste sorprendente con la cultura que nos rodea en el siglo 21 cuando se trata del matrimonio. 

Necesitamos hacernos unas preguntas antes de entrar en esta Palabra, por el contraste que va a darnos entre la Palabra y lo que vemos en el mundo, necesitamos hacernos una pregunta desde el mismo principio ¿Vamos a someter nuestras vidas a la Palabra de Cristo? Nuestros matrimonios a la Palabra de Cristo o vamos a vivir nuestras vidas y nuestros matrimonios de acuerdo con las formas de este mundo, porque esa pregunta va a determinar como vemos este texto. 

Estamos viniendo a este texto diciendo, “Dios, dinos que hacer, muéstranos que hacer. Nos sometemos a lo que dice tu palabra.” O venimos a este texto con una arrogancia, diciendo, “Déjame ver que dice y ver que pienso de ello”. Tenemos que estar seguros de protegernos contra este último. Veamos este texto, por lo que es. 

Quiero que sepa porque esto es tan importante. Está directamente relacionado con lo que hablamos la semana pasada cuando hablamos sobre el Evangelio a las naciones. Quiero que esta familia de fe escuche, conozca que la forma en que abordemos al matrimonio en esta sala tendrá un efecto directo sobre nuestra capacidad de anunciar el Evangelio a las naciones. 

La forma en que abordemos al matrimonio en esta sala tendrá un efecto directo sobre que tan envueltos estemos o no en cumplir con La Gran Comisión en el mundo hoy en día. Quiero enseñarles porque en este texto. 

Antes de leer, solo quiero recordarle donde estábamos hace dos semanas cuando le recordé y hablamos sobre la condición de ser mujer. No estoy declarando que soy un experto en matrimonio. No estoy declarando que soy una tipo de Dr. Phil que lo tiene todo solucionado o por lo menos cree que lo tiene todo solucionado. 

No estoy declarando que he experimentado todo lo que puede haber en un matrimonio en todos los nueve años – creo que son 9. Si, nueve años de matrimonio. No estoy diciendo que todos ustedes tienen las mismas circunstancias y situaciones representadas en este salón cuando se refiere al matrimonio. 

Sé que hay un número infinito de escenarios representados en este salón y estoy orando que Dios tome la verdad de su Palabra, la verdad con autoridad de Su Palabra y mediante el poder de Su Santo Espíritu la aplique a cada circunstancia representada alrededor de este salón y el Espíritu Santo es bueno para hacer esto. El es bueno para esto. El Santo Espíritu es muy bueno para mostrarnos como la Palabra se aplica en nuestras vidas. 

Efesios 5

Lo bueno es que vamos a ver estas verdades y usted se irá hoy y el Espíritu Santo se irá con usted para mostrarle como estas verdades se ven en su vida. Así que con este entendimiento vamos a entrar a Efesios 5:22. 

“Esposas”, la Biblia dice, “Las casadas estén sujetas a sus propios esposos, como al Señor; porque el marido es cabeza de la mujer, así como Cristo es cabeza de la iglesia, la cual es su cuerpo, y él es su Salvador. Así que, como la iglesia está sujeta a Cristo, así también las casadas lo estén a sus esposos en todo. Esposos, amad a vuestras mujeres, así como Cristo amó a la iglesia, y se entregó a sí mismo por ella, para santificarla, habiéndola purificado en el lavamiento del agua por la palabra, a fin de presentársela a sí mismo, una iglesia gloriosa, que no tuviese mancha ni arruga ni cosa semejante, sino que fuese santa y sin mancha. Así también los esposos deben amar a sus mujeres como a sus mismos cuerpos. El que ama a su mujer, a sí mismo se ama. Porque nadie aborreció jamás a su propia carne, sino que la sustenta y la cuida, como también Cristo a la iglesia, porque somos miembros de su cuerpo, de su carne y de sus huesos. Por esto dejará el hombre a su padre y a su madre, y se unirá a su mujer, y los dos serán una sola carne. Grande es este misterio; mas yo digo esto respecto de Cristo y de la iglesia. Por lo demás, cada uno de vosotros ame también a su mujer como a sí mismo; y la mujer respete a su marido.” 

Ahora quiero tomar este texto y dividirlo en 3 áreas. Quiero que veamos algunos fundamentos que son fundamentales para entender Efesios 5, la vista del mundo Bíblico cuando se refiera al matrimonio. 

Después vamos a ver algunas instrucciones específicas basadas en esos fundamentos que son dados en Efesios 5 y después vamos a cerrar acampando en solo algunas diversas conclusiones cuando se refiere a cómo poner esto en práctica. Así que empezaremos con los fundamentos y esto es vital. No podemos ir a la parte de las instrucciones hasta que no tengamos la parte de los fundamentos en la misma página. 

La gloria de Dios es el fin del matrimonio

Fundamento numero uno: la gloria de Dios es el fin del matrimonio. La gloria de Dios es el fin del matrimonio. Todo en Efesios 5 gira alrededor de la gloria de Dios. Específicamente la gloria de Dios en Cristo. Mire el versículo 22: “Las casadas estén sujetas a sus propios maridos, como al Señor;” Retorna a sujeción al Señor. Versículo 25: ” Maridos, amad a vuestras mujeres, así como Cristo amó a la iglesia, y se entregó a sí mismo por ella.” Versículo 29: “Porque nadie aborreció jamás a su propia carne, sino que la sustenta y la cuida, como también Cristo a la iglesia.” 

Esto empapa todo el pasaje. Todo retorna a Cristo. Todo retorna a exhibir la gloria de Cristo, imitar a Cristo, obedecer a Cristo. Hacer lo que hacemos en el matrimonio como el Señor, para la gloria de Dios y Cristo. La gloria de Dios es el fin del matrimonio. 

Para ponerlo de una manera diferente, el matrimonio existe para Dios más de lo que existe para usted. Esposas, esposas en este salón. El matrimonio existe para Dios más de lo que existe para usted. Quiero que esto penetre por un momento y quiero que piense conmigo porque esto es tan importante. Usted no tiene que caminar mucho en la librería Cristiana local para encontrar una sección entera sobre el matrimonio y la familia. Una plétora de libros y recursos sobre matrimonio y familia. El negocio del mercado del matrimonio Cristiano está creciendo. 

Libros, seminarios, conferencias, todos hablando sobre como tener un mejor matrimonio. Lo que es interesante es que la tasa de matrimonio continua declinándose, mientras la tasa de divorcio sigue creciendo. La imagen del matrimonio en la iglesia continúa disminuyendo, continua siendo devaluado. Esto hace que uno se pregunte. ¿Qué quiere decir esto? 

Nos encontramos constantemente comprendiendo mas allá de lo que la Palabra nos muestra sobre el matrimonio. Quiero recordarle que Dios es el Señor del matrimonio. El creo el matrimonio. El conoce mejor al matrimonio que todos los Dr. Phil del mundo juntos. El sabe matrimonio y el nos ha dado en su Palabra lo que necesitamos cuando se refiere a matrimonio. El nos ha dado lo que necesitamos y su Palabra es buena. Su Palabra es suficiente.

¿Es Dios el Señor de su vida? 

Tenemos que tener cuidado con la peligrosa tendencia de pasar por alto la pregunta más importante cuando se refiere al matrimonio. No se pierda esto. La pregunta que determinara el estado de su matrimonio es esta pregunta. ¿Es Dios el Señor de su vida? ¿Es Dios el Señor de su vida? ¿Esta su vida?, esposo; ¿esta su vida?, esposa sometida a su Señorío. Esto es fundamental. Esta su vida rendida a lo que sea que él diga. Esto haremos. Esto haremos. Esto lo haremos juntos. 

El creó el matrimonio. El es Señor del matrimonio y existe sobre todo por su causa. Mientras el punto de partida en nuestras discusiones sobre el matrimonio es lo que funciona mejor para mi entonces estamos en el punto de partida erróneo en el cristianismo por completo. 

Esposo o esposa, si su punto de partida cuando usted piensa en su matrimonio esta mañana, es que funcionaría mejor para mi, entonces usted ha perdido el punto del Cristianismo desde el principio. La pregunta no es que funcionaria mejor para mí. La pregunta es que funciona mejor para Dios en mi matrimonio. Esa es una cuestión radicalmente diferente a pedir y no es una pregunta que se oye al mundo pidiendo que usted la haga, animándole a que la haga. 

Que es mejor para Dios en mi matrimonio porque El es mi Señor y El es mi pasión y El es mi todo y todo en mi vida está debajo de su Señorío y cualquier cosa que El diga yo lo haré. Hasta que no lleguemos a este punto no importa que hablemos con tantos expertos y no importa que tantos libros leíamos no vamos a experimentar lo que Dios ha diseñado para nosotros en matrimonio. Todo vuelve al Señorío de Cristo en primer lugar. El Matrimonio existe para Dios antes de que existiera para usted. La Gloria de Dios es el fin del matrimonio. 

La gracia de Dios es la última esperanza para el matrimonio

Basado en esto, el segundo fundamento: la gracia de Dios es la última esperanza para el matrimonio. Esto es buenas noticias. El Dios que diseño el matrimonio, que es el Señor de los matrimonios se compromete a darle la gracia de experimentar el matrimonio como lo ha diseñado. La Gracia de Dios, los recursos divinos del Cielo están disponibles para usted experimentar el matrimonio como Él lo ha diseñando. 

Personas dicen, “Bueno, entonces ¿Por qué tenemos tantas luchas en el matrimonio?” Usted va a los libros y los expertos y usted encuentra todo tipo de respuestas. Usted encontrara, bueno, el problema es problemas de comunicación, el problema es problemas de compatibilidad, problemas de personalidad, problemas con su pasado, problemas con el pasado de él, problemas con el pasado de ella, problemas con su presente, problemas con su futuro. Usted tiene problemas por todos lados. Usted tiene problemas financieros, problemas sexuales, todos estos diferentes problemas. 

No quiero que simplifique esta imagen, pero creo que en el núcleo de la Escritura dice que hay un mayor problema en el matrimonio y se llama pecado. El problema mayor en cada matrimonio es pecado. Cada esposo y cada esposa en este salón es un pecador. Esposas, no digan amen tan alto a eso. Un pecador horrible en eso. 

Ahora creemos que es algo básico, pero lo pasamos por alto. Quiero decir cuántas esposas se voltean a donde su esposo en su luna de miel y le susurran suavemente en el oído, “Soy una gran pecadora y soy tuya por vida.” No hace mucho para el romance. Usted se da cuenta de esto. 

Usted toma Romanos 3:9-20 y usted lo aplica al matrimonio. “Es la unión de un hombre y una mujer cuyo sepulcro abierto es su garganta; Con su lengua engañan. Veneno de áspides hay debajo de sus labios; Su boca está llena de maldición y de amargura. Sus pies se apresuran para derramar sangre; Quebranto y desventura hay en sus caminos; Y no conocieron camino de paz. No hay temor de Dios delante de sus ojos.” 

¿Esto lo anima? Nunca he escuchado las letras de una canción de boda basado en eso. Ni siquiera Twila Paris y nadie puede hacer que esto suene hermoso. 

Vamos a reflexionar sobre el pecado de este hombre y esta mujer en este momento. No, no funciona de esa manera. Ahora bromeamos al respecto, pero esto es importante. Esto es muy importante porque mientras vamos a los libros y conferencias y seminarios y a expertos para ayudarnos a hacer frente a los matrimonios, para trabajar en las cosas externas, hasta que nos encontramos cara a cara con el problema del pecado que está en el núcleo de cada uno de nuestros corazones, entonces vamos a poner curitas en los miembros rotos cada vez que, en todo momento. 

Nosotros no pensamos así. ¿Sabe por qué no pensamos así? Debido a que el último lugar que queremos ver cuando se refiere a los problemas en nuestro matrimonio es a nosotros mismos. Podemos encontrar muchas, muchas, muchas personas que nos dirán que los problemas en nuestro matrimonio no tienen nada que ver con nosotros. Tienen que ver con factores externos fuera de nuestro control. 

No estoy diciendo que todo se vuelve a la raíz de esto o eso, pero es muy claro que hay una problema cuando un hombre y una mujer se unen y ambos son pecadores, tiene pecados remanentes en sus vidas que va a crear algún tipo de conflicto. Hasta que esos conflictos son encarados no se pierda esto. Esto es porque esto es algo bueno. Suena un poco insano así, no es muy alentado para nuestro matrimonio solo estar hablando de nuestro pecado, pero no se lo pierda. 

Cuando venimos cara a cada con la innegable realidad del pecado que queda en nuestras vidas, incluso como seguidores de Cristo, el pecado que queda en nuestras vidas, un pecado que esta opuesto la unión juntos, no iremos entonces a la solución de este problema, pero si venimos cara a cara con la realidad hay un problema de pecado en usted. Hay un problema de pecado en mi. Tenemos solo un lugar donde ir y es a Cristo. Esa es la intención de esta imagen. 

Llevarnos a Cristo

El matrimonio tiene como intención llevarnos a Cristo. ¿Qué pasa si el matrimonio no está principalmente intencionado para hacernos feliz, pero si para hacernos santos? Para llevarnos a Cristo. Esa es la intención del matrimonio. El mayor problema en el matrimonio es el pecado. La mayor solución para cualquier matrimonio es el Salvador. Esto es porque necesitamos el Evangelio en nuestros matrimonios. No necesitamos que el Evangelio solo nos salve para que así podamos hacer una oración y seguir con nuestras vidas. 

No, necesitamos el Evangelio cada día para empoderarnos, permitirnos, realizar el hecho que el Evangelio es nuestra única esperanza en matrimonio. La gracia de Dios es nuestra única esperanza para el matrimonio. El es nuestro único remedio. Cristo es nuestro remedio. Dios no ayuda ver esto. Dios perdónanos por pasar de largo su Palabra por todos estos otros recursos. Cuando la realidad es, Cristo es suficiente para su matrimonio. 

Cristo es suficiente para su matrimonio. No estoy tratando de simplificar más las cosas, pero estoy diciendo esto. Si no vamos a la gracia de Cristo en nuestros matrimonios no tenemos esperanza de experimentar lo que Dios ha diseñado para nosotros en el matrimonio. 

La gracia de Dios es fundamental

La gracia de Dios es fundamental para todo este panorama. Es por el problema y si no diagnosticamos el problema correctamente nunca veremos la solución por lo que es y Cristo. Cristo es suficiente. Cristo es suficiente. Cristo es suficiente. Cristo es suficiente. No puedo decirlo lo suficiente. Cristo es suficiente para nuestras vidas. Cristo es suficiente para nuestros matrimonios. 

Esto nos lleva al tercer fundamento, su gloria, nuestro fin. Su gracia, la última esperanza para nuestros matrimonios. Esto es el fundamento que realmente empapa este pasaje. El Evangelio de Dios es la imagen final en el matrimonio. Esto es el núcleo de Efesios 5. Hay una correlación dominante entre la relación de un esposo con su esposa y la relación de Cristo con su iglesia que esta por todo Efesios 5. 

Mire conmigo en el versículo 22 y usted notara. Note las palabras comparativas. “Las casadas estén sujetas a sus propios maridos, como“, es posible que lo encierre, subrayen, “como, al Señor porque el marido es cabeza de la mujer, así como Cristo es cabeza de la iglesia, la cual es su cuerpo, y él es su Salvador.” Ahora, “Así que, como la iglesia está sujeta Cristo, así también las casadas lo estén a sus maridos en todo. Maridos, amad a vuestra mujeres, así como Cristo amó a la iglesia, y se entregó a sí mismo por ella.” 

Usted llega al versículo 31 la cita de Génesis 2, ” Por esto dejará el hombre a su padre y a su madre, y se unirá a su mujer, y los dos serán una sola carne.” Después escuche lo que él dice. “Grande es este misterio; mas yo digo esto respecto de Cristo y de la iglesia.” ¿Se da cuenta usted lo que él está diciendo ahí? 

El está diciendo que cuando Dios creó el matrimonio en Génesis 2, el no solamente tiro los dados o dejo a la suerte o pensó, “Bueno, yo me pregunto – me pregunto lo que sería una buena cosa que hacer con el hombre y la mujer. Como podría verse esto.” En vez el diseño el matrimonio intencionalmente desde el mismo principio- Pablo dice “Es un misterio” en Efesios 5. 

Es un misterios en que Moisés y el pueblo del Antiguo Testamento no se dieron cuenta la totalidad del significado de lo que está pasando ahí, pero cuando Dios diseño el matrimonio y el junto a un hombre y a un mujer, su diseño desde el mismo principio – Esto no es Pablo diciéndolo en Efesios 5, usted sabe, me gustaría una ilustración para ayudarnos a entender el matrimonio. No. El está diciendo que el diseño de Dios desde el mismo principio era para darnos una ilustración de la manera que Cristo ama a su pueblo. 

La relación del matrimonio desde el principio de los tiempos fue diseñado por Dios para ser una imagen. Dios diciéndole al mundo. Capture esto, Dios diciéndole al mundo, “Usted quiere saber cómo mi Hijo ama a mi pueblo, mire al matrimonio. Mire al matrimonio y usted verá el panorama del Evangelio.” 

Esposas y la iglesia, esposos y Cristo

Quiero que esto penetre bien. Esposas, den una imagen de la iglesia al mundo. Eso es lo que Efesios 5 está enseñando. Esposas, den una imagen de la iglesia al mundo. Quiero que miremos ambas cosas. Después dejaremos que eso penetre bien. Esposas, den una imagen de la iglesia al mundo. Esposos, den una imagen de Cristo al mundo. Esposos, den una imagen de Cristo al mundo. 

Sus matrimonio, cada uno de nuestros matrimonios en este salón da una imagen al mundo de la relación de Cristo con su pueblo; una imagen ineludible. Con eso quiero decir que usted no elige si dar o no esta imagen. Su matrimonio, mi matrimonio le está dando una imagen al mundo. 

La pregunta no es de qué estamos dando una imagen. La pregunta es qué tipo de imagen estamos dando. Esta verdad es – es a la vez desafiante y alentadora. En este nivel es desafiante. Esposas, si usted le es infiel a su esposo le enseña al mundo que Cristo no está satisfaciendo a su pueblo. Esposas, si usted irrespeta a su esposo, usted le enseña al mundo que la iglesia no respeta a Cristo. Esposas, si usted no sigue a su esposo, como Efesios 5 dice aquí, usted le enseña al mundo que Cristo no es digno a ser seguido. 

Esposos, si usted abandona a sus esposas, usted le enseña al mundo que Cristo abandona a su pueblo. Usted ignora a su esposa; usted le enseña al mundo que Cristo no quiere nada con su pueblo. 

¿Se da cuenta lo que está a riesgo aquí? Por esto es que ese primer fundamento es tan clave. Esta es la Gloria de Cristo y su pacto con su pueblo que está ligada a la imagen del matrimonio. Para pensar cómo por toda nuestra cultura, no sólo nuestra cultura, sino que en toda la iglesia estamos simplemente calumniando la fidelidad de Cristo con la forma en el que enfocamos el matrimonio muchas veces para disfrutar de unos momentos de placer mundano. Dios nos perdone. 

Es por eso que tiene que estar juntos en el matrimonio. No porque sea fácil. No porque siempre tiene sentido de acuerdo a sus sentimientos. Ustedes permanecen juntos en el matrimonio, porque el pacto de Cristo está en juego en esta imagen ante un mundo perdido y moribundo que tiene que ver el amor de Cristo. Dios ha dicho que usted quiere ver el Evangelio. Véalo en el matrimonio. Esto plantea al matrimonio en otro nivel que necesitamos que ver en la iglesia. 

Mira a Cristo

Lo que es alentador al respecto, lo que es alentador de todo esto es, esposos, tiene a un experto. ¿Quiere saber cómo amar a tu esposa? ¿Quieres saber cómo amar a tu novia? Mira a Cristo. Él nos enseña a hacerlo. El nos dice cómo hacerlo. Toda su vida es una imagen de cómo hacerlo así que búsquelo a él. Verlo. Usted no tiene que ser un pionero en esto. Tiene Uno que se ha ido antes. Ha demostrado como el matrimonio se ve en la relación de El con su pueblo. 

Esposas, vean esto. Que Dios ha diseñado como Dios ha diseñado la satisfacción de su iglesia se encuentra en un esposo llamado Cristo. El ha diseñado regocijo y satisfacción para usted. Ahora yo se que algunos de ustedes están pensando- algunos de ustedes están pensando, bueno eso no es lo que está pasando en mi vida ahora mismo. No es lo que estoy experimentando en mi matrimonio, así que. ¿Qué hago? 

De nuevo yo sé. Yo sé que hay muchas circunstancias representadas alrededor de este salón y yo se que las hay – yo se que las hay hombres y mujeres alrededor de este salón quienes no han mostrado esta imagen en el pasado y no pueden deshacer eso. Mire lo que puede hacer. Aquí esta lo que puede hacer. Quiero alentarles en primer lugar. Mire a su pasado con redención. Mire a su pasado con redención. Mire a su pasado en la luz de la gracia de Dios que cubre tu pasado. La Gracia de Dios cubre nuestro pasado. Alabado sea Dios. Su gracia cubre nuestro pasado. Su gracia cubre nuestro pasado. 

Pero no solamente cubre nuestro pasado. Su gracia empodera nuestro presente y no se pierda esto. La gloria de Dios está ligada a la alianza matrimonial. La gracia de Dios se comprometió a permitir la alianza matrimonial y el Evangelio de Dios está siendo proclamado al mundo a través de la alianza matrimonial. Eso quiere decir que Dios está altamente invertido en su alianza matrimonial. 

El quiere darte todo lo que usted necesita para hacer que esto funcione. El pone los recursos divinos del Cielo a su disposición para que su gloria, por su gracia usted y su esposa, usted y su esposo estén unidos aun cuando no es fácil, aun cuando es difícil estar unidos y juntos predicador el Evangelio al mundo con la manera en que ustedes se aman. Este es el diseño de Dios para el matrimonio. Esto es fundamental. 

Hasta que el factor de motivación en nuestros corazones sea la gloria de Dios y el Evangelio por la gracia de Dios nunca podremos ser capaces de seguir al resto de lo que esta Escritura dice. De hecho, si el Señorío de Cristo y estos fundamentos no están en su vida, no tengo duda que usted saldrá de aquí esta mañana después de leer de este texto en Efesios 5 – Ya yo sé que hay muchas banderas rojas que se han alzado por todo este salón – usted se irá diciendo “Yo no creo eso. Esa no es la respuesta. Eso no sería – eso es anticuado. 

La razón por la cual usted no lo cree es porque usted no ha creído en el Señorío de Cristo en su vida. El Señorío de Cristo dice aquí está mi gloria, aquí está mi gracia disponible para ti y aquí está el Evangelio. Te daré lo que necesitas para hacer esto una realidad. 

Así que, ¿Cómo se ve esa realidad? Ahora llegamos a las instrucciones. Basadas en estos tres fundamentos, estas instrucciones. Dividiremos estas instrucciones en roles y responsabilidades. Es lo que hace Efesios 5. Tenemos roles para esposos y esposas, y responsabilidades para esposos y esposas. Comenzaremos con los roles. 

Ahora recuerde, recuerde cuando hablamos sobre roles, Dios no ha diseñado el matrimonio sin orden. No fue arbitrariamente. Ah, bueno simplemente haremos esto. El hizo todo esto en muchos de estos fundamentos. Todo es intencional. 

El esposo y Cristo

Los roles: Numero uno: como Cristo se relaciones con la iglesia, el esposo es la cabeza de su esposa. Como Cristo se relaciona a la iglesia, el esposo es la cabeza de su esposa. Esto es el versículo 23. “Porque el marido es cabeza de la mujer, así como Cristo es cabeza de la iglesia.” 

Ahora quiere hacer una pequeña lección de gramática para recordarle algo. A menudo nosotros confundimos indicativos con imperativos en la Escritura. Quiero que se mantenga conmigo por un segundo, bien. Algunos de ustedes están pensando, si claro. Indicativos e imperativos, pero está confundido sobre que con indicativos e imperativos. 

Aquí está lo que son. Indicativos son declaraciones de hechos. Esta es la manera que algo es. No hay un debe en un indicativo. El podio es negro. Este salón tiene sillas. Personas sentadas en las sillas. Estos son declaraciones de un hecho. No es este podio debe ser negro. Es negro. Es indicativo. 

Imperativos son comandos, declaraciones de tipo “debe ser”. Es algo que debería de hacer. Debería hablar desde este podio. Siéntase en la silla. Entre a una habitación. Estos son acciones que deberíamos de hacer. Deberíamos hacer. Mandatos. 

Ahora, la razón por la cual trace la diferencia entre declaraciones indicativas de hechos e imperativas, mandatos para hacer, es que cuando usted viene a Efesios 5, necesitamos darnos cuenta que no hay una imperativa en este pasaje para que los esposos sean la cabezas de sus esposas. Déjeme repetir eso. No hay un mandato en este pasaje para que los esposos sean las cabezas de sus esposas. 

El marido es cabeza de la mujer

No dice esposos sean la cabezas de sus esposas. No es in imperativo en Efesios 5. En vez, es un indicativo. Es una declaración de un hecho. La Biblia dice, “El marido es cabeza de la mujer.” Así como el podio es negro, el esposo es la cabeza de la esposa. Es una realidad. Es la manera en que Dios lo ha diseñado. 

Ahora en este punto quiero recordarle, 1 Corintios 11:3. No tenemos tiempo para volver aquí, pero quizás quiera apuntarlo. Quiero leerle esto porque sé que tan pronto comience a hablar sobre El mando hay algunas banderas que se alzaran por todo este salón. ¿Qué quiere decir con El mando? 

Déjeme decirle lo que no es. Cuando lleguemos a 1 Corintios 11:3, escriba eso, no se olvide lo que ha pasado hasta este punto en Efesios. Hay otras dos veces donde se menciona Cristo como la cabeza de la iglesia. Cristo es mencionado como la cabeza arriba de todos nosotros. Así que este pasaje no está diciendo que el esposo toma el lugar de Cristo en la vida de la esposa. Eso no es lo que está diciendo el pasaje. 

El pasaje no está diciendo que un esposo es infalible como Cristo o perfecto como Cristo o supremo como Cristo. De ningún lugar. El pasaje no está diciendo que Cristo no es cabeza sobre una esposa. Cristo es definitivamente cabeza sobre esposas y esposos; de todos nosotros El es cabeza, pero la imagen es en una relación entre un esposo y esposa, esposo es la cabeza de la esposa. 

Ahora 1 Corintios 11:3. Escuche a lo que dice. “Pero quiero que sepáis que Cristo es la cabeza de todo varón, y el varón es la cabeza de la mujer.” Y escuche esto. Por eso es que quería mostrar 1 Corintios 11:3. “Cristo es la cabeza de todo varón, y el varón es la cabeza de la mujer, y Dios la cabeza de Cristo.” ¿Escucho eso? Dios es la cabeza de Cristo. 

Quiero recordarle a 1 Corintios 11:3 porque esto no está de ninguna forma hablando de valor. Esto no está dando una imagen de inferioridad y superioridad. No está hablando sobre valor. Gálatas 3:28 lo hace claro que somos todos igual en Cristo, juntos en Cristo. 

La razón por la que menciono 1 Corintios 11:3 es porque habla sobre como Dios es la cabeza de Cristo y sabemos que Cristo es totalmente Dios. El es totalmente divino. Él no alejado de Dios y el Padre. Al mismo tiempo, El Padre es la cabeza de Cristo. 

Así que quiero recordarle que si hay alguna angustia en usted, hombres o mujeres, cuando se trata sobre esta imagen de cabeza, hombre siendo cabeza, esposo siendo cabeza de su esposa, si hay alguna angustia en esto quiero recordarle que Cristo está bien de no ser la cabeza en la relación con su Padre. Esto es algo bueno. Fue algo bueno para Cristo y toda su vida en la tierra que el Padre era la cabeza. El respondió a lo que el Padre lo llevo a hacer en su amoroso liderazgo. Llegaremos a eso en un minuto, solo manténgalo en mente. 

La esposa y le iglesia

Así como Cristo se refiere a la iglesia, el esposo es el cabeza de la mujer. En segundo lugar, como la iglesia se refiere a Cristo, la esposa es la ayuda para su esposo. La esposa es la ayuda para su esposo. Ahora sé que tenemos banderas disparándose. Así que quiero ir atrás a Génesis. 

Vaya conmigo hacia tras para Génesis 2. Muy hacia tras, el principio de la Biblia, el primer libro, Génesis 2, segundo capítulo, primer libro, Génesis 2 y quiero que veamos todo el panorama aquí en el mismo principio. Pablo cita esto en Efesios 5. 1 Corintios 11, otro pasaje sobre el matrimonio. 

Que también retrocede a la imagen en Génesis 2 y 3. La razón por la cual hago énfasis en esto es porque el Nuevo Testamento no está trayendo algo totalmente nuevo a la mesa aquí. Está volviendo al fundamento del matrimonio que comenzó en el principio. 

De hecho, Génesis 2, Dios diseña esta imagen. Dios diseña esta imagen del matrimonio del esposo como cabeza y la esposa como ayudante. Dios diseña esto en Génesis 2. Déjeme enseñarle, la imagen. Aquí en Génesis 2 usted ve que es Dios quien crea al hombre. Dios pudo hacer creado al hombre y a la mujer al mismo tiempo. No lo hizo. Creó al hombre primero. El va al hombre y Dios dice, “Tienes una responsabilidad.” Palabra clave: Tienes una responsabilidad. “Para el cuidado de la creación” Esto es lo que pasa en Génesis 2. “El cuidado de la creación y la obediencia de la creación.” 

Le da el hombre un comando. “No coma de este árbol.” El hombre es responsable de cuidar del jardín y la obediencia de la creación de Dios. El hombre es establecido como el líder en esta imagen desde el principio. 

Desde usted tiene el versículo 20. Dice, Génesis 2:20, ” Y puso Adán nombre a toda bestia y ave de los cielos y a todo ganado del campo; mas para Adán no se halló ayuda idónea para él. Entonces Jehová Dios hizo caer sueño profundo sobre Adán, y mientras éste dormía, tomó una de sus costillas, y cerró la carne en su lugar. Y de la costilla que Jehová Dios tomó del hombre, hizo una mujer, y la trajo al hombre.” Que románticas palabras. “Dijo entonces Adán: Esto es ahora hueso de mis huesos y carne de mi carne; ésta será llamada Varona, porque del varón fue tomada.” 

El hombre es cabeza y la mujer su ayuda

Aquí esta. Lo que el cita en Efesios 5, “Por esto dejará el hombre a su padre y a su madre, y se unirá a su mujer, y los dos serán una sola carne.” No se hallo ayuda idónea para Adán. Dios creó a la mujer. Aquí tiene el panorama. Usted tiene esta imagen que el hombre es cabeza y la mujer su ayuda y es algo bueno en Génesis 2. Está trabajando juntos en armonía. 

Se trata de un hombre y una mujer unidos en mucho amor el uno al otro de una manera satisfactoria. Se llega al final, ” Y estaban ambos desnudos, Adán y su mujer, y no se avergonzaban.”. Eso es en hebreo que las cosas iban bien, muy bien. 

Pero desde usted llega a Génesis 3. Génesis 2, Dios diseña esta imagen. El hombre es cabeza; la mujer su ayuda. Génesis 3, el pecado distorsiona esta imagen. El pecado entra al mundo en Génesis 3. ¿A dónde quien se dirige primero Dios? El va al hombre. Responsable por la obediencia de la creación. No que la mujer no era responsable por su pecado, pero la responsabilidad llego al líder en esta imagen a quien se le había dado, confiado con esa responsabilidad. Lo que pasa es que son confrontados en su pecado y Dios habla a ellos. 

Es interesante. Usted llega al versículo 16. Escuche a lo que dice el versículo 16. Dice “A la mujer dijo: Multiplicaré en gran manera los dolores en tus preñeces; con dolor darás a luz los hijos;” Y aquí está. “Y tu deseo será para tu marido, y él se enseñoreará de ti.” 

Ahora muchas personas toman ese versículo y dicen, “Bueno todo esto de El mando y sumisión es resultado de la caída. Todo es resultado del pecado en el mundo.” Eso no es lo que Génesis 3:16 está enseñando. 

Ya hemos visto El mando y sumisión, cabeza y ayudante en Génesis 2. En vez lo que estamos viendo aquí en Génesis 3, la relación entre hombre y mujer. Obviamente, el efecto del pecado en su relación con Dios era grande, pero también fue muy grande el efecto de su relación entre ellos. Lo que es en Génesis 3 es un abuso del diseño de Dios en Génesis 2. 

Son abusos del diseño de Dios para el matrimonio. 

Ahora, Génesis 3, como resultado del pecado, el imagen de cabeza y ayudante que es una buena imagen, una gran imagen en Génesis 2 es ahora abierta a los hombres quienes orgullosamente dominaran a sus esposas y mujeres quienes rechazaran y resistirán el liderazgo de su esposo en sus vidas. Machismo y feminismo no son cosas nuevas en el siglo 21. Han estado con nosotros desde Génesis 3. Son abusos del diseño de Dios para el matrimonio. 

No hay duda. No voy a ocultar el hecho de ninguna manera que este diseño que Dios tiene para el matrimonio y que el hombre es la cabeza y la mujer es ayudante es muy abusado, incluso en la iglesia por supuestos esposos cristianos o esposas cristianas. 

Lo que quiero que veamos como dice la Escritura, es una declaración de hecho, “El pecado no creó este liderazgo y la imagen de sumisión. Dios la creó y la diseñó para bien. Usted dice, “Bueno, ¿Qué quieres decir? ¿Cómo es eso bueno? ¿Cómo es eso grande? ¿Cómo es eso lo mejor?” 

Aquí es donde nosotros queremos profundizar en la responsabilidad. Si sólo se quedan conmigo y observan esto. Si usted no puede descartarme en este punto, bueno – bueno es anticuado. Esto es Génesis 2. Esto fue hace un largo tiempo que Dios armo esto y lo armo por una razón. Quiero que se quede conmigo aquí porque cuando entremos en esto es que vamos a ver la belleza de la imagen del Nuevo Testamento sobre el matrimonio y esta imagen de cabeza y ayudante. 

Manténganse conmigo. Vea lo que la palabra nos muestra aquí y es bueno. Responsabilidad. De vuelta en Efesios 5. Comienza con las esposas. Siempre comienza con las esposas en las Escrituras. Incluso me haré una nota de esto en el margen. Lo que es interesante cuando se llega a Efesios 5, la mayor parte de la discusión gira en torno a lo que se le dice a las esposas, pero la realidad es que lo que se le dice a los esposos es mucho más largo y es mucho más profundo, es mucho más pesado, llegaremos a eso en un segundo. Así que chicos, que sólo tienen que esperar un segundo. 

Esposas, Esposas, que dicen las Escrituras en Efesios 5 ¿Qué es su responsabilidad? Numero uno: su responsabilidad es reverenciar a Cristo a través de la sumisión a su esposo. Reverenciar a Cristo a través de la sumisión a su esposo. Ahora esta palabra sumisión es obviamente una palabra, número uno, que puede ser abusada, que espero que cambiemos esto en esta mañana mientras miramos lo que significa en esta palabra, pero es constante durante todo el Nuevo Testamento. 

Colosenses 3:18, 1 Pedro 3:1, Tito 2:4 y Efesios 5:22 todos dicen, “Esposas sométanse a sus esposos.” Así que esto no es algo que Pablo comenzó a decir y que en verdad no significaba nada. Fue bastante intencional. EL Espíritu Santo nos está dando esta imagen por todo el Nuevo Testamento. 

Es la misma palabra. De hecho, es la palabra que lleva Efesios 5:21, ” Someteos unos a otros en el temor de Dios.” Y la palabra literalmente significa ceder a un liderazgo amoroso. No te pierdas lo que Efesios 5 está diciendo aquí. Es decir a las esposas – y no es sólo decir genéricamente. Las mujeres a todos los hombres o cualquier mujer en este salón a cada hombre. Esta diciendo una esposa a su esposo. Contexto especifico allí. Una esposa a su esposo. 

Lo que Efesios 5:22 dice es confía en su esposo. Ríndase al liderazgo de su esposo. Siga a su esposo. Eso es lo está diciendo. De la misma manera y es el panorama – Voy a volver a lo que habíamos mencionado antes. Cristo se subordino, se sometió a la voluntad del Padre todo el tiempo en que lo vemos en el Evangelio. Está diciendo todo lo que dice el Padre, lo hago. Cualquier cosa que el Padre me diga que diga, yo digo. Esta era la posición en la que estaba Cristo, el mismo Cristo. 

Temer a Cristo

Esto no es un problema de inferioridad, desigualdad o tipo coerción. Se trata de una sumisión voluntaria. Es confianza voluntaria. Rendimiento voluntario y devoción a otra persona. Es algo bueno. Temer a Cristo. Por temor de Cristo, así como al Señor a través de la sumisión a su esposo. 

Desde en segundo lugar, versículo 33 dice, ” Por lo demás, cada uno de vosotros ame también a su mujer como a sí mismo; y la mujer respete a su marido.” Esto es tan interesante. Sólo la sabiduría de Dios aquí y me gustaría que tuviéramos para descomprimir esto más, pero lo que usted tiene es que no tiene directamente ni siquiera un comando para las esposas que amen a sus esposos en este pasaje. En cambio, esto es reservado para la imagen de los esposos y las esposas amorosas. 

En vez dice, “Cada uno de vosotros ame también a su mujer como a sí mismo; y la mujer respete a su marido.” Así que él dice, “Esposos amen sus esposas. Esposas respeten sus esposo.” No se pierda lo que está en lo inferior aquí en esta imagen de Dios quien ha diseñado a hombre, esposos con la necesidad de que sean respetados y Dios quien ha diseñado a las mujeres, esposas con la necesidad de ser amadas. Dios está diseñando eso y diciendo así es como usted siente eso. 

La realidad es que creo que si somos honestos con nosotros mismos, nosotros luchamos con eso. Creo que en muchos casos es mas fácil para la esposo amar a su esposo, pero no respetar a su esposo. Una esposa puede hasta sentarse con un grupo de amigas y hablar irrespetuosamente sobre su esposo, sobre todas las cosas que la tiene frustrada con su esposo, pero después ir a cada y cuidar de su esposo y hacer esto y lo otro porque ella ama a su esposo. La pregunta es si ella lo respeta. 

Esposas, ¿Respetan a sus esposos? ¿Le dice a su esposo lo que respecta en él? Tenemos esta tendencia y hombres ustedes hacen lo mismo y vamos a llegar a eso en un minuto, de darnos lo que necesitaríamos a diferencia de darles lo que ellos necesitarían. 

Adore a Cristo

Así que cuando se trata de dificultades matrimoniales, las Escrituras están alentando a los esposos que necesitan ser amadas. Su esposo necesita ser respetado así que respete a su esposo y es la manera de caminar a través de esta imagen del matrimonio con él y construir con él. Alentarlo. Mire cada oportunidad que usted tenga, damas de alentar a su esposo. Usted es la ayuda aquí en Génesis 2. Ese es el panorama. Por eso es que es tan claro aquí. Adore a Cristo a través de la sumisión a su esposo. Respete a su esposo. 

Ahora, algunas de las damas todavía tienen algunas banderas levantadas. Ahora escuchen a esto, esposos. Ahora se pone bien espeso. Esposos, dos responsabilidades. Numero uno: reflejar a Cristo a través del sacrificio por su esposa. Reflejar a Cristo a través del sacrificio por su esposa. Capitulo 5, versículo 25. “Maridos, amad a vuestras mujeres, así como Cristo amó a la iglesia, y se entregó a sí mismo por ella.” El se entrego a sí mismo. 

Cuando merecemos la ira del Dios Todopoderoso, Cristo se puso en nuestro lugar, en lugar de usted, mi lugar. Se bebió el vaso de la ira de Dios para que así nosotros no tuviéramos que hacerlo. Toda Gloria sea a Cristo. No hay manera que estemos aquí ahora mismo sino por Cristo quiere se entrego por nosotros. 

Así que esposos, Pablo dice, amen a sus esposos así. El mando no es una oportunidad, caballeros, para nosotros dominar a nuestras esposas. Es una responsabilidad. El mando es una responsabilidad para usted y para mí para morir por nuestras esposas. Morir diariamente, sacrificarnos. 

La cultura dice ser macho, defiéndase, hazte valer, construyese, vigile por sí mismo. Las Escrituras dicen muera para sí mismo y entréguese a su esposa. Entréguese a sí mismo por su esposa. Este es la instrucción ante usted. 

Ella necesita amor

Amor dispuesto al sacrificio. Reflejar a Cristo a través del sacrificio por esposa. Esposos, amad a vuestras mujeres. Ame a su esposa, seis veces en ocho versos diferentes. Ame a su esposa, Ame a su esposa, Ame a su esposa. Usted necesita respeto. Ella necesita amor. Ella necesita el amor de usted. 

Una vez más, creo que tenemos una tendencia, hombres, dar respecto a veces es mucho más fácil que dar amor. No me tomó mucho tiempo. Dos horas a solas con los niños los miércoles por la noche para tener mucho respeto por mi esposa. El respeto es – es mucho más fácil. Respetar quien ella es y lo que ella hace. ¿La amo? ¿Usted la ama? 

Usted ¿Cómo usted la ama? ¿Cómo dicen las Escrituras que necesito amar a mi esposa? Bueno, en primer lugar, Efesios 5 dice, “Ámala desinteresadamente. Como Cristo la ama desinteresadamente.” Este es un amor generoso, que no se basa en lo que se obtiene a cambio. Esto es tan grande. Esto es enorme para las esposas y esposos. 

Algunas de ustedes, algunas de las damas aquí, cuando yo digo esposas, respeten a sus esposos inmediatamente pensaron y han estado pensando: bueno, mi esposo no se merece respeto. Tenga cuidado porque es en ese punto que usted está comprando la filosofía de este mundo cuando se refiere a lo que debe hacer para manejar el matrimonio. Está comprando la ideología que dice que la forma en que mi relaciono con mi esposo es basado en lo que él me da, lo que él hace por mi y eso no es un respecto y amor Bíblico. 

La Biblia dice, “Esposas, respeten a sus esposos.” No basado en su rendimiento con usted. Esposas, respeten a sus esposos basados en el rendimiento de Cristo en usted. Basado en Cristo en usted. No es esposas, respeten a sus esposas; una nota, vaya hasta el fondo: a menos que esto no pase. No es lo que dicen las Escrituras y viceversa, esposos, cuando se refiere a amar desinteresadamente el mundo dice, el mundo dice usted ama a su esposa, esposos, por todas las características positivas que tenga. 

El único problema es cuando ya una de las características positivas no es tan atractiva para usted como esposo ya su amor comienza a desvanecerse. Su amor por su esposa. Mi amor por mi esposa no está nunca en las Escrituras basado en las características positivas que mi mujer se merece. Se basa en el amor de Cristo en mi para ella. Que el amor no se detiene. No depende de lo que ella trae a la mesa. ¿No estamos contentos, caballeros, que Dios no nos ama sobre la base de lo que traemos a la mesa? Si queremos que Él nos ame sobre la base de lo que hemos ganado, hemos perdido el punto de toda la cristiandad. 

La realidad es que si Dios nos ama sobre la base de su gracia en nosotros, entonces es mejor amar a nuestras esposas de la misma forma. Enamorado de ella desinteresadamente. Cuando las características positivas que le llamaron la atención empiezan a desaparecer, es cuando el amor se hace más real en el matrimonio enseñan las Escrituras. El amor se convierte más profundo. Enamorado de ella desinteresadamente. 

Segundo: ámela eficazmente. Eficazmente. Aquí es donde es muy interesante. Pablo empieza a hablar sobre lo que Cristo hace en su iglesia para hacerla – Versículo 26 – “Para santificarla, habiéndola purificado en el lavamiento del agua por la palabra, a fin de presentársela a sí mismo, una iglesia gloriosa, que no tuviese mancha ni arruga ni cosa semejante, sino que fuese santa y sin mancha.” Esto es lo que hace Cristo en su amor por su novia, para la iglesia. El la presenta como amorosa, como hermosa. Es el trabajo de Cristo en ella. 

El amor de Dios

Ahora, obviamente hay una diferencia aquí entre que hacemos como esposos y lo que Cristo hace. No morimos por el pecado de nuestras esposas y no tenemos poder santificador que tiene el Espíritu Santo. Al mismo tiempo lo que nos está mostrando la Escritura es que el amor de Cristo para su novia tiene una gran afecto y que el amor de ustedes, esposos, para sus esposas debe tener gran afecto. 

Esposos, amad a vuestras esposas de una manera que aumente su belleza, que aumente su crecimiento en Cristo y la hermosura y la belleza de Cristo. Ámela con gran efecto, el efecto de la relación con su esposa debe ser evidente en la forma en que ella busca a Cristo. Eso es lo que la Escritura está enseñando aquí. Aquí es donde – es uno de esos momentos. Hubo muchos momentos la semana pasada en el estudio de este texto en el que me encontré cara a cara con mi vida, mi propio matrimonio, con la insuficiencia, las luchas. 

Pero esta imagen, la hemos visto en Génesis 2 y ahora aquí en Efesios 5, del mando y responsabilidad. Creo que la enseñanza de las Escrituras es muy clara aquí que los esposos, tienen la responsabilidad de la santidad y la belleza de sus mujeres. Esposos, tienen, tengo la responsabilidad de la belleza y la santidad de nuestras esposas. Esta es una parte del mando. 

Responsabilidad ante Dios de tal manera que cuando hay problemas en nuestros matrimonios al final retornan a nosotros de alguna manera. Sé que es una declaración audaz. Quiero que me siga aquí. No estoy diciendo que si una esposa comete adulterio o una esposa cae en otro pecado que ella no es culpable ante Dios por su pecado. Eso está en la Escritura obviamente. 

Tiene responsabilidad por la santidad

Al mismo tiempo, usted es la cabeza de su esposa, la cabeza de su familia y como tal usted tiene responsabilidad por la belleza y la santidad de su esposa ante Dios y usted es responsable ante Dios por la manera en que usted guía a su esposa para ser hermosa y para ser santa

Déjenme ilustrar. Una ilustración practica. Barco de la marina, un joven marinero en el barco de la marina rebeldemente toma el control y arruina el barco en medio de la noche. Mientras tanto el capitán el barco se ha quedado dormido en su turno. ¿El joven marinero tiene la culpa de arruinar el barco? Absolutamente, el es culpable. ¿El capitán es responsable? Sin pregunta el es responsable por dejar que el barco se arruine. Esta es la imagen que creo que la Escritura nos está dando cuando se refiere al mando. 

Caballeros, usted es responsable y esto significa que si hay problemas sucediendo en nuestro matrimonio tenemos que subir a la base y tomar responsabilidad por ellos. Usted dice, ¿Cómo cambiar eso? ¿Cómo hacemos para hacer hermosas a nuestras esposas? ¿Cómo podemos ayudarlas a crecer en hermosura? 

No dominándolas. No diciendo, ‘Bueno, yo voy a tomar el control de esta cosa.” Sacrificando su vida por ellas. Esta es la manera en que Cristo le hace a su santa Iglesia, hermosa, bella, sacrificando su vida por ella. Esposos, esto es lo que estamos llamados a hacer. Si usted no está experimentando problemas en su matrimonio ahora, esposos, no se duerman en su turno. No se duerman con el tiempo de Dios que ha confiado la responsabilidad de su hogar y lo más importante, su esposa. 

Ya es hora de que los hombres subamos y asumamos la responsabilidad de lo que Dios nos ha confiado en vez de hacer bromas acerca de cómo estamos en la cabeza a nuestras esposas. Esta visión de del mando debe hacerle temblar a todos los hombres ante Dios y su esposa. 

Ahora está haciendo sentido, ¿no? ¿No está teniendo sentido? ¿Qué mujer no desearía seguir el liderazgo de un esposo que hace estas cosas? ¿Qué mujer no desea confiar en alguien que entregue su vida por ella cada día? Ámela efectivamente. 

Tercero: Ámela cuidadosamente. Necesitamos pasar. Esto es hasta chistoso. El los versículos 28 y 29, “Así también los maridos deben amar a sus mujeres como a sus mismos cuerpos. El que ama a su mujer, a sí mismo se ama.” Es como que él hace un llamado al egoísmo natural del hombre. El esta como, “Usted sabe que usted se ama, ¿lo sabe? Ame a su esposa de esa manera y las cosas irán bien.” El como que hace un llamado a eso. 

Pero él dice, “Aquí está tu propio cuerpo. Ame a su esposa. Aliméntela. Cuídela.” Dos palabras en el Nuevo Testamento, lenguaje original del Nuevo Testamento. La primera, ¿Cómo usted la ama con cuidado? Primero, nútrela, aliméntala. El lenguaje es emocional en griego, hasta evocativo. Nutrirla y en segundo lugar, apréciala. Atención a ella, consolarla, ser cálido con ella. Los esposos no sean ásperos con sus esposas. Escritura dice que nunca, nunca, nunca sean ásperos con sus esposas. Sea cariñoso con su esposa. Conforten a vuestras mujeres; acaricien a sus esposas. 

Cuide de ella, acomódela, acaricie a su esposa

Esta es la razón por la Escritura, obviamente, ve. Dios sabe que los esposos, hay una tendencia en nosotros para tener una dominación orgullosa cuando se trata de esta imagen de del mando. La Biblia nos dice que cuide de ella, acomódela, acaricie a su esposa. No la lleva a una manera que la degrade. Guíela de una manera que la atesore. Guíela de una manera que no sienta vergüenza. Guíela de una manera que ella se sienta servida por usted. Apréciela, Nútrala. 

Por último, ámela por completo. Esta es la imagen de Génesis 2:24. Hombre, quisiera que tuviéramos tiempo para desempacar esto, pero es el significado de una matrimonio de una solo carne. El matrimonio no es la unión de dos mundos. Por favor escuche esto. EL matrimonio no es la unión de dos mundos. Es el abandono de dos mundos para que se pueda formar uno nuevo. Un abandono de dos mundos. 

Esta es su vida. Ella es su vida. Ella es como su propio cuerpo. Únase a ella como una sola carne dice las Escrituras. Así que ámela completa. Este es el punto alto del segundo comando en el Nuevo Testamento. Ame a su vecina como así mismo. Ella está más cerca de ser su vecina, más que nadie. Así que ámela como a sí mismo. Ámela completamente. Y esto nos lleva a estas conclusiones. Esta es la imagen que tenemos en Efesios 5. 

Entonces, ¿Qué es lo que uno se lleva? ¿Cómo ponemos esto en práctica? Solo quiero colocarles tres ideas al frente. Una para esposos, una para esposas y una para ambos de un posible paso practico que pueden tomar desde este punto. 

Esposos, una conclusión práctica para ustedes. Esposos, sírvanle de mas a sus esposas. Cambien hoy, por la gracia de Cristo, a servirles de mas a sus esposas. Esta es la instrucción de Dios para usted. Es el gran llamado de Dios para su vida. No es sobre lo que es mejor para usted. Es lo que es mejor para ellas. Este es el momento donde en mi estudia esta semana, me pare y fui a donde Heather y dije, “Heather, ¿Cómo te puedo servir mejor?” No les diré lo que ella dijo, pero les diré que nos es lo que esperaba que dijera. 

Yo tenía muchas buenas ideas de cómo yo podría servirla mejor y ella tenía otra cosa. Así que ahora estoy estancado haciendo lo que las Escrituras me han dicho que haga, el cual es algo grande. Así que esposos, les reto que vayan a donde sus esposas y digan, “¿Cómo puedo servirte mejor? 

Integren esta oraciones a sus vidas diariamente, Dios ayúdame a servir a mi esposa hoy. ¿Cómo puede servir a mi esposa hoy? Esta es la voluntad de Dios para su vida y su matrimonio. 

Esposas, observen el liderazgo de sus esposos. Observen el liderazgo de sus esposos. Ahora esto es lo que quiero decir por eso. Yo se que cruzando por las mentes de muchas en esta salón esta, “Pastor, usted no entiende. Este es el problema. No veo a mi esposo dirigiéndose de la manera que él debería.” 

Así que en este punto quiero darles un recordatorio y una precaución. Un recordatorio y es basado en lo que hablas anteriormente. Recuérdese de respetar a su esposo, su amor por su esposo, su ministerio por su esposo, su ayuda con su esposo no es basado en lo que el trae a la mesa. Es basado en Cristo en usted. 

La precaución

Después el segundo, la precaución. Quiero prevenir a las damas que no se alejen de Efesios 5, que usted se siente con su esposo y le apunte a la cara y diga “Es tiempo que usted asuma la responsabilidad. Es tiempo que tú hagas esto y aquello.” Quiero prevenirle a que no esté demandando de esa forma cuando se refiere al liderazgo de su esposo en respuesta a Efesios 5. 

La razón es, la razón por la cual quiero prevenirles esto es porque tan pronto usted se convierta en demandante usted poco a poco está saliendo del rol que Dios ha pensado para usted. Tal vez con rapidez en algunas circunstancias y quiero prevenirle porque sus demandas para el pueden llevar a apagar el deseo de él para dirigir porque si él asume y comienza a guiar no sería por que estaría guiando a usted. Seria porque él esta cumpliendo con tus comandos. 

Así que quiero alentarles a correr a Dios y orar, orar con seriedad porque la realidad es que su esposo no puede guiar así al menos que Cristo haga la obra del de él. El no lo puede hacer al menos que Jesús haga la obra en el. Esto quiere decir que usted es completamente dependiente y desesperadamente para que Cristo haga esto en la vida de él. 

Así que ore por el. Ore por oportunidades para hablar con el ciertas cosas, pero tenga cuidado en mantener el enfoque de esas conversaciones a la esperanza de Cristo, al fundamento de Cristo y tenga cuidado en mirar a cualquier área pequeña donde el este guiando y alentando esas cosas en el. Aliéntelo es esas cosas. Aliéntelo. Ayúdele a guiar de esa forma. 

Las esposas y esposos, la última palabra de aliento. Esposas y esposos que Cristo os sirva. La belleza de esta imagen es que Cristo promete dar su gracia a nosotros. Esposo, si usted no se siente abrumado por Efesios 5 usted perdió todo el punto de nuestro tiempo juntos. 

La intención de Efesios 5 es para llevarnos a Cristo. Esposas, espero que en cierto sentido sientan una sensación de bienestar, ¿cómo puedo hacer esto?, ¿qué le parece esto? Espero que en algún sentido usted sienta eso porque es lo que se ha destinado para que usted llegue a Cristo. 

No estoy diciendo que estos últimos minutos que hemos tenido juntos es todo en el matrimonio, ahora todo debería estar bien, así que vamos a pasar a la próxima edición. Lo que estoy diciendo es que estos fundamentos en Efesios 5 son fundamentales. Son enormes y hasta que no nos centramos en estos, orar a través de estos y que estas verdades nos conduzcan a Cristo. 

No tenemos ninguna esperanza de experimentar el cumplimiento pleno de Dios en nuestro matrimonio. Necesitamos estas bases, estas verdades. Dios diseñó el matrimonio. Él sabe lo que debe buscar y lo diseñó para su gloria a través de su Evangelio y desea que eso sea una realidad en cada una de nuestras vidas. Espero que te des cuenta de que Cristo quiere servirle a usted, permitirle cuando se refiera al panorama del matrimonio. 

Eso es lo que quiero que hagamos. Quiero que vayamos a Cristo. Vamos a tener un tiempo de oración en respuesta a Efesios 5 hoy. Si son marido y mujer en este cuarto y están aquí juntos quiero invitarlos a pasar los próximos momentos orando juntos a la luz de Efesios 5. 

Una respuesta y oracion

Quiero invitarlos a tomar la mano de su esposo o esposa y empezar a orar juntos a la luz de Efesios 5. Si usted es esposo o esposa, que está aquí y su esposo o esposa no está aquí, entonces quiero invitarle a pasar este tiempo concentrado en la oración para él o ella y para usted mismo. 

Si usted es soltero aquí esta mañana quiero animarle a que, ante todo, a orar por parejas por todo este salón, orar por parejas por todo este salón y después orar por el diseño de Dios en su vida. Futuro esposo, el diseño de Dios para el matrimonio en su vida si eso es lo que Él tiene para usted. ¿Cómo se ve esto? y orar por usted y orar para que Dios le ayude a prepararse para eso. Dios mantendrá el enfoque de usted en su Palabra. 

Niños, estudiantes, quiero animaros a orar por mamá y papá. Ore por su mamá y papá que Dios los una en una manera más profunda. A medida que avanzamos en este tiempo de oración, quiero que sepan que hay personas que les encantaría orar con usted. Sé que hay dolores representados en este salón que son descubiertos en un mensaje y un texto como este. 

Sé que hay matrimonios dañados y me duele saber que hay de los matrimonios en el pasado. Quiero que sepan que a personas les encantaría orar con ustedes y animarlos en todo lo que puedan. 

Así que a medida que comenzamos a orar quiero invitar a los esposos y esposas, si a usted le gustaría venir en rodillas juntos delante de Dios y decir que queremos, queremos permanecer en su Palabra. 

Necesitamos su gracia para hacer esto una realidad en nuestras vidas. Tal vez las cosas están luchando y esta es una oportunidad para que usted ponga un interés en la corona y decir que se necesitan a Cristo. Tal vez las cosas van muy bien y todo este panorama le ha llevado de vuelta a sus necesidades por Cristo para que las cosas sigan yendo bien. 

Quiero invitarles a responder a Dios de cualquier forma que él los mueva, sobre todo para los esposos y esposas. 

Padre, te pedimos que durante este tiempo que se nos conceda gracia para ver al Señor Jesús como el ejemplo de lo que significa ser un esposo, al ver a su iglesia como un modelo de lo que significa ser una esposa y Dios, que restaures la belleza del Evangelio en nuestros matrimonios. 

Dios, te pido que tu gracia abundante transforme, consuele, anime y fortalezca a las parejas e individuos durante este tiempo a medida que respondamos en la oración, mientras corremos a ti basados en

David Platt

David Platt sirve como pastor en el área metropolitana de Washington, D.C. Es el fundador de Radical.

David recibió su doctorado del Seminario Teológico Bautista de New Orleans y es el autor de Don’t Hold Back [No te quedes donde estás], Radical, Sígueme, Contracultura, Algo tiene que cambiar, Before You Vote [Antes de votar], así como los varios volúmenes de la serie Christ-Centered Exposition Commentary [Comentario Expositivo centrado en Cristo]. 

Vive junto con su esposa e hijos en el área metropolitana de Washington, D.C.

LESS THAN 1% OF ALL MONEY GIVEN TO MISSIONS GOES TO UNREACHED PEOPLE AND PLACES.

That means that the people with the most urgent spiritual and physical needs on the planet are receiving the least amount of support. Together we can change that!